Portada » Tecnología » Ventajas y Componentes del Sistema de Calefacción por Suelo Radiante
El suelo radiante es un sistema de climatización en el que todo el pavimento actúa como emisor de calor (o frío). La transmisión térmica se produce de abajo hacia arriba, calentando primero los pies y luego el resto del cuerpo, proporcionando una sensación de confort superior a la de otros sistemas.
El sistema opera en las siguientes fases:
Se apoya lateralmente sobre una banda perimetral (para permitir dilataciones) y horizontalmente sobre un film de polietileno (para evitar la humedad). Normalmente se utilizan paneles moldeados de poliestireno expandido con un acabado de film de alta resistencia. Los «tetones» del panel facilitan la colocación y fijación de las tuberías. Las juntas machihembradas evitan filtraciones de hormigón.
Se fija antes del panel aislante. Aísla la base del sistema de los muros, permite la dilatación de la losa y evita puentes térmicos.
Si existe riesgo de humedad, se coloca una película de polietileno entre el forjado y los paneles para impedir el paso del vapor.
Compuesta de cemento, piedra volcánica y agua, o un mortero especial (agua, aglomerante y material refractario). Distribuye uniformemente el calor. Debe ser resistente y estar nivelada. Se utilizan aditivos (plastificantes y fluidificantes) para evitar retracciones, fisuras y burbujas de aire, mejorando la transmisión del calor.
Es la última capa que atraviesa el calor antes de llegar al ambiente. El suelo radiante es compatible con una amplia variedad de pavimentos.
Se deben considerar los siguientes factores:
Se calcula en función del área del local y la distancia entre las líneas de tubería.
Malla de hierros electrosoldados de pequeño diámetro que ayuda a fijar las tuberías a las placas de soporte durante la colocación del mortero.
Cortes en el hormigón para prevenir fisuras debidas a los movimientos de dilatación y contracción.