Portada » Español » Modernismo y Generación del 98 en la literatura española
El siglo XX está caracterizado por sus rápidos cambios: avance en ciencia, diferentes corrientes ideológicas y muchas tendencias artísticas. Al principio del siglo, los creadores luchan contra las notas clásicas del arte burgués y desarrollan 2 posturas incompatibles: la tendencia de la vanguardia (arte puro, desconexión de la realidad) y tendencia al compromiso (realidad y problemas sociales). El modernismo hispánico es un resumen del parnasianismo y del simbolismo francés con la tradición literaria española (Bécquer y Rosalía). Originario de Hispanoamérica pero luego extendido a España:
Los pioneros fueron José Martí y Manuel Gutiérrez Nájera, el mejor ejemplo es Rubén Darío y su obra se divide en dos etapas: 1- Exuberante y preciosista: Azul y Prosas profanas. Se percibe la huella parnasiana. 2-Tendencia al intimismo: Cantos de vida y esperanza. Hay contención en la búsqueda de la brillantez externa y en los efectos sonoros.
Empieza tras la visita de Rubén Darío a España (1892). Destaca Manuel Machado (Alma), Antonio Machado (Soledades), Juan Ramón Jiménez (Arias tristes), Valle-Inclán con su prosa modernista (Sonatas) y Eduardo Marquina (Las hijas del Cid).
Los temas que tratan los modernistas son:
Similar al romántico, manifestado en 4 actitudes: -Exaltación de lo irracional (lo fantástico, fabuloso, misterioso). -Gusto por lo mortecino y decadente (otoñal, crepuscular). -Sensación de tedio y malestar (melancolía). -Angustia existencial (búsqueda de lo trascendental más allá de lo visible).
Desean escapar de la mediocridad de 2 formas: por la introspección (“galerías del alma”, A.Machado) y por la evasión espacial o temporal (países exóticos y remotos; tiempos legendarios.
Gusto por ciudades bohemias (París) pero también por lo pintoresco y castizo.
Interés por pueblos primitivos indígenas con cualidades como autenticidad, pureza, inocencia virginal.
Exalta lo hispánico ante la creciente hegemonía anglosajona.
Formalmente, este movimiento huye del prosaísmo de la lírica decimonónica y busca embellecer sus composiciones con ritmo y musicalidad, con frecuentes paralelismos, rimas internas, etc., también con el arte de la sugerencia para lo que recurren a:
Asociación de sensaciones percibidas por diferentes sentidos corporales.
Cuando la cualidad de un objeto se atribuye a otro objeto próximo por una relación de contigüidad espacial.
Imagen física que sugiere algo no perceptible físicamente.
Los versos más usados son, por influencia francesa, el alejandrino (7+7), el dodecasílabo (6+6) y el eneasílabo, pero también experimentan con el verso libre. Las estrofas más usadas son el soneto, la silva, el sexteto y otros.
El siglo XIX acaba con una gran crisis nacional por el fin del imperio colonial español. Esto provocó una ola de indignación y protestas manifestadas en literatura por los escritores de la generación del 98: Miguel de Unamuno, Pío Baroja, Ramiro de Maeztu, Arozín, Antonio Machado y Valle-Inclán.
Autores como Miguel de Unamuno y Ramiro de Maeztu abordan temas políticos y morales de España.
Autores como Miguel de Unamuno y Antonio Machado combinan herencias simbólicas francesas y alemanas en sus obras.
Autores como Pío Baroja, Miguel de Unamuno y Azorín rompen con el realismo decimonónico en sus obras.
Valle-Inclán destaca como innovador en el teatro español de la época.