Portada » Lengua y literatura » Porque es escasa la poblacion agraria en europa
Consecuencia de esa baja aportación al PIB es también la baja renta per cápita de los agricultores españoles en comparación con la del resto de los trabajadores. De esto deducimos que España ha dejado de ser un país eminentemente agrario, aunque su agricultura siga siendo un factor económico importante.
En la actualidad, al igual que otros países desarrollados, España presenta una estructura económica fuertemente terciarizada:
Existen, sin embargo, grandes contrastes territoriales entre unas Comunidades Autónomas y otras. Así, la proporción de ocupados varía entre el 1% de la comunidad de Madrid y el 20% de la de Galicia, mientras el valor de la producción oscila entre el 0´2% de Madrid y el 13% de Extremadura.
A grandes rasgos, se puede afirmar que en las provincias y comunidades situadas en el interior, excepto Madrid, las actividades primarias tienen mayor peso relativo que en las del litoral y las islas.
El dinero necesario para modernizar, aumentar la productividad, la calidad y la competitividad se obtiene a través de los fondos estructurales europeos para mejorar las infraestructuras, los equipamientos y la cualificación de los agricultores: el Fondo Europeo de Orientación y Garantía Agraria (FEOGA) se encarga de financiar la política estructural agraria y la modernización del sector; el Fondo Social Europeo (FSE) se destina, en cambio, al fomento de la formación profesional y del empleo rural.
Como consecuencia de la PAC las tierras poco productivas van siendo abandonadas o reorientadas hacia cultivos alternativos. Por el contrario, las excesivamente productivas han de reducir su producción, sujetas siempre a cupos de producción. En el caso español, esos excedentes se producen sobre todo en los cereales, el vino, la leche y la carne de vacuno. Muchas de estas medidas no fueron inicialmente bien aceptadas, porque suponen gravosos sacrificios económicos para los productores. La PAC ha tenido consecuencias problemáticas en zonas excedentarias y poco competitivas, como las regiones de la cornisa cantábrica (ganadería bovina) y las zonas de cereal y viñedo del interior peninsular, pero en líneas generales, la PAC ha beneficiado sensiblemente al campo español mediante la política de subvenciones, sobre todo para el litoral mediterráneo y andaluz, que han encontrado un buen mercado para sus productos hortofrutícolas. No obstante, y aunque esas subvenciones están garantizadas hasta el año 2013, el campo español debe prepararse para competir con los países recién ingresados en la UE (países del Este) y con los países menos desarrollados del área extracomunitaria que, por la globalización, piden el acceso libre a los mercados europeos.
Para mejorar el ámbito rural la UE, a través de los planes LEADER pretende potenciar las actividades agroindustriales y el turismo rural como complementos económicos a la pura actividad agraria. Además con los fondos europeos (FEOGA y FSE) y los planes LEADER se intenta impulsar en la actualidad el desarrollo de la agricultura ecológica, que busca una producción eficiente y respetuosa con el medioambiente.