Portada » Historia » Organización social hasta nuestros días
La Prehistoria es aquel periodo de tiempo comprendido entre la aparición de los primeros
homínidos1 (hace aproximadamente 4,4 millones de años) y la invención de la escritura
(hace 3.300 años, en Oriente Próximo). Puede ser dividida en Paleolítico, Neolítico y Edad
de los Metales, edades que estudiaremos en esta unidad.
En la Prehistoria no existen documentos escritos que podamos estudiar. Por tanto, para
conocer los acontecimientos que tuvieron lugar en este periodo, se utilizan fuentes como
restos materiales y humanos (huesos, instrumentos, cerámica…). Para desarrollar este
estudio adecuadamente es fundamental la labor de los arqueólogos.
antes se creía que el ser humano había surgido sobre la Tierra con su aspecto actual. Sin
embargo, actualmente se acepta la teoría de la evolución, de Charles Darwin. Según ésta,
los primeros homínidos sufrieron una serie de transformaciones hasta evolucionar al ser
humano actual (homo sapiens). A ello lo llamamos proceso de hominización.
hace unos siete millones de años, hubo un calentamiento en la Tierra, el cual causó la
desaparición de grandes zonas de bosque. Para adaptarse al nuevo medio natural y poder
sobrevivir, algunos primates iniciaron en África una serie de cambios físicos, entre los que
destacan los siguientes:
-Los primates se fueron irguiendo, hasta llegar a una posición bípeda, ya que la
columna vertebral se volvíó más recta y la pelvis más corta.
-Al caminar sobre dos piernas, se produjo la liberación de las manos, lo cual facilitó,
a su vez, la manipulación de utensilios.
-La cabeza quedó en equilibrio sobre la espalda, causando un aumento de la capacidad
craneal y, por tanto, el desarrollo del cerebro. Esto nos permitíó pensar, hablar…
De esta manera, los seres humanos pudieron crear instrumentos y, en lugar de adaptarse al
entorno (como hacen los animales), fueron capaces de modificarlo y de transmitir ese
conocimiento a las siguientes generaciones.
existen distintas teorías que responden a la pregunta de arriba. La más extendida sostiene
que el ser humano surgíó en África y que, desde este continente, se extendíó hasta el resto
del mundo. No obstante, algunos prehistoriadores señalán que el ser humano ha
evolucionado de manera independiente en las distintas regiones de la Tierra, aunque
llegando finalmente a la misma especie: el homo sapiens.
Los homínidos son una serie de primates superiores de los cuales desciende el ser humano.
el Paleolítico es el periodo de la Prehistoria caracterizado por el uso de herramientas líticas
(de piedra) por los primeros homínidos (el homo habilis). Comenzó en África hace
aproximadamente 2,5 millones de años.
La economía en el Paleolítico en el Paleolítico, el ser humano era nómada, es decir, se desplazaba de un lugar a otro en
busca de comida (frutos, animales…) y refugio. Podían vivir en cuevas o construir pequeños
campamentos al aire libre, en zonas cercanas a un lago o río.
Además, eran depredadores, ya que no sabían producir su propio alimento. Por tanto, la
recolección y la caza eran sus principales actividades. Aprovechaban la carne de sus presas
para comer, sus pieles para abrigarse o los huesos de animales para hacer instrumentos.
Estas herramientas también podían ser de madera, por ejemplo. Las empleaban para pescar,
coser o seguir cazando.
Es en esta época cuando también se descubre el fuego. Su control fue muy importante, ya
que les permitíó calentarse, ahuyentar a las fieras, iluminar las cuevas y, sobre todo, cocinar.
Con ello, los alimentos se hicieron más digeribles, por lo que se favorecíó el desarrollo del
cerebro.
La organización política y social en el Paleolítico la primera forma en la que los seres humanos se organizaron fueron las familias. Los
distintos miembros de ésta cooperaban entre sí, ya que creían descender de un antepasado
común. El objetivo era lograr su supervivencia.
Es complejo determinar por qué las familias se acabaron agrupando en tribus, esto es, en
grupos de más miembros que colaboran de manera permanente para la caza y la recolección.
Según algunos historiadores, es la necesidad de cooperar para poder sobrevivir lo que
provocó su surgimiento. De acuerdo con otros, no se trató de una cuestión de cooperación,
sino de lucha.
En las tribus, los ancianos eran los más respetados y, además, impónían normas de
comportamiento al resto de la población. Con el paso del tiempo, este respeto hacia la
población de más edad derivaría en un culto hacia los antepasados. Por tanto, podríamos
decir que están surgiendo las primeras religiones del mundo.
finalmente, en cuanto al papel de las mujeres en el Paleolítico, cabe señalar que
tradicionalmente se ha creído que es en esta época cuando surge la división sexual del
trabajo (en otras palabras: los hombres cazan y las mujeres se dedican a la recolección y al
cuidado de los hijos). No obstante, recientes investigaciones demuestran que hasta un tercio
de las mujeres se dedicaban a la caza. Por ejemplo, en la zona de los Andes (en América del
Sur) se han encontrado enterramientos de mujeres con sus armas.
el Neolítico es la segunda de las etapas en que puede ser dividida la Prehistoria..
Abarca desde el año 10.000 a. C. Aproximadamente, cuando aparecen la agricultura y la ganadería.
Finaliza hacia el 4.500 a. C., cuando se empiezan a trabajar los metales.
La economía del Neolítico el ser humano tuvo que adaptarse al fin de las glaciaciones y a un nuevo cambio climático,
buscando otras formas de alimentación. Como resultado, surgen la agricultura y la
ganadería. La agricultura nacíó al observar que las semillas que caían al suelo originaban
con el tiempo una nueva planta. Por su parte, la ganadería surge tras observar el
comportamiento de los animales, lo cual permitíó domesticar a algunas especias y encerrar
en establos a otras (ovejas, cabras, bueyes…).
El “descubrimiento” de la agricultura se produjo en el Creciente Fértil, una regíón entre
los ríos Tigris y Éufrates que llega hasta el Nilo (la cual abarca países actuales como Egipto,
Irak o Siria).
Como consecuencia de todo lo anterior, el ser humano dejó de ser nómada y pasó a ser
sedentario, ya que debía permanecer junto a los campos de cultivo y al ganado. Surgen así
las primeras aldeas y poblados, situados generalmente cerca de una fuente de agua.
La organización social y política del Neolítico con la aparición de la agricultura, la población aumentó considerablemente. Asimismo,
comienza a producirse una mayor división del trabajo −es decir, unos se dedican a cultivar,
otros al pastoreo de animales…−. Por consiguiente, la sociedad se hace más compleja y en
las tribus (ya sedentarias) aparecen jerarquías sociales. Así, conceptos como el de
propiedad o riqueza son consecuencia directa de los cambios en la economía del Neolítico.
Al hacernos sedentarios, aparece la necesidad de construir fortificaciones y armamento para
defenderse de posibles ataques extranjeros.
Estos estaban motivados fundamentalmente por
el control de recursos (ya que los nómadas, que aún existían, no conocían el concepto de
propiedad). Es de este modo como, para algunos historiadores, surge la guerra.
Organizar todo este complejo sistema (utilizar el agua para la agricultura y la ganadería,
garantizar la necesidad de protección, alimentar a una población mayor…) hace que se vaya
imponiendo, progresivamente, un poder político más fuerte. También en el plano religioso
las creencias son más complejas, ya que se va a rezar a ciertos dioses para que, según creían
nuestros antepasados, protejan de las sequías, garanticen mejores cosechas, etcétera.
Las nuevas aportaciones e inventos del Neolítico las nuevas técnicas agrícolas hicieron necesaria la fabricación de instrumentos, como la
hoz (para segar), la azada (para cavar la tierra) o el molino, para moler el grano. La invención
de la rueda fue de gran importancia, ya que permitíó arar los campos con mayor facilidad
y facilitar el transporte. A su vez, la necesidad de almacenar, transportar y cocer los alimentos favorecíó el
desarrollo de la cerámica. En consecuencia, aparecen los primeros artesanos, que
comienzan a cambiar útiles por alimentos a los agricultores.
La Edad de los Metales la Edad de los Metales se inició hacia el 4.500 a. C., con el descubrimiento de la metalurgia
(técnica de trabajo de los metales). Su fecha de fin es discutible, ya que depende de la zona
en la que nos encontremos. En general, se estima que termina con la aparición de la escritura,
en torno al año 3.500 a. C. En Mesopotamia (actual Irak).
Cambios producidos en la Edad de los Metales la Edad de los Metales puede ser dividida en la Edad del Cobre (5.000 a. C.), del Bronce
(3.000 a. C.) y del Hierro (2.000 a. C.). Es, sobre todo, el trabajo del hierro el que permitíó
fabricar mejores armas y utensilios agrícolas. Gracias a ello, se fortificaron muchos
poblados.
Además, la elaboración de metales era una tarea difícil, por lo que aquellos
artesanos especializados que podían trabajarlos ganaron un mayor estatus social y político.
Debido a la necesidad de obtener estos metales, el comercio comenzó a desarrollarse más.
Muchos de los metales eran intercambiados por otros productos, lo cual favorecíó que el
trueque se fuera abandonando. De este modo, aparecen formas de dinero.
El arte prehistórico la producción artística de la Prehistoria está muy relacionada con los rituales religiosos o
mágicos. En la actual España, encontramos pinturas en la zona de Cantabria, donde destacan
los famosos bisontes de la cueva de Altamira. Son animales pintados en tonos rojizos,
negros o marrones, con mucho detalle. Nuestros antepasados aprovecharon los salientes de
las rocas para dar la sensación de volumen.
También en la zona valenciana encontramos pinturas prehistóricas de animales, aunque
son mucho más esquemáticas. En ellas, se nos muestran escenas de caza o de la vida
cotidiana. Además, suelen estar pintadas de un solo color.
Por último, podemos destacar las famosas Venus paleolíticas: unas mujeres con una gran
exageración de las partes del cuerpo relacionadas con la maternidad (muslos, caderas y
pechos). Algunas teorías afirman que estas figuras representarían una especie de diosas
relacionadas con la fertilidad.