Portada » Filosofía » René Descartes: Pensamiento, Método y Sustancia Infinita
Las ideas innatas son aquellas que residen en nuestra mente desde el nacimiento y no provienen de la experiencia sensorial. Son, en esencia, el producto del pensamiento a través del mero ejercicio de pensar.
Descartes propone la duda metódica como un camino para alcanzar una verdad indubitable. A diferencia de la duda escéptica, que implica la suspensión del juicio, la duda cartesiana busca una base sólida e incuestionable para el conocimiento. Este proceso implica cuestionar gradualmente todas nuestras creencias.
Para Descartes, el pensamiento (cogitatio) abarca toda actividad consciente del espíritu. La conciencia se convierte en el centro de la experiencia humana.
El dualismo antropológico en Descartes postula que el ser humano está compuesto por dos sustancias distintas:
Descartes dirige su atención al análisis de las ideas innatas, enfocándose particularmente en la idea de Infinito, que él equipara con la idea de Dios. Considera que la idea de Infinito o Dios es innata porque no la adquirimos a través de la experiencia ni puede derivarse de otras ideas, ya que lo finito no puede generar lo infinito. A partir de esta idea innata de Dios, Descartes argumenta su existencia mediante tres argumentos:
En su obra «Discurso del método para dirigir bien la razón y buscar la verdad en las ciencias«, Descartes expone su método, que se encuentra intrínsecamente ligado a la ciencia y la filosofía en su pensamiento. Este método busca resolver disputas teóricas mediante un conjunto de reglas «ciertas y fáciles» que permiten discernir lo verdadero de lo falso y aumentar progresivamente el conocimiento.
La aplicación del método cartesiano implica una reconstrucción del conocimiento, eliminando prejuicios y verdades basadas en la autoridad. Descartes se inspira en:
1Evidencia: 2 AnálisisDividir.3 Síntesis 4 Comprobaciones.
Explica la aplicación
del método cartesiano a la realidad (duda metódica, desarrollo)Descartes comienza a aplicarlo a la concepción de la
realidad (metafísica, raíz del árbol)Primera regla del método (evidencia): sólo podemos aceptar
como verdadero aquello que se nos presente con absoluta evidencia, aquello de
lo que no podamos dudar.Duda
metódica: Descartes adopta la duda como método, como camino para
alcanzar una verdad absolutamente evidente de la que nadie pueda dudar (lo
contrario de la duda escéptica -suspensión de juicio-). Nos vemos obligados a
poner entre paréntesis todas nuestras creencias de modo gradual: (sigue en la
siguiente diapositiva).Duda metódicaDuda
de los sentidos Duda de nuestra razón
Duda de que el mundo exista realmente Hipótesis del
genio maligno
“Pienso, luego existo” (“Cogito, ergo sum”)
De la duda surge un “resto indubitable”, una verdad que resiste toda duda, incluso
la extraña hipótesis del genio maligno: “estoy
dudando .Dado que la duda es una forma de pensamiento, Descartes
concluye: “pienso luego existo.Sustancia pensante
El pensamiento (cogitatio, actividad de pensar) es
para Descartes todo aquello que ocurre en nosotros, todo acto consciente del
espíritu (la conciencia).El mundo queda encerrado
dentro de la conciencia, y como veremos más adelante, habrá muchas dificultades
para volver a contactar con la realidad.La verdad del cogito es una intuición
pura, inmediata y evidente de la conciencia. Se trata de una idea clara y
distinta.Es la primera verdad sobre la que se fundan todas las demás