Portada » Geografía » Oscilacion termica en el clima mediterraneo
– La proximidad al mar y la influencia casi permanente de las borrascas oceánicas son los rasgos más representativos del clima atlántico u oceánico, localizable en las costas del norte y noroeste peninsular, desde Galicia hasta el País Vasco. Sus inviernos son suaves y los veranos frescos, presentando las amplitudes térmicas más bajas dentro de la península; desde el punto de vista pluviométrico se superan ampliamente los 800 mm anuales.A medida que nos desplazamos hacia el este por la cornisa cantábrica, las precipitaciones disminuyen, la amplitud térmica aumenta y la temperatura media anual desciende, pues los efectos de la oceanidad tienden a debilitarse; así pues en Galicia se registran las temperaturas medias más suaves (14,5º) la menor oscilación térmica (9º) y las máximas precipitaciones; en el País Vasco las temperaturas medias descienden (13,5º), la oscilación térmica aumenta (12º), y el total de lluvias no suele llegar a los 900 mm.
En la península Ibérica las tierras situadas por encima de los 1.000 mts de altitud se consideran áreas de montaña; entrando por encima de los 2.000 en la categoría de alta montaña (Pirineos, Sierra Nevada, Picos de Europa y Gredos). la altitud provoca el descenso de las temperaturas, favorece la condensación y las lluvias, y la precipitación en forma de nieve; la orientación de las vertientes provoca contrastes entre umbrías y solanas, y entre barlovento y sotavento; en invierno la acumulación de aire frío en los valles bajo situaciones de calma atmosférica produce inversiones térmicas en forma de nieblas matinales. Lluvias por encima de los 1.000 mm anuales y veranos suaves, con temperaturas comprendidas entre los 16º y 19º son rasgos distintivos de los climas de montaña existentes en nuestro contexto.
El Climas mediterráneao, desde Gerona hasta Málaga incluyendo el archipiélago Balear, los inviernos son suaves y los veranos secos y calurosos; las temperaturas medias de enero son las más altas de la península y su amplitud térmica ronda los 15ºC; desde el punto de vista pluviométrico no suelen superarse los 700 mm, estando las lluvias muy concentrados en otoño y primavera, siendo muy frecuentes las precipitaciones torrenciales y las tormentas, y relativamente escasas las precipitaciones en forma de nieve en invierno, aunque no se descartan en Cataluña y Baleares. En este contexto, Cataluña recoge el mayor volumen de pluviosidad (525 mm) debido a la proximidad a los Pirineos, al influjo mediterráneo (Mediterráneo costero), y al aún existente influjo atlántico; la mayor aridez corresponde a las tierras del sureste (Murcia y Almería), con precipitaciones inferiores a los 300mm y una temperatura anual media de 18º C , las Cordilleras Béticas protegen este área del influjo atlántico, convirtiéndola en la zona más seca y árida del contexto climático peninsular, pero también la protegen de los vientos fríos del norte y de las heladas invernales determinando la posibilidad de practicar una agricultura de cultivos tropicales en el litoral andaluz.
En el interior de la península domina un clima mediterráneo intensamente