Contexto Histórico de la Teoría Sociocultural de Vygotsky

La teoría sociocultural de Vygotsky surgió en un periodo de grandes cambios sociopolíticos. Se ubica históricamente en la época posrevolucionaria y socialista, específicamente en tres momentos:

1. Periodo Revolucionario (1917-1929)

Durante este periodo, los dirigentes alentaron la libertad científica y académica. Se consideraba que la ciencia solo podía avanzar en un clima de debate. Se propuso que la psicología debía desarrollarse sobre los lineamientos del materialismo dialéctico.

2. Periodo Estalinista (1930-1954)

Esta etapa se caracterizó por un gobierno de colectivización forzada en el campo y la industrialización, así como por un fuerte control social y represión. La investigación en psicología dejó de estar en primer plano y perdió contacto con la psicología occidental. Se utilizó principalmente como una herramienta para el uso inmediato del régimen político, como el entrenamiento eficaz de la burocracia.

3. Periodo de Desestalinización (1955 en adelante)

En este periodo, la psicología soviética volvió a tener contacto con trabajos sobre psicología realizados en otros países. Se publicaron revistas científicas después de 20 años de inactividad. Dos años después de la muerte de Stalin, en 1956, los trabajos y obras más importantes de Vygotsky se reeditaron.

El Materialismo Histórico

El materialismo histórico es una postura filosófica que tiene como tesis central marxista que «No es la conciencia de los hombres la que determina su ser, sino que, al contrario, es su ser social el que determina su conciencia».

Conceptos Fundamentales de la Teoría Sociocultural de Vygotsky

1. Funciones Mentales

Vygotsky distingue entre funciones mentales inferiores y superiores:

• Funciones mentales inferiores: Son aquellas con las que nacemos. Son naturales y están determinadas genéticamente. El comportamiento derivado de estas funciones es limitado.
• Funciones mentales superiores: Se adquieren y se desarrollan a través de la interacción social. Están determinadas por la forma de ser de una sociedad y, por ende, por la cultura.

El conocimiento es el resultado de la interacción social. En la interacción con los demás adquirimos conciencia de nosotros mismos y aprendemos el uso de los símbolos, que nos permiten pensar en formas cada vez más complejas. Para Vygotsky, a mayor interacción social, mayor conocimiento, más posibilidades de actuar y funciones mentales más robustas.

El ser humano es ante todo un ser cultural, y esto es lo que establece la diferencia entre el ser humano y otros seres vivientes, incluyendo los primates.

Podría decirse que somos porque los demás son.

2. Habilidades Psicológicas

Las habilidades psicológicas, o funciones mentales superiores, se manifiestan primero en el ámbito social y luego en el ámbito individual. Por ejemplo, cuando un niño llora porque algo le duele, expresa dolor como una función mental inferior, una reacción al ambiente. En un segundo momento, el llanto se vuelve intencional y el niño lo usa como instrumento para comunicarse.

Este proceso se describe como la transición de lo interpsicológico a lo intrapsicológico.

3. Zona de Desarrollo Próximo (ZDP)

La Zona de Desarrollo Próximo se refiere al potencial de desarrollo que se alcanza mediante la interacción con los demás. Nuestro conocimiento y la experiencia de los demás posibilitan el aprendizaje. Mientras más rica y frecuente sea la interacción con los demás, nuestro conocimiento será más rico y amplio.

Inicialmente, las personas (maestros, padres o compañeros) que interactúan con el estudiante son, en cierto sentido, responsables de su aprendizaje.

4. Herramientas Psicológicas

Las herramientas psicológicas son los mediadores que permiten la interacción social y el paso de las funciones mentales inferiores a las superiores, así como de las habilidades interpsicológicas a las intrapsicológicas. Son fundamentales para el aprendizaje y la construcción del conocimiento.

Ejemplos de herramientas psicológicas incluyen: los símbolos, las obras de arte, la escritura, los diagramas, los mapas, los dibujos, los signos y los sistemas numéricos.

Las herramientas psicológicas median nuestros pensamientos, sentimientos y conductas. Nuestra capacidad de pensar, sentir y actuar depende de estas herramientas.

5. El Lenguaje

El lenguaje es la herramienta psicológica por excelencia. Posibilita la toma de conciencia de uno mismo y el ejercicio del control voluntario de nuestras acciones. Con el lenguaje, ya no solo imitamos o reaccionamos al ambiente, sino que tenemos la posibilidad de afirmar o negar, lo que indica que el individuo tiene conciencia de sí mismo y actúa con voluntad propia.