Portada » Lengua y literatura » Poesía y Teatro en España: Evolución y Autores Clave Post-1939
En la década de los veinte, un grupo de poetas alcanzó su madurez, dando un momento de esplendor a la poesía española. Estos son: Pedro Salinas, Jorge Guillén, Rafael Alberti, Federico García Lorca, Luis Cernuda, Vicente Aleixandre, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, Manuel Altolaguirre y Emilio Prados. A este grupo se le denomina Generación del 27 porque realizaron una conmemoración a Góngora, ya que en ese año se cumplía el tercer centenario de su muerte.
Los poemas de los autores de la Generación del 27 tenían una sencillez lírica de la poesía popular y la complejidad de los hallazgos vanguardistas.
El impacto de la Guerra Civil fue tremendo. En los años cuarenta, el teatro se vio condicionado por la ideología de la sociedad burguesa del momento. Se formaron dos corrientes principales: el teatro cómico y el teatro histórico-político.
En la creación dramática se formaron dos líneas principales: el drama burgués y el teatro del humor.
La década de los cincuenta se abrió con dos importantes estrenos: Historia de una escalera de Antonio Buero Vallejo y Escuadra hacia la muerte de Alfonso Sastre. Buero y Sastre fueron los autores claves de la generación realista. Sus temas abordaban problemas de obreros, estudiantes… poniendo de relieve las desigualdades sociales y la falta de humanidad. Entre las obras más representativas de Sastre destaca La taberna fantástica. Pero el dramaturgo de mayor interés es Buero Vallejo, cuyo género adoptado es la tragedia. Una de sus obras más importantes es La fundación.
En la década de los sesenta surgió un movimiento de renovación caracterizado por un acercamiento al teatro extranjero. Surgieron los grupos de teatro independiente. Los grupos más destacados son Els Joglars, Tábano, Los Goliardos y TEI. También surgió el teatro subterráneo, propio de autores individuales cuyas novedades estéticas no fueron comprendidas. Destacan Francisco Nieva con La carroza de plomo candente y Fernando Arrabal con El cementerio de automóviles.
Tras el fin de la dictadura surgieron dos tendencias: montar obras de autores clásicos exóticos y restituir los textos silenciados del pasado. Los autores más destacados son Antonio Gala (Anillos para una dama), José Luis Alonso de los Santos (Bajarse al moro) y Fernando Fernán Gómez (Las bicicletas son para el verano).