Portada » Magisterio » Tipos de observación
Todos ellos desencadenan reactividad en los sujetos que vamos a someter a observación. Los que captan la imagen son los más rechazados, dado que se produce una explícita pérdida de anonimato por lo que suele ser más fácilmente utilizable en espacios o escenarios abiertos, donde su uso suele pasar inadvertido. En el caso de que la acción de observación se lleve a cabo en espacios privados, el uso de estos medios va a requerir un intenso y arduo proceso de negociación.
Los sistemas de de audio son reconocidos como menos agresivos. Los micrófonos que se instalan con cierta discreción en los espacios donde se realizan entrevistas pueden provocar cierta inquietud en un primer momento, pero al cabo de un tiempo, se olviden de la presencia del «intruso» pues, en general, la población se va acostumbrando a ser observado por cámaras.
No obstante, la forma más clásica de recogida de información, la redacción de notas y apuntes con regularidad diaria, sigue constituyendo la fuente primordial de material para el análisis.
La disciplina es imprescindible a la hora de recoger de forma sistemática toda la información que le resulte relevante y lleva emparejada la alternancia de etapas de observación y de etapas de anotación.
No podemos dejar en manos de nuestra memoria la elaboración de una anotación con mucha posteriori dad a la ocurrencia del acontecimiento, aun cuando podamos contar con apoyo técnico de audio o vídeo. La impresión del momento, las emociones sentidas y la interpretación de lo observado puede sufrir cierta variación además de la selectividad que imprime nuestra memoria a todo lo vivido. Por tanto, el registro ha de hacerse a la mayor inmediatez posible, en caso contrario, y si se lleva a cabo en escenarios cerrados, el observador deberá recurrir a medios técnicos discretos y al entrenamiento de su memoria, si bien sigue siendo menos recomendable.
Los apuntes que anotamos deben reflejar los acontecimientos, los hechos han de ser descritos con todo detalle, ya que son relevantes en la fase de interpretación y análisis que, se va intercalando con la propia recogida de información
La fidelidad en el registro es la primera máxima de la recogida de datos, principio que hay que extender al registro de las interpretaciones que ofrecen los sujetos observados y de aquellas elaboradas por el propio investigador/observador.
La fiabilidad y la validez descansan sobre el uso y adaptación de métodos de registro objetivos. Este punto es especialmente importante cuando en la investigación participan varios observadores.
Las notas registradas se recopilan en forma de diario de campo, pieza clave de la información antropológica, pues en él se recoge lo que realmente hace la gente, sus reacciones frente al investigador y el estado de ánimo de éste, que puede influir en su percepción de los hechos: dónde se ha estado, a quién se ha visto, qué es lo que hacía y cómo, el tema de conversación,… Luego, con este guión, resulta más fácil reconstruir las experiencias.
El formato final del diario de campo no puede ser diseñado previamente, pues sufre continuas transformaciones; cada situación es susceptible de ofrecer una modalidad diferente de registro, y la suma de ellas va a permitir, controlar el tempo de la investigación, la subjetividad del investigador, las estrategias de búsqueda y descubrimiento de resultados, así como las formas de atajar los problemas que se van presentando a lo largo del proceso de construcción del conocimiento. Es, a la vez, una herramienta, un documento y un texto;
Es la esencia de la observación participante.
Mantiene similitudes con algunos géneros narrativos como los diarios, las memorias y las autobiografías. Con los primeros comparte la elaboración regular, cotidiana, del día a día, aunque se distancia en su objetivo. Los diarios de campo se construyen con la intención de describir, interpretar y explicar determina das situaciones de la realidad social. Con las memorias y las autobiografías tienen en común el carácter personal, pero les distancia la temporalidad de su elaboración. El diario de campo, al construir se día a día, no comparte la perspectiva global que, madurada con el paso del tiempo, caracterizan a los otros dos géneros.
Durante la realización del trabajo de campo, el investigador cuenta con diferentes fuentes de información
:
-revisión documental previa,
-la que surge al hilo del estudio ofrecida por otros investigadores y por los informantes,
-entrevistas de mayor o menor formalidad, etc.
Estos y otros muchos estímulos obligan al observador a realizar anotaciones sistemáticas que permitan enlazar los enfoques etic y emic con un objetivo analítico claro