8-1 El territorio es por tanto el cuerpo del estado y además esto ha sido así a lo largo de la historia y del concepto del estado. Si el territorio aumenta el territorio se engrandece y si disminuye el estado desaparece. Por eso se ha entendido siempre que el territorio no tiene un mero valor material, no es solo el cuerpo del Estado, tiene un valor simbólico de solidaridad nacional. El ciudadano cuando defiende el territorio, defiende el Estado. Los ciudadanos son ciudadanos de un territorio. Ese concepto de ciudadanos del mundo es un concepto todavía en este siglo inexistente. Los ciudadanos somos ciudadanos de un sitio y territorio concreto, tenemos una vinculación territorial y nos sentimos identificados con ese territorio y con el pueblo que se asienta en él. En ese sentido hay o es necesario vincular también el territorio con los aspectos culturales y paisajísticos. Ciertamente el territorio supone la base de la unificación política. Transforma a las distintas unidades poblacionales que se asientan en él. Dependiendo la extensión y el limite del estado y el poder de este. Señala los servicios que el estado debe prestar, determinando una cierta igualdad entre todos los habitantes ya que se hace necesario compensar las diferencias entre las distintas zonas de un mismo territorio. En todo caso hay que decir que algunas veces la propia forma del territorio condiciona la forma del Estado. En todo caso, el territorio también nos sirve como base para la distribución del poder. Porque en muchas de las ocasiones el territorio de los estados viene marcado por las fronteras físicas. En otros casos, no, pero por ejemplo como los Pirineos marcan una frontera física de España y Francia. En todo caso si es importante resaltar la importancia del territorio como marco para la representación política del estado. El territorio es el lugar donde se celebran las elecciones, es el lugar en el que se eligen los representantes. Las circunscripción electoral esta vinculada al territorio. Además el poder del estado en general, viene determinado en muchas ocasiones por su propio territorio. Es cierto que este elemento tiene en la actualidad la misma transcendencia que ha tenido a mediados del siglo pasado, porque la población necesitaba territorio donde expandirse para expandir su poder. Ese espíritu expansionista tuvo la URSS. Ciertamente en la actualidad las nuevas tecnologías han acabado con ese espíritu porque ahora mismo no se requieren grandes espacios para ejercer una influencia en el ámbito político internacional. El poder se ejerce sobre un territorio en un pueblo, si este es pequeño, el poder será pequeño. Puede haber países poderosos en espacios territoriales pequeños. El segundo de los elementos materiales es el pueblo. Debemos empezar distinguiendo entre el concepto de pueblo y población. Pueblo viene de populus que es el conjunto de personas libres de la civitas o de la polis, es decir, las personas que tenían derecho a participar en el conjunto de los asuntos públicos. Población es una categoría sociológica. Es el conjunto de habitantes de un territorio. Pueblo por tanto, es una categoría jurídico-política que implica la unidad de los habitantes en cuanto a elementos del Estado. Para que exista estado no basta con el territorio, ya lo hemos visto, pero no ha sociedad sin elemento personal, no puede haber Estado sin hombres y mujeres en los que ese Estado se encarne, es decir, el núcleo humano es indispensable para el fenómeno estatal. Partiendo de la idea de la diferencia entre pueblo y población, hay que decir, que cualquier espacio territorial tiene población, lo que es necesario es que se produzca una cohesión de esa población, una unificación para obtener la unidad política. Una muchedumbre reunida al azar no es un pueblo. En cuanto a las concepciones de Kelsen y de Maquiavelo, es el Estado el que crea el pueblo. Desde eso, la concepción de Kelsen es una posición intermedia ya que apunta que el pueblo es el ámbito personal que da validez al estado. El pueblo es parte determinante del acuerdo que da lugar a la configuración del Estado, pero también el pueblo es sujeto de la propia regulación jurídica que configura el estado. Aquí tenemos que señalar una diferencia importante que parte de la etimología pero también es jurídica, entre otros dos conceptos: pueblo y nación. Nación, hace referencia al termino latino “natio”, que se refiere al nacimiento. Es lo que determina en primera instancia la nación. Este término surge en el ámbito de la Universidad, no se lo inventan los universitarios, quiere decir que se utilizaba para identificar aquellos estudiantes que tenían una misma procedencia. (lengua, religión, etnia). Esto acabo expandiéndose a los territorios con una etnia, costumbres y religión comunes. Nación era un término originalmente etnográfico y cultural.Por contra, pueblo es un término con un significado evidentemente más político. Lo que pasa que el pensamiento ilustrado lo acaba identificando también con el concepto nación y acaba señalando que el concepto personal del estado es el pueblo o la nación. primera vez en una obra titulada “La Alemania” en 1810 y verdaderamente aunque se utiliza en la RF, nosotros podemos de que el termino nación aparece reiterado en la Constitución de Cádiz.