Portada » Filosofía » Relaciones sociales entre los hombres y las relaciones de producción en la salud
La tesis central del materialismo histórico: la producción económica es la base de cualquier sistema social, y el fundamento para explicar cualquier fenómeno histórico y para comprender la propia evolución de la historia.
Queda claro que lo primero es la esfera económica (praxis) y después la teoría.
a la base de todo sistema social hay unas estructuras económicas, unas fuerzas productivas y unas relaciones de producción que han de determinar a todo el sistema.La estructura económica determina las estructuras sociales, políticas, jurídicas e ideológicas de esa sociedad y que, determina el desarrollo de todas esas instituciones a lo largo de la historia.
Esta estructura económica de la sociedad se estudia a partir de dos conceptos fundamentales en Marx:
Sirve para analizar la «relación del hombre con la naturaleza» (H/N) para la transformación de ésta. Marx va a interpretar las relaciones de los hombres entre sí por medio del trabajo. Estas fuerzas productivas incluyen tanto el trabajo como los medios de producción.
sirve para analizar la «relación del hombre con los demás hombres» (H/H) en la transformación de la naturaleza. Son las relaciones que se establecen entre los propietarios de los medios de producción y los trabajadores.
Los hombres no eligen libremente sus relaciones sociales, sino que éstas vienen condicionadas por el lugar que ocupen en el sistema de producción.
Sobre esta base se levanta la superestructura compuesta por las instituciones jurídico-políticas y por las estructuras ideológicas.
La superestructura es un reflejo de la infraestructura.
La relación entre estructura y superestructura es una relación dialéctica. Marx afirma que «la realidad social determina la conciencia» (y no al revés).
– El conflicto estalla por el desarrollo normal de las fuerzas productivas, las cuales ya no encuentran un marco adecuado en las relaciones de producción; de este modo se entra en una fase de revolución social que provoca un cambio en la infraestructura económica, y al modificarse la base económica todas las superestructuras de la sociedad se derrumbarán más o menos rápidamente.
– La historia se conduce por el desarrollo de las fuerzas productivas, la principal de las cuales es el trabajo humano.
La dialéctica es el motor de la historia, la historia está animada por la presencia de la contradicción en el seno de la realidad, esto es, en lo económico.
– Con esa lucha de clases se camina hacia la sociedad sin clases y la instauración del comunismo, que es el sentido de la historia. Esta marcha de la historia será vendrá a acabar con las alienaciones y permitirá la realización total del hombre.
Si bien esta marcha es progresiva y por etapas. La revolución social se producirá cuando se creen las condiciones materiales necesarias y los explotados tomen conciencia de clase oprimida.
La historia conoce cinco tipos de producción: el de la comunidad primitiva, el esclavista, el feudal, el capitalista y el socialista.
La base del régimen de producción del colectivismo primitivo es la propiedad social. Los medios de trabajo y productos obtenidos pertenecían a la sociedad.
Las relaciones sociales eran de dominio y sometimiento. El amo propietario ejercía dominio completo sobre las fuerzas productivas.
Las relaciones sociales eran parecidas al esclavista. Había una propiedad total de los señores sobre los medios y sobre el trabajador (siervos). El modo de producción feudal se basaba en una economía débil tendente al autoconsumo. Los medios de producción eran muy limitados.
El individuo es el productor y la tierra es la fuente de riquezas. Sin embargo, todo sistema económico y todo modo de producción lleva en sí mismo los gérmenes de su destrucción.
En los alrededores de las ciudades y de los núcleos urbanos había nacido una clase social nueva, la burguésía, que se dedicaba al comercio. Ahora bien, para comerciar hacia falta que se aumentara la producción. En cambio, la burguésía le va a disputar y terminará arrebatándole el poder económico, social, político e ideológico. Este es el origen de las revoluciones burguesas y del modo de producción capitalista.
– Su base es la propiedad privada de los medios de producción, aunque el trabajador (proletario) es «jurídicamente libre», sin embargo se ve obligado a vender su fuerza de trabajo al patrono. Entonces, en la práctica deja de ser libre y permanece alienado.
El capitalismo lleva en sí mismo el germen -la clase social- que lo llevará a su destrucción, es decir, «el capitalismo engendra sus propios sepultureros»: la revolución proletaria. La burguésía, al apoderarse de los medios de producción, dejó al proletariado sin más riqueza que su propia fuerza de trabajo. El capitalista se apropia impunemente de todo lo que producen los asalariados. Esta es la esencia del capitalismo:
la incompatibilidad entre la burguésía y el proletariado.
– ¿Qué ocurriría entonces con el modo de producción burgués o capitalista?: Por eso hace falta una nueva clase social que pueda resolver esas contradicciones estableciendo una sociedad en la que se reconozca el carácter social del trabajo después de abolir la propiedad privada de los medios de producción.
. Con el desarrollo histórico se va avanzando hacia la liberación, cada vez la explotación es más suave.
Marx considera el capitalismo como una fase necesaria, ya que tiene de positivo el crear las condiciones materiales necesarias para dar el salto después a la