Portada » Ciencias sociales » Perspectivas Críticas sobre Comunicación, Cultura de Masas y Sociedad de la Información
Edgar Morin proponía que la cultura de masas estaba alienada y hacía del hombre el objeto para consumir ese producto cultural que la mercantilización ponía en los mercados, convirtiendo al ser humano en un ser complejo inmerso en un océano de mercaderes, dispuestos a obtener y maximizar beneficios.
El análisis marxista de investigación en comunicación busca comprender la alienación del hombre respecto al estado mediante el estudio de los contenidos de la comunicación. El marxismo es más hipotético-deductivo que otras corrientes como el funcionalismo. Su objeto de estudio enfatiza al hombre como pilar básico para el cambio o transformación social de la cadena de producción, siendo más transversal y complejo que la linealidad del funcionalismo propuesto por los americanos a principios del siglo XX.
Se trata de una concepción técnica de la información donde lo que importa es la forma de la señal y no el contenido que se transmite. El objetivo no es otro que calcular y predecir la transmisión física de dichas señales, buscando optimizar el rendimiento de los canales físicos.
Estamos, por lo tanto, ante una concepción estadística de la comunicación, propia de:
En este nivel, la función informativa consistiría en la capacidad de representación fiel de un objeto, noción o idea, que es sometido a un proceso de normalización significativa. Un ejemplo de este tipo de nivel lo encontraríamos en lo que se conoce como inteligencia artificial.
Aquí, la información se entiende como práctica discursiva, producto y proceso configurado por prácticas sociales marcadas ideológicamente y por un contexto sociohistóricamente determinado.
Se refiere a la comunicación como transmisión de mensajes en un proceso de codificación y descodificación entre emisores y receptores, y también como proceso de disposición de canales para la transmisión eficaz de esa información.
Nos remite a una comunicación entendida como un proceso de producción e intercambio de sentido, así como un proceso de comprensión y activación de los significados.
Las funciones de los medios según Stuart Hall serían:
La información es un conocimiento explícito extraído por seres vivos o sistemas expertos como resultado de la interacción con el entorno o percepciones sensibles del mismo entorno.
Para Marx, la comunicación se entiende como algo natural al hombre, pero es el instrumento para relacionarse con el otro, que puede servir para liberar o alienar. Así, la propaganda puede ser usada para manipular las conciencias.
Los rasgos característicos de la cultura producida industrialmente incluyen:
Los pilares fundamentales de la sociedad de la información actual son:
Existen dos posturas principales frente a la sociedad de la información:
Para Gonzalo Abril, la información comprende:
La acepción técnico-operacional (o física) viene influida por la Teoría Matemática de la Comunicación. Se entiende como la reducción de incertidumbre, una estructura opuesta a la entropía: codifica y organiza la realidad.