Portada » Filosofía » Método dialéctico marxista: bases, características y enajenación del trabajo
Partió de la experiencia humana. Ni el objeto del conocimiento ni la facultad de conocer del sujeto son inmutables, ambos se encuentran en una relación dialéctica.
Todo conocimiento es crítico, su contenido no es absoluto ni inmóvil, y la acción misma del pensamiento que lo realiza lo transforma. La ciencia avanza en medio de contradicciones que hacen surgir nuevos planteamientos. El saber no se crea fuera del proceso mediante el que el hombre conserva y produce todo su ser, es dialectico como la realidad misma. El saber es una praxis, no es teórico ni contemplativo, sino revolucionario.
Tanto para Marx como para Hegel la base de todo cambio social es la oposición, la contradicción la lucha entre opuestos. Mientras para Hegel la lucha era entre naciones, para Marx era entre clases.
1) Considera la naturaleza como un todo único, relacionado, donde los objetos y fenómenos dependen unos de otros y se condicionan recíprocamente; todo se encuentra relacionado y en interacción.
2) Considera la naturaleza en estado de perpetuo cambio y renovación, donde siempre algo nace y se desarrolla y algo se destruye y termina su ciclo; todo está en movimiento y mutación.
3) Considera el desarrollo de la naturaleza como un proceso en el que, por resultado de la acumulación de imperceptibles y graduales cambios cuantitativos, se efectúa la transición, a saltos, a los cambios radicales, cualitativos; la cantidad pasa a ser calidad. Conforme a la dialéctica, el desarrollo no es una simple repetición del pasado, sino un movimiento ascendente de la etapa inferior a la superior.
4) La dialéctica parte de que son inherentes a los objetos y fenómenos de la naturaleza, contradicciones internas; que todo tiene su lado negativo y positivo, lo que pasa y lo que se desarrolla, y que la lucha entre esto y aquello constituye el contenido interior del proceso de desarrollo, proceso de la transformación de los cambios cuantitativos en cualitativos; la contradicción lleva adelante, proclama una de las afirmaciones más importantes de la dialéctica.
El estado es un instrumento de la clase dominante para ejercer su dominación, es la violencia organizada de una clase para la opresión de la otra. Es una superestructura destinada a desaparecer.
La producción intelectual se transforma con la producción material. Las ideas dominantes en cualquier época son las de la clase dominante.
Es el factor que constituye la mediación entre el hombre y la naturaleza, es expresión de la vida humana y a través del trabajo se modifica la relación del hombre con la naturaleza, mediante el trabajo, el hombre se modifica a sí mismo.
Marx en el trabajo enajenado afirma “el trabajador desciende al nivel de mercancía y de una mercancía miserable”, se produce la “devaluación del mundo humano y el incremento del valor del mundo de las cosas”. El trabajo es externo al trabajador, no pertenece a su ser. Su trabajo no es voluntario, es forzado.
Expone la falta de libertad del hombre. Para Marx el trabajo como actividad vital consciente, que distingue el hombre del animal no es posible en la sociedad capitalista. La plena realización de la humanidad y su emancipación esta ligada al cambio social.
El fin del socialismo era la emancipación del hombre, su autorrealización, el desarrollo de la personalidad individual. El trabajo ya no sería enajenado sino libre, el hombre no solo se realiza como individuo sino también como especie.
Marx identifica 4 formas de enajenación:
En cuanto al producto del trabajo: el hombre productor (trabajador), transforma la naturaleza, hace objetos, pero estos serán ajenos a el y llegan a dominarlo. El trabajador se vuelve mas pobre, a medida que produce más riquezas. El trabajo se convierte en un objeto adquirido, cuanto mayor es la apropiación de consumidos, mayor es la enajenación del producto. El trabajador pone su vida en el objeto y su vida ya no le pertenece a él sino al objeto. El trabajo tiene una existencia interna, se le impone, existe independientemente fuera del mismo y ajeno a él, se opone a el como un poder autónomo. El trabajador se convierte en esclavo de su trabajo. La relación directa del trabajo con su producto es la realización del trabajador con lo que produce.
En cuanto al proceso de producción: en la actividad productiva misma. La libertad especifica del hombre es la de pensar, tomar decisiones; el trabajo en lugar de ser algo que significa al trabajador, que permita realizar su humanidad, su creatividad, su libertad, es forzado y externo. El hombre se enajena con el producto debido a que se enajena también con la forma de producción, y esta es la enajenación activa. Se rompe la relación directa del trabajador y su obra. El trabajador le es externo, no trabaja para si mismo sino para el beneficio de otros. La enajenación del objeto, del trabajo, constituye el hecho de ser externo al trabajador, es un trabajo forzado y no le es parte de su naturaleza.
Enajenación de su vida como especie: Ninguno es consciente de su ser genérico (conciencia de si mismo individuo y de la especie humana) no considera el trabajo como actividad vital consciente. “Porque el trabajo, la actividad vital, la vida productiva, aparecen ahora ante el hombre únicamente como medios para la satisfacción de una necesidad, la necesidad de mantener su existencia física…la vida misma aparece solo como medio de vida”. La naturaleza es el cuerpo inorgánico del hombre. El trabajo enajenado, enajena a la naturaleza del hombre y a este de sí mismo, de su propia función activa, de su actividad vital, enajenada de la especie. Esa convierte la vida de la especie en un medio para la vida individual. El hombre hace de su actividad vital mínimo un objeto de su voluntad y de su conciencia, lo convierte en un medio para su existencia. La manipulación de la naturaleza inorgánica, es la confirmación del hombre como un ser que considera a la especie como su propio ser o a sí mismo como especie.
La enajenación de los demás hombres: “Cuando el hombre se confronta a sí mismo, también se confronta a otros hombres”, con el trabajo de estos y con los objetos de su trabajo. El objeto del trabajo es la objetivación de la vida del hombre como especie. El trabajo enajenado le arrebata el objeto de producción al hombre. Pero a su vez le arrebata su vida como especie. El trabajador enajena al hombre de su propio cuerpo, la naturaleza externa, su vida mental y su vida humana, pierde su identidad. A través de; trabajo enajenado, el hombre no solo produce su relación con el objeto y con el proceso de la producción como una relación con hombres ajenos y hostiles. Mediante el trabajo enajenado crea la relación de otro hombre que no trabaja y esta fuera del proceso de trabajo con este trabajo.
Expone la falta de libertad del hombre. Para Marx el trabajo como actividad vital consciente, que distingue al hombre del animal no es posible en la sociedad capitalista. La plena realización de la humanidad y su emancipación esta ligada al cambio social.
El fin del socialismo era la emancipación del hombre, su autorrealización, el desarrollo de la personalidad individua. El trabajo ya no sería enajenado sino libre, el hombre no solo se realiza como individuo sino también como especie.
Mediante el trabajo enajenado crea el trabajador la relación de este trabajo con un hombre que está fuera del trabajo y le es extraño. La relación del trabajador con el trabajo engendra la relación de éste con el del capitalista. La propiedad privada es el producto, el resultado, la consecuencia necesaria del trabajo enajenado, de la relación externa del trabajador con la naturaleza y consigo mismo.
La propiedad privada aparece como fundamento, como causa del trabajo enajenado, es más bien una consecuencia del mismo. Esta relación se transforma después en una interacción recíproca.
El salario es una consecuencia inmediata del trabajo enajenado y el trabajo enajenado es la causa inmediata de la propiedad privada. Al desaparecer un término debe también, por esto, desaparecer el otro.
Una revolución proletaria no transferiría el poder de explotar, sino que aboliría la explotación. La raíz de la desigualdad social es económica, toda reforma política es superficial, deja intocada la fuente de la desigualdad, solo aboliendo la propiedad privada puede efectuarse un cambio sustancial.
1) Elevación del proletariado en clase dominante, la conquista de la democracia. Adopción de diferentes medidas para arrancar a la burguesía todo el capital y centralizar los instrumentos de producción en manos del Estado, del proletariado organizado en clase dominante.
2) Asociación en que el libre desenvolvimiento de cada uno será la condición del libre desenvolvimiento de todos.