Portada » Historia » Reinado de amadeo de Saboyá resumen
12.4. EL SEXENIO DEMOCRÁTICO 10868-1874): INTENTOS DEMOCRATIZADORES. LA REVOLUCIÓN, EL RElNADO DE AMADEO l Y LA PRlMERA República.
La revolución de 1868 fue inicialmente un golpe militar encabezado por varios generales. El apoyo popular vino cuando los partidos formaron juntas locales y provinciales, entregaron armas a la población y organizaron a los llamados Voluntarios de la Libertad. Desde el dia 17 de Septiembre, en que el almirante Topete se sublevó con su escuadra en Cádiz, los cuarteles del país se fueron sumando , hasta que el dia 28, en Alcolea, las fuerzas sublevadas derrotaron a las gubernamentales. Al dia siguiente Isabel ll inició su exilio. La revolución triunfó por los Intereses. A los grupos políticos de la conspiración se unieron financieros e industriales, conscientes de que el gobierno isabelino era incapaz de superar la crisis económica. Pero una vez conseguido el exilio de la reina, los conspiradores procedieron a detener la revolución. El nuevo gobierno, con Serrano, Prim y Sagasta a la cabeza, ordenó la disolución de las juntas y de los batallones de Voluntarios y Ia devolución de las armas. Las elecciones se celebraron mediante sufragio universal masculino. El debate principal giró en torno a la forma de Estado, Monarquía o República. El resultado fue una mayoría monárquica. Las Cortes elaboraron la Constitución de 1869, la primera democrática de nuestra historia . El país se constituía como una monarquía parlamentaria con estricta separación de poderes :el legislativo (Cámaras) y el ejecutivo (Rey, pero con poderes muy limitados) . Éstos, además, debían responder de su gestión ante las Cortes. El poder judicial (jueces). El texto incluía una declaración de derechos detallada, se incluían los de libertad, derecho al voto , libertad de enseñanza expresión, reuníón y asociación… Se aprobó la libertad de culto, pero también el compromiso del Estado de mantener el culto y clero católicos. La Constitución ratificaba el sufragio universal, y por tanto la plena soberanía nacional. Los electores, varones de más de veinticinco años, elegirían directamente el Congreso.
El gobierno de Prim y la búsqueda de un rey (1869-1870). Serrano se convirtió en regente, y Prim formó un gobierno de progresistas y demócratas. Se aprobó una amplia legislación, en el terreno económico, se adoptó una política librecambista con el objetivo de relanzar la economía. Se adoptó una reforma monetaria que puso en circulación la peseta. El nuevo régimen tuvo que enfrentarse a una doble crisis: la guerra en Cuba y el clima de agitación social. “La crisis cubana. En Octubre de 1868 el coronel Céspedes se subleva contra el gobierno colonial, que desembocó en una guerra de diez años. El conflicto cubano hipotecó la Hacienda e impidió las reformas prometidas durante la revolución. El desengaño político, la depresión económica y la acción republicana y obrera derivaron en un clima social de agitación. En semejante situación de inestabilidad emprendíó Prim la tarea de buscar un rey. Tras varios intentos fracasados, fue finalmente Amadeo de Saboyá, hijo del rey de Italia, Víctor Manuel, quien aceptó la Corona, gracias a la gestión personal de Prim. El reinado de Amadeo de Saboyá (18714872) comenzó con la noticia del asesinato del general
Prim, en un atentado, que aún hoy se desconoce quiénes fueron los responsables. El reinado fue un fracaso. En ello tuvo mucho que ver la ausencia de Prim. Las clases dirigentes le identificaban con la democracia, el desorden social y con una dinastía extranjera. Le hicieron el vacío en la Corte y le aislaron. Cánovas, se fue abriendo paso entre las élites del país, que se hicieron así alfonsinas. También le rechazaron los industriales y financieros, que no creían que el rey diera estabilidad al país, y estaban asustados por el crecimiento del movimiento obrero. Ni que decir tiene que igualmente le rechazaban los carlistas, los republicanos y las clases populares. Fueron dos años de gobiernos inestables. El partido progresista se dividíó en dos grupos: los constitucionales de Sagasta más conservadores, y los radicales, liderados por Ruiz Zorrilla. En el segundo año de reinado la situación empeoró. El conflicto cubano se agravó, y se añadió el estallido de la tercera guerra carlista en el País Vasco, que en el verano se extendíó a Cataluña. Amadeo l sólo esperaba abdicar. Aprovecho una grave crisis entre el jefe de Gobierno y el Cuerpo de Artillería para dimitir el 11 de Febrero de 1873. Esa misma noche, el Congreso proclamó la República.
La l República. El Congreso eligió a Figueras, un republicano moderado, como Jefe del Poder Ejecutivo. La República nacía de forma irregular y sin apoyos potíticos suficientes. En el interior, los sectores conservadores rechazaron la República. Los carlistas recrudecieron la guerra en el norte, al tiempo que el grupo alfonsino comenzaba a recibir apoyos cada vez mas amplios.
La República debería traer democracia, derechos individuales y desarrollo económico. Para los campesinos y trabajadores urbanos, reparto de la tierra, reducción de la jornada laboral, mejores salarios,etc. El movimiento republicano estaba dividido entre federalistas, (partidarios de un Estado federal), y los unionistas (defendían un Estado centralista). Ya en los primeros días se produjeron levantamientos campesinos en Andalucía y los primeros intentos de insurrección federalista en Cataluña. Y el Gobierno tuvo sofocar a tiempo un intento de Golpe de Estado de radicales y del ejército. Las elecciones de Mayo dieron una aplastante mayoría republicana. Poco después, la dimisión de Figueras convirtió en Presidente a Pi y Margal. La Constitución de 1873 establecía una república confederal de 17 Estados y varios territorios de ultramar, cada uno con su propia Constitución. Dentro de cada Estado, los municipios tendrían también Constitución local y división de poderes entre Alcaldía (ejecutivo), Ayuntamiento (legislativo) y tribunales locales (judicial). El poder ejecutivo lo ejercería un Gobierno cuyo jefe nombraría el Presidente; el legislativo lo desempeñarian dos Cámaras, Y el judicial lo presidiría un Tribunal Supremo. Una amplia declaración de derechos, incluida la afirmación del Estado laico, indignó a la Iglesia y enfrentó a la República con muchos católicos.La Constitución no llegó a entrar en vigor. En los primeros días de Julio se desencadenó la revolución cantonal. El 7 de Julio estalló en Alcoy una huelga general sofocada por el ejército, pero días después se sublevaban los grupos federalistas en Cartagena, proclamando el cantón. Rápidamente la proclamación de cantones y Juntas revolucionarias se extendíó por Levante y Andalucía, y también en Castilla. Mientras, los carlistas avanzaron hasta Albacete y Cuenca, mientras manténían bajo su control buena parte del País Vasco, Navarra, Cataluña y Aragón. En esa situación, Pi y Margall presentó su dimisión . El nuevo presidente, Nícolás Salmerón, inició un giro a la derecha. Dio plenos poderes al ejército dirigido por generales como Martínez Campos y Pavía. Salmerón prefirió dimitir antes de tener que firmar dos sentencias de muerte. Le sustituyó Emilio Castelar, que acentuó el giro autoritario. En pocos días, con el apoyo de los militares, obtuvo de las Cortes poderes extraordinarios.Restablecíó las quintas, suspendíó derechos constitucionales y ordenó un alistamiento masivo. Sólo Cartagena resistíó amparada en su arsenal y en el abastecimiento por mar. Pero el 2 de Enero, Castelar se presentó para rendir cuentas ante las Cortes, de aplastante mayoría federalista y fue respondido con críticas y derrotado en una moción de confianza. La caída de Castelar precipitó el Golpe de Estado, por la oposición conservadora y los generales. Mientras se estaba votando un nuevo gobierno. Poco después el general Pavía, hizo entrar tropas en el Congreso y, tras disolver la reuníón, anunció que se iba a constituir un gobierno militar de emergencia, presidido por Serrano. Era, de hecho, el fin de la l República. Tras el golpe del general Pavía y la disolución de las Cortes, en Enero de 1874, se establecíó un gobierno provisional. En teoría seguía la República, pero en la práctica fue una dictadura militar de Serrano, que concentró su esfuerzo en sofocar los focos cantonalistas. La oposición republicana fue anulada, y las organizaciones obreras prohibidas. Al mismo tiempo crecía el apoyo a la causa Alfonsina. El 1 de Diciembre el príncipe Alfonso firmaba el Manifiesto de Sandhurst, en el que, garantizaba una monarquía dialogante, constitucional. Cánovas preparaba así la vuelta a la Monarquía . Pero los generales monárquicos
Martínez Campos y Jovellar se le adelantaron y se pronunciaron en Sagunto a favor de la Monarquía.