Portada » Filosofía » Voluntad de poder, superhombre, eterno retorno
se basa en la escisión entre la sociedad civil y el estado y consiste en sustraer o negar al pueblo voluntariamente o por la fuerza el derecho a dirigir su propio destino político, es decir, su soberanía con la consiguiente concentración de poder en esferas cada vez más restringidas, que lo ejercen el dominio e incluso la represión sobre el pueblo cuya soberanía detentan la escisión entre la sociedad civil y el estado se corresponden, a la división de la sociedad en clases, es la que controla el aparato del estado, y ve mermada su capacidad de decisión política.
En la que padecen grandes capas de la población sometidas a la autoridad intelectual que ejercen algunas instituciones, que dirige la conciencia de sus seguidores, adeptos o discípulos sometidos a la paralización colectiva y decidiendo por ellos lo que es verdadero o falso, lo que es bueno o malo, lo que se debe hacer o no hacer. Como es obvio entre estas instituciones destacan y tienden a tener poder aquellas que hacen valer los intereses de la clase dominante la sociedad.
en un primer sentido muy general la ideología es un conjunto de ideas y valores que existen en una sociedad en un momento dado. Ahora bien para Marx el término ideología tiene sentido peyorativo y significa conjunto de ideas y de forma no presentan una imagen falseada de la realidad y de las condiciones en que se desarrolla la vida de los hombres. Según Marx la ideología que predominan la sociedad es de ideología de la clase dominante. Marx critica la ideología, porque tiende a ocultar y enmascarar la situación de alienación y explotación en que vive el hombre, como fruto de la propiedad privada de los medios de producción y de la existencia de clases sociales.
señalemos por último el papel central que ocupa la antropología dentro de la obra de Marx, no sólo denota un interés descriptivo por el hombre, sino que manifiesta una filosofía humanista. Primero porque su fundamento último es de carácter ético y concretamente se cifra en la lucha contra la alienación del hombre. Segundo porque está contra la trascendencia religiosa y rechaza la existencia de un ser superior al hombre. Y tercero porque concibe al hombre como el auténtico sujeto de la historia, y que componen el tejido social y conduce los acontecimientos.
Nietzsche
marco histórico, social, cultural y filosófico:
Nietzsche fue un pensador extraordinariamente brillante y su vida transcurrió durante la segunda mitad del siglo XIX. Su filosofía se enmarca dentro del vitalismo, especialmente su exaltación de lo racional frente a lo vital. Quiso por ello desenmascarar primero y regenerar después la cultura occidental defendiendo la inversión completa de sus valores: morales, religiosos, ideológicos, políticos… murió en 1900 después de unos años sumido en la más completa locura.
Nietzsche vivió en el siglo 19 caracterizado histórica y políticamente por no ser episodios revolucionarios. Las causas de esta marcada agitación política hay que buscarles en las transformaciones económicas y sociales producidas por la industrialización. En efecto, la extensión de la revolución industrial en Europa comportó la consolidación definitiva del capitalismo como el modo de producción basado en el libre mercado, el trabajo asalariado y el rápido desarrollo tecnológico. Conllevó la formación de distintas clases sociales como la burguesía y el proletariado. Las ciudades fueron creciendo al mismo tiempo que las condiciones de vida que tenían los trabajadores eran aterradoras. Las reivindicaciones políticas y sociales como se ha dicho ya fueron numerosos en esta época. Durante la primera mitad del siglo fueron ocasionadas por el intento por parte de algunos estados europeos de restaurar antiguos privilegios monárquicos y aristocráticos y por otro lado fueron causadas también por la pésima situación de los trabajadores. Como la revolución de 1848 y la de 1871, que fue una revuelta obrera. Nace en nacionalismo que generó la mayoría de las guerras. Al principio fue de carácter marcadamente liberal y democrático pero más adelante se convirtió en imperialismo produciendo como resultado la expansión de colonialista desde el punto de vista cultural en el siglo XIX un afán por difundir la cultura. En poesía y literatura y arte triunfa el romanticismo que se inició en Alemania y luego se difundió por toda Europa con representantes como Heine, Espronceda, Bayrón… autores como Balzac y Zola y en pintura manet y renoir. Hay que mencionar también el asombro progreso y desarrollo de la ciencia.
Y apariciones de nuevas ciencias como la historia, la sociología, la psicología, la geografía, la biología. Y nuevos descubrimientos en física como los descubrimientos de Faraday, los rayos X….
el siglo XIX fue extraordinariamente fecundo en Corrientes y doctrinas filosóficas. Durante el idealismo alemán hegel tuvo gran influencia este idealismo partido la filosofía de Kant. El influjo del idealismo hegeliano fue tal que se ha llegado a decir que en gran parte de la filosofía contemporánea posterior en una continuación, una modificación o una reacción contra hegel : en efecto, el positivismo, que dominó durante gran parte de la segunda mitad del siglo XIX así como el marxismo deben entenderse como una reacción frente al sistema idealista. El positivismo fue una corriente fundada por Comte opuesta al idealismo que reivindica una filosofía centrada en los hechos y en la ciencia. Defendió asimismo que la ciencia era capaz de conocer la realidad tal y como es en sí. Paulatinamente se fue abandonando la concepción positivista de la ciencia en la medida en que la cifra fue reconociendo sus propios límites y dejo de presentarse como modelo único de conocimiento. El marxismo se opuso al idealismo hegeliano al defender un claro materialismo. A fin de superar la explotación del proletario y las desigualdades e injusticias. Durante las últimas décadas del siglo XIX surgieron nuevas corrientes filosóficas opuestas tanto al idealismo como los excesos matemátizantes del positivismo. Decenas y corrientes filosóficas como el vitalismo, historicismo, espiritualismo… la corriente vitalista a la que pertenece como figura Nietzsche llevará a cabo una profunda crítica contra la cultura occidental .
Nietzsche constituye uno de los principales representantes del movimiento filosófico denominado vitalismo. El término vitalismo en general se aplica a que la corriente doctrina filosófica que considera la vida como la rabia fundamental como algo irreductible a cualquier otro tipo de realidad. Vitalismo supone una reacción tanto contra los excesos del racionalismo y del idealismo filosófico como contra el pensamiento positivista. Según el vitalismo lo racional debe subordinarse a lo vital, la razón es la manifestación más la vida, la cual constituye el trasfondo profundo de lo que todo surge. Nietzsche desde su perspectiva vitalista se convierte en uno de los más radicales críticos de los principales sobre nuestra cultura que tradicionalmente ha servido para explicar erróneamente el mundo al oponerse a todo lo que es la naturalidad, espontaneidad, libertad, imaginación. Ahora bien Nietzsche no hace una exposición sistemática de sus ideas sino que emplea en muchas de sus obras aforismos, símbolos o metáforas. Emplea el método genealógico, es decir el análisis y etimológico e histórico de las palabras, a fin de investigar cómo se han originado y el enmascaramiento que ha sufrido a lo largo del tiempo. En sus obras podemos encontrar la muerte de Dios, la voluntad de poder, el eterno retorno y el superhombre.
La crítica de la cultura occidental y el mismo
la crítica de la tradición cultural de occidente: Nietzsche considera que la cultura occidental está viciado desde su origen que es una cultura nacional y dogmática y por eso decadente al oponerse a la vida, a los instintos. Su error principal consistió en haber inaugurado una visión exclusivamente racional del mundo, un acontecimiento del que son responsables Sócrates y platón.
Su gran conocimiento del mundo griego la distinguir un antes y después de Sócrates y platón considerando que a partir de estos filósofos la filosofía inició su decadencia. En su opinión Sócrates hizo triunfar la razón contra la vida y desde ese momento comienza la época del predominio de lo racional. Por su parte platón duplicó el mundo, es decir, inventó un mundo ficticio, el mundo externo de las ideas, al que concedió más realidad que a este mundo sensible en el que vivimos desde entonces la filosofía occidental ha quedado corrompida, ya que alimentar un mundo distinto de este se ha creído siempre que las cosas de valor supremo tenían un origen distinto tras este idealismo de platón y de toda la metafísica tradicional se esconde el menosprecio de la vida tal y como ella es. Nietzsche no perdona casi nada a los filósofos, sólo parece salvar a Heráclito, el único filósofo según él que no falsear la realidad a concebirla como algo siempre cambiante, el devenir y aceptar el testimonio de los sentidos. Con posterioridad a él la filosofía estimará prioritariamente el testimonio de la razón construyendo conceptos tales como el de ser. Nietzsche considera en una de sus obras en lenguaje de los conceptos son el origen del falseamiento de la realidad: así el lenguaje es incapaz de representar correctamente las intuiciones que poseemos de la realidad. Por su lado, los conceptos son abstracciones que han abandonado las diferencias individuales, cáscaras vacías que han perdido su contenido originario y que viene suplantar el lugar ocupado antes por la intuición. Los hombres que han olvidado el verdadero origen de los 11, la metáfora y la intuición, y las han tomado como sacar representaciones de la realidad hacen lo posible la metafísica tradicional. La vida no puede estrecharse a través de conceptos pues ésta es un continuo cambio.
esta crítica está estrechamente ligada a su crítica a la filosofía. Laboral que critica Nietzsche es la moral tradicional cristiana dominante en occidente, por ser una moral antinatural y contra instintiva que establece preceptos y valores en contra de los instintos primordiales de la vida. La base filosófica de esta moral contra natural es el platonismo: la herencia de platón la recogió el cristianismo de tal modo que el mundo de las ideas sirve de más allá religioso para los cristianos. Así esta moral platónico cristiana con el centro de gravedad del hombre no está en la vida, sino en otra. Por ello hay que negar a Dios. Por otra parte de Nietzsche realiza un análisis del origen de la moral entre los griegos y de la transformación de los valores morales a partir de Sócrates y platón. Lo primero griegos practicaban la virtud; a partir de Sócrates y platón sufren la y y sólo se admite como único bien la sabiduría. Su investigación filológica le condujo a la siguiente originariamente el término malo aluvial hombre siempre como vulgar y plebeyo y el vocablo bueno al hombre que lo decida, poderoso y noble; pero estas naciones sufren una inversión y pasa a llamarse malvado al que antes era bueno y viceversa al tiempo que adquieren un significado moral. Nietzsche distingue dos tipos básicos de moral: 1- la moral de los señores que es una moral creadora de valores. En ella la antítesis problema no es sinónimo de aristocrático y despreciable. Es despreciable el cobarde, el mezquino, el desconfiado… y es aristocrático el hombre que se siente a sí mismo como creador de los valores. 2- la moral de los esclavos se caracteriza por el instinto de venganza hacia toda forma de vida superior. Esta moral pretende nivelar e igualar a todos los hombres mediante la compasión, la paciencia, la humildad…
Nietzsche dice que la moral de los esclavos es una moral que reduce a los hombres a animales de rebaño. En definitiva, el no es amoral; su moral discurre por caminos muy diferentes a los del cristianismo, es una moral que exalta la vida en su completo desarrollo.
respecto al origen de la religión, Nietzsche afirma que toda religión nace del miedo, de la angustia y de la impotencia que siente el hombre en sí mismo. Dios no es otra cosa que una dimensión de la existencia humana proyectada fuera de esta por el hombre para combatir justamente ese miedo. Además el cristianismo ha invertido los valores de la antigua Grecia que eran valores de la vida y se ha inventado un mundo celestial que conlleva desvalorizar el mundo terrenal. Supone la invención de otro mundo y el desprecio de este. Por fin con la nación del pecado se atenta contra la vida, pues supone aniquilar las formas y valores más nobles de la misma.
Nietzsche va a criticar la consideración de la ciencia que tenía el positivismo de su época, por pretender que la ciencia es el único saber capaz de llegar a conocer la verdadera realidad. Nietzsche piensa que las ciencias no nos ayudan realmente a conocer las cosas, sino simplemente a establecer relaciones cuantitativas entre ellas, en definitiva, las ciencias proceden de una matematización de la realidad. Con ello no alcanzamos nunca a responder los grandes interrogantes de la existencia. La metodología científica que ataca Nietzsche se relaciona con la metafísica tradicional, porque se inspiran los conceptos, en la lógica, productora de las diferencias que es un auténtico real. Su crítica a la ciencia tiene dos vertientes:1- la ciencia investiga el curso de la naturaleza pero no por hacer juicios sobre la vida. Y 2- la ciencia está servicio de los intereses creados concretamente el estado la ha tomado a su servicio con el fin de explotarla para sus fines.
El nihilismo no es una doctrina filosófica sino una consecuencia de la historia de nuestra cultura. Según Nietzsche, la cultura occidental se van a encontrar sumida en el nihilismo. Nietzsche emplea el término nihilismo en doble sentido. A primer lugar del nihilismo pasivo, que está a punto de llegar puesto que todos los valores creados por la cultura occidental son falsos valores, son la negación misma de la vida. Cuando esos valores se derrumben entonces nuestra civilización se quedará sin los valores que ha poseído hasta ahora. La situación inminente se anuncia en el agotamiento y la decadencia de nuestra civilización. Y luego está el nihilismo activo, consiste en destruir los valores de la tradición, que son falsos, vacíos, antes de que se derrumben por sí solos. Sólo así se establecerán las bases para poder crear valores nuevos.
Este es el doble sentido, asimismo, de su célebre expresión Dios ha muerto, significa por un lado la destrucción de los antiguos ideales, conceptos, valores… que sostenían la tradición, la historia y la cultura de occidente. Por otro lado, significa también reivindicar al hombre como ser capaz de crear nuevos ideales o valores. Con ello ha de ser posible que el hombre liberado de mitologías y supersticiones, se podrá convertir en creador de su propio destino y llegar, a ser hombre.
no define con claridad en ningún sitio, pero Nietzsche se refiere a ella constantemente. La voluntad de poder es la voluntad de ser más, vivir más, superarse, demostrar una fuerza siempre creciente. Los caracteres de la voluntad de poder son los mismos que los de la vida. La voluntad de poder es la esencia del único mundo material que hay. La voluntad del poder supone afirmar el valor del mundo que nos tramiten los sentidos y que no es sino el mundo de la vida: un mundo de apariencias, el devenir. Un mundo que ha querido ser anulado en la reflexión filosófica de occidente, siempre preocupada por encontrar una realizarles más seguras y aquellas que proporcionan los sentidos. La voluntad de poder es también en gran medida, voluntad creadora de valores y aniquiladora de los anteriores valores desde la voluntad de poder hay que decir que Nietzsche modifica la noción de verdad. Algo es verdadero por su valor pragmático: es verdad lo que aumenta el poder, lo que sirve a la vida. Defiende también una teoría del conocimiento perspectivista: no hay hechos sino interpretaciones de los mismos. Conocer el mundo, conocer la realidad es interpretarla desde unas perspectivas siempre distintas.
Nietzsche presenta el eterno retorno como la más alta fórmula de la afirmación de la vida. La voluntad de poder alcanza su más alto grado de presión en el eterno retorno. El eterno retorno implica ser fiel a la tierra, aceptar la vida tal y como ella es, sin ningún tipo de disimulo o subterfugio. Con el eterno retorno ni se rompe con la concepción lineal del tiempo presente en todos los sistemas filosóficos posteriores a la aparición del cristianismo en la vida del individuo, el eterno retorno supone que todo como tanto la risa como llanto volverán una y otra vez por siempre. Por eso hay que amarlo todo, la totalidad de la vida. El eterno retorno simboliza en su eterno girar este mundo es el único que hay y, además, que todos bueno es justificable, puesto que debe repetirse. Nietzsche expresa el deseo de que todo sea eterno: el no querer que nada sea distinto ni el pasado ni el futuro ni por toda la eternidad. El eterno retorno abre las puertas al superhombre.
para Nietzsche este amor eterno hacia la vida misma proporción al hombre en medio de ir superándose continuamente. Nietzsche presenta al superhombre como el resultado de tres transformaciones simbólicas; escribe que el espíritu se convierte en camello, el camello en León y el león, por fin, el niño, es decir la transformación del hombre en superhombre pasa por tres estadios. El camello simboliza a los que se contentan con obedecer ciegamente. El camello quiere ser más y se transforma en León que simboliza al hombre que se libera de sus cargas, que la agobian y oprimen. Pero también en León tiene necesidad de transformarse en niño, que representa poder vivir libre de prejuicios, crear una nueva tabla de valores. Nietzsche presenta al superhombre como un niño inocente que juega con la vida libremente y propone la recuperación de los impulsos vitales. En resumen los caracteres del superhombre son:A) el ansia de vivir, es decir que superhombre valorar la vida sin límite alguno, las virtudes llama sola fuerza física el poder la rebeldía…B) la superación de la moral tradicional, es superhombre no está sometido a ningún precepto moral, porque se sitúa por encima del bien y del mal; su conciencia es la conciencia de la naturaleza: los que favorece la naturaleza es bueno y lo que perjudica es malo.C) conlleva la muerte de Dios, en la medida en que ello representa lo contrario de la vida. Rechaza toda trascendencia, todo más allá, es el más acá lo que preocupa y quiere vivir con intensidad. En definitiva, e l superhombre vive la voluntad de poder como la consecuencia de las ganas de vivir y acepta El eterno retorno.