Portada » Historia » Revoluciones Españolas de 1854 y 1868: Contexto, Desarrollo y Consecuencias
Provocada por años de sequía, ocasionó una crisis de subsistencia y carestía de productos que afectó a las clases más desfavorecidas.
Nuevos gobiernos ultraconservadores e inestabilidad política. Continuas disputas entre las tendencias moderadas y diferentes grupos enfrentados, además de divisiones internas. Escándalos financieros y corrupción política en torno a la construcción del ferrocarril.
La revolución se originó con una revuelta popular urbana organizada en Juntas Revolucionarias que reivindicaban:
Esta revuelta coincidió con un pronunciamiento militar progresista y moderado que lanzó el Manifiesto del Manzanares, en el que reivindicaban:
Redactan el Manifiesto del Manzanares (por Cánovas del Castillo), difundido por el uso del telégrafo.
Enfrentamientos entre sublevados y vicalvarados.
Las Juntas Revolucionarias reivindicaban:
En Madrid hubo batallas urbanas.
Triunfa la revolución y entran a gobernar los moderados aperturistas de O’Donnell y los progresistas de Espartero, comenzando una nueva etapa: el Bienio Progresista.
El general Topete se pronuncia con la armada en Cádiz; Prim y Serrano con el ejército de tierra.
Enfrentamiento militar en la batalla del puente de Alcolea entre las tropas de la reina y sublevados.
Redactaron el Manifiesto de la Revolución, conocido como «¡Viva España con honra!», en él se quejan de:
Proponen:
La Junta Revolucionaria de Madrid recibe el poder de gobierno de Isabel II. Hubo Juntas Revolucionarias en muchas ciudades que reclaman:
La revolución triunfa, la reina sale de España y el partido moderado pierde el poder. No se proclama ni la monarquía ni la república.
Nace con la última etapa del reinado de Isabel II, se inicia con la caída de Espartero.
Acuerdo entre la Iglesia y el Estado. La Iglesia aceptaba la desamortización y la legitimidad de la reina; el Estado suspendía la desamortización y devolvía los bienes que no habían sido vendidos, y se obligaba a mantener los gastos del culto y clero.
Pacto firmado en 1866, es un acuerdo de coalición entre el Partido Progresista y Demócrata, al que poco después se suma la Unión Liberal. Se pacta expulsar del trono a Isabel II y cambiar la forma de gobierno a través de un pronunciamiento militar en Cádiz en 1868, bajo el mando de Topete.
Surge como resultado de la modernización económica, desarrollo del capitalismo industrial y financiero, y la influencia de la lucha obrera en otros países. Nace con la I Internacional o AIT en 1864, influido por el anarquismo y socialismo. Defiende la soberanía popular, antiestatalismo, anticlericalismo, individualismo, fe en el progreso, cosmopolitismo y ateismo. Su plasmación fue la Federación Regional Española de la AIT.
El campesinado quería un reparto de tierras, realizando brotes revolucionarios para conseguirlo. El Estado respondió con dureza y disturbios.
Los obreros buscaban reivindicaciones laborales y políticas. Se organizaron en sindicatos (AIT), luchando mediante la huelga, manifestaciones y atentados. El Estado respondió con una dura represión.