Portada » Filosofía » Pensamiento de Rousseau: La bondad natural y la crítica a la sociedad
La Ilustración es un movimiento intelectual que surgió en Francia en el siglo XVIII. Estos pensadores se rigen por la confianza que depositan en la razón humana y por su autonomía, siendo en última instancia la necesaria para hallar el conocimiento. En este movimiento, el ser humano es el centro de atención y por ello van a surgir los derechos del hombre y ciudadano, y el sistema de leyes lógicas. Se van a reconocer pensadoras como Mary Wollstonecraft y Olympe de Gouges.
Rousseau es un filósofo considerado del Romanticismo. Sus pensamientos se basan en el ser humano, su ética, la política y la sociedad.
La tesis fundamental de la antropología de este autor es la consideración de que el ser humano es bueno por naturaleza, y es la sociedad y la cultura lo que le corrompe y le hace ser un ser malo y miserable. Para él la naturaleza es perfecta y el ser humano debe reconquistarla para ser, también, feliz y perfecto.
Sobre esta base ejerció influjo evidente el mito del buen salvaje, una ficción necesaria para entender la genealogía del presente.
Designa el supuesto estado del hombre con anterioridad a su vida en la sociedad, donde sería bueno, feliz, independiente y libre, guiado por su propio amor. Es un ser asocial que vive aislado de sus semejantes.
Sin embargo el hombre se halla en la real situación presente de la sociedad.
El hombre se hace malo y está movido por el insaciable egoísmo. Rige la injusticia, la opresión y la falta de una libertad auténtica por culpa de la civilización.
El hombre por sí mismo no es un lobo para los demás hombres. Se ha ido convirtiendo en eso a lo largo de la historia. El tránsito del estado natural al estado social surge en 4 etapas:
Dado que retornar al estado de naturaleza es imposible, Rousseau abogó por la necesidad de restablecer la sociedad a partir de unas bases nuevas regidas por un acuerdo llamado contrato social. Ha de ser un contrato de libertad, es la asociación voluntaria de los individuos que se unen entre sí para superar las dificultades de la supervivencia y construye el cuerpo social en el que los individuos dependen solo de él y no uno de otros. En este pacto el hombre natural se convierte en ciudadano. Este pacto debe constar de unas reglas:
Los hombres se someten a la ley que ellos mismos han dado de manera libre y racionalmente, por ello deben cumplir lo pactado. Es el principio normativo y regulativo de la vida en común que permite que prevalezca el interés general por encima del particular.
Son los principios morales y políticos legitimados por el pueblo, donde se reside la soberanía política al construirse como asociación original. El soberano solamente es el pueblo mientras que el gobierno es el ejecutor de las leyes que el pueblo se ha dado a sí mismo.
Este nuevo orden social y libre erradica el mal moral y la injusticia, y realiza la perfectibilidad y felicidad del hombre con su plena realización.
La realización plena de la naturaleza humana en cada individuo está garantizada por la educación. Este autor expuso un método pedagógico para formar al individuo de acuerdo con su auténtico ser natural, para evitar la corrupción que la sociedad lleva consigo. La educación es una tarea lenta y gradual que respeta los ritmos biológicos para enseñar al ser humano cómo vivir y adaptarse a la sociedad.