Portada » Lengua y literatura » Poetas Españoles: Del Modernismo a la Posguerra
Rubén Darío, figura central del Modernismo (movimiento de renovación poética de finales del siglo XIX), se caracteriza por una estética de exotismo, elegancia, sentimentalismo y una profunda preocupación por el ritmo y la musicalidad. En este poema, Darío lamenta la pérdida de la juventud y evoca sus encuentros amorosos con diversas mujeres, desde su infancia hasta su madurez. El poeta expresa la búsqueda infructuosa de la mujer ideal, un lamento que contrasta con el verso final: “Mas es mía el Alba de oro.”
El poema explora el desengaño amoroso y la pérdida de la juventud, evocando el amor a través del tiempo.
Un estribillo de cuatro versos divide el poema en cuatro partes, cada una representando una experiencia amorosa diferente:
Versos eneasílabos (arte mayor) en estrofas de cuatro. Rima consonante, predominantemente ABAB, con variaciones en algunas estrofas (ABBA).
Contraste entre un léxico rico y brillante y un tono melancólico, nostálgico y reflexivo. Apelación y personificación de la juventud. Quiasmo (“cuando quiero llorar, no lloro/ y a veces lloro sin querer…”). Comparaciones (“miraba como el alba pura, sonreía como una flor…”). Sinestesias (“celeste historia, dulce niña…”). Además, se utilizan metáforas y epítetos.
Antonio Machado, asociado a la Generación del 98, muestra rasgos del Modernismo en su primera etapa. Campos de Castilla, perteneciente a su segunda etapa, es una obra temáticamente heterogénea. Machado abandona su intimismo inicial para explorar la geografía castellana y andaluza. El paisaje soriano evoca en él diversas sensaciones, desde la descripción pura hasta la crítica social, contrastando la “España del pasado” con la “España del presente”.
Descripción melancólica del paisaje soriano (austero, árido) y lamento crítico por la decadencia de Castilla.
Variable. Estrofas de doce o más versos, mayoritariamente endecasílabos (arte mayor) con rima asonante en los versos pares. La estrofa VI presenta versos octosílabos (aabbccdd eefggfhihijkjk). La estrofa VII es una silva con versos heptasílabos y endecasílabos. Rima asonante.
Predominio del epíteto (“sierras calvas, verdes pradillos, cerros cenicientos…”). Abundancia de sustantivos y adjetivos, escasez de verbos. Personificación (“el campo sueña…”) y apelación (“conmigo vais, campos de Soria”). Uso expresivo de la exclamación.
Los Proverbios y cantares, incluidos en Campos de Castilla, son breves meditaciones sobre los enigmas del hombre y del mundo, combinando lo filosófico y lo popular. Abordan temas como la realidad y el sueño, el conocimiento, la verdad, Dios, el amor, el tiempo y el patriotismo.
Reflexión sobre la fugacidad de la vida.
Versos octosílabos con rima asonante en los versos pares (romance).
Juan Ramón Jiménez, perteneciente a la Generación del 14 (Novecentista), tuvo una etapa modernista. Dividen su obra en tres etapas: sensitiva, intelectual y suficiente o verdadera. Álamo blanco, de la etapa intelectual, muestra la identificación del poeta con la naturaleza.
Identificación del alma del poeta con la belleza de la naturaleza, simbolizada en un álamo.
Dos estrofas de cuatro versos, subdivididas en dos partes. La primera estrofa expresa la dualidad del alma del poeta. La segunda, a través de las imágenes del pájaro y el agua, muestra la emoción del poeta.
Versos de arte menor (heptasílabos, hexasílabos y pentasílabos) en dos estrofas de cuatro versos. Rima asonante (abab, abab).
Metáfora alegórica (álamo = alma del poeta). Paralelismos (“Arriba canta el pájaro,/y abajo canta el agua; Mece a la estrella el pájaro,/a la flor mece el agua”). Antítesis (arriba y abajo). Personificación (“canta el agua…”).
Pedro Salinas, el poeta del amor, explora este tema en todas sus variantes. El alma tenías…, de su primera etapa, muestra la influencia de Juan Ramón Jiménez. El poema se centra en la paradoja del alma de la amada.
Lamento por la incapacidad de comprender el alma de la amada, que de tan abierta parecía inaccesible.
Diálogo entre el poeta y la amada. Presentación del tema (1ª estrofa). Reiteración de la idea con diferentes imágenes (atajos, caminos, escala, puertas). Conclusión (5ª estrofa): incertidumbre e impotencia del poeta.
Versos cortos sin rima.
Sencillez expresiva. Paradoja central del poema, repetida con imágenes metafóricas (puerta del alma) y antítesis (atajos angostos – caminos anchos). Repeticiones (“alma”). Interrogaciones retóricas con estructura cruzada. Uso de la primera y segunda persona del singular.
Jorge Guillén, influenciado por Juan Ramón Jiménez, se inclina hacia la poesía pura. En Cántico, exalta la alegría de vivir, la armonía del cosmos y la plenitud del ser.
Exaltación de la plenitud vital y la conexión con el orden de la vida.
Versos heptasílabos (arte menor) sin rima.
Eliminación de lo superfluo. Predominio de sustantivos y verbos relacionados con la luz (“amarillo, sol, rayo, chispas, día, esplendor…”) y la plenitud (“asombro, seguridad, frescura, extiende, cunde, manda, eterno…”). Exclamaciones (“¡Luz!, ¡Día!”). Encabalgamientos (“ruidos/irrumpen…”).
Gerardo Diego, figura del 27, alterna la poesía tradicional con la vanguardista. Río Duero, río Duero, de estilo tradicional, expresa la nostalgia por el abandono de lo poético.
Nostalgia por el abandono de lo poético, simbolizado en el río Duero. Lamento por la falta de conciencia del hombre ante la vida.
Romance: versos octosílabos con rima asonante en los versos pares.
Apelación y personificación del río Duero y la ciudad. Metáforas (“espejo”, “muralla desdentada”). Repeticiones (“Río Duero, Río Duero”). Anáforas (“nadie…, nadie…”).
Federico García Lorca, figura internacional del 27, evoluciona desde la sencillez hasta la vanguardia. En Romancero gitano, mezcla lo popular y lo culto, explorando el mundo gitano y sus fatalismos.
Muerte trágica de un niño y el dolor de los gitanos. Los gitanos simbolizan el destino trágico.
Romance: versos octosílabos con rima asonante en los versos pares.
Metáfora: luna = muerte. Personificación de la luna. Metáforas (“polisón de nardos”, “senos de duro estaño”, “tocando el tambor del llano”, “bronce”). Repeticiones (“luna, luna; mira, mira; cómo canta… ay cómo canta…”). Anáforas (“el niño… / el niño…; el aire… / el aire…”). Exclamaciones (“¡Cómo canta la zumaya…!”). Fusión de lo culto y lo popular.
Poeta en Nueva York, obra póstuma y surrealista, muestra la denuncia social de Lorca durante su estancia en la ciudad. El poeta se rebela contra la civilización materialista y la injusticia.
Protesta contra la deshumanización, el materialismo y la desesperanza del mundo urbano.
Verso libre. Versos largos (versículos) y versos cortos que marcan el ritmo.
Repeticiones obsesivas. Metáforas surrealistas que sugieren angustia, horror y desesperanza (“El increíble cocodrilo quieto…”).
Dámaso Alonso, poeta de la posguerra, se define como “poeta a rachas”. Hijos de la ira representa la poesía desarraigada, un grito ante la crueldad y la injusticia.
Angustia por la falta de sentido de la existencia humana.
Versos largos (versículos) sin rima, agrupados en estrofas irregulares.
Metáforas surrealistas (“nicho = cama, pudrirse = vivir, cadáveres = personas”). Imágenes de angustia (“el gemido del huracán…”). Polisíndeton que sugiere el paso del tiempo (“y me incorporo… y paso…”). Interrogaciones retóricas.
Vicente Aleixandre explora el conocimiento a través del surrealismo. En La destrucción o el amor, el amor se presenta como una fuerza destructora que se confunde con la muerte.
Fusión de los amantes con la naturaleza en un acto amoroso de dimensión cósmica.
Dos partes. La primera (siete estrofas) describe la fusión de los amantes con la naturaleza. La segunda (última estrofa) enumera los elementos presentes en el acto amoroso.
Verso libre. Versos largos sin rima, en estrofas de cuatro versos. La última estrofa, de cinco versos, es una enumeración en asíndeton.
Enumeración caótica en la última estrofa. Anáforas (“se querían”). Metáforas surrealistas (“los perros hondos laten bajo tierra…”). Comparaciones (“como las flores a las espinas hondas”). Sinestesias (“noche dura”). Paralelismos (“duras como los cuerpos helados…/duras como los besos…”).
Luis Cernuda, poeta del desencanto y la soledad, explora el amor como unión de placer y dolor. Donde habite el olvido expresa el deseo de olvidar un amor doloroso.
Deseo de olvidar el amor, aunque signifique la ausencia absoluta, la muerte.
El poema se abre y se cierra con el verso de Bécquer: “Donde habite el olvido”. Descripción del cementerio como lugar de descanso y liberación del deseo. El amor se presenta como terrible y doloroso. Se insiste en la libertad del olvido.
Versos heptasílabos y alejandrinos, con un verso largo en el centro. Versos blancos (sin rima).
Personificaciones (“El viento escapa…”, “el amor, ángel terrible…”). Anáforas (“donde…”). Metáforas (“en brazos de los siglos…”). Comparaciones (“como acero, como carne de niño…”).
Gabriel Celaya, representante de la poesía social, defiende una poesía comprometida con la realidad.
Defensa de la poesía social frente a la poesía de evasión.
Dos partes. La primera (estrofas 1-6) presenta la situación del poeta y la necesidad de una poesía comprometida. La segunda (7-12) critica la poesía de evasión y define la poesía social como un arma de lucha.
Versos de arte mayor (alejandrinos) y arte menor (heptasílabos), con irregularidades. Sin rima.
Campos semánticos del trabajo y la lucha. Metáforas (“arma cargada de futuro…”). Encabalgamientos (“apenas si nos dejan/decir que…”). Repeticiones (“canto y canto y cantando…”). Anáforas (“cuando…, piden ser…”). Comparaciones (“como el pan de cada día…”).
José Ángel Valente, asociado a la poesía del silencio, explora temas como la inefabilidad, el vacío y la nada.
Necesidad de una poesía capaz de cambiar el mundo.
Cuatro estrofas paralelas con el estribillo “cuándo podremos poseer la tierra”. El poema se describe como un objeto capaz de frenar la injusticia y promover el amor.
Versos de arte mayor (endecasílabos y alejandrinos) y arte menor (heptasílabos). Sin rima.
Metáforas (“poema = objeto de dura luz…”). Anáforas (“de…, si no…”). Paralelismos (“entre el brazo del ángel y el cuerpo de la víctima…”). Repeticiones (“cuándo podremos poseer la tierra”).