Portada » Filosofía » Método de Descartes: Razón y Verdad
Con su obra Discurso del Método, Descartes quería aprender a distinguir lo verdadero de lo falso para ver claro en sus acciones y caminar con seguridad en esta vida. Descartes buscaba una filosofía que pudiera considerarse una verdadera ciencia, ya que, a su parecer, la filosofía estaba estancada en descubrimientos anteriores guiados por un método inadecuado.
Pretendía descubrir lo mismo que los filósofos anteriores, pero con su propio método, dando como resultado una filosofía ordenada. Para explicar esto, solía utilizar el ejemplo del árbol: las raíces serían la filosofía y la metafísica, de ahí se deduce el tronco, que sería la física, y de esta se deducen las demás ramas, que serían todas las demás ciencias prácticas, incluida la moral. El objetivo de esta metáfora era el convencimiento de Descartes ante una unidad científica.
Descartes defiende que la razón humana es una en todos los hombres, por lo que, siguiendo un orden matemático correcto, siempre se llega a las mismas conclusiones, teniendo en cuenta que pueden influir la educación, etc. En condiciones normales, si no influye nada de esto, todos llegan a la misma conclusión. (OO)
Esto es lo que hará Descartes: elaborar una especie de método matemático aplicado a la filosofía. Para él, la ausencia de este método era el resultado de que nunca se llegase a las mismas conclusiones y el no avance de la filosofía. Con este método, no se producirían opiniones diferentes, sino que todos llegarían a una misma opinión. Sin embargo, a Descartes le parecían arbitrarias e inútiles todas las demostraciones matemáticas y le extrañaba que no se hubiera construido nada más elevado a los principios matemáticos.
Durante la Guerra de los Treinta Años, Descartes asienta las bases de la geometría analítica, que viene a ser para Descartes el paradigma o modelo de un método universal que él persigue. Al ver el éxito, lo aplicó a la filosofía buscando una verdad absoluta de la que no se pudiera dudar y de la que se podría ir deduciendo a partir de las evidencias.
Antes de introducir el método, Descartes hace uso de la intuición y la deducción, principales instrumentos de la razón. La mente en sí misma es infalible, pero puede verse alterada por múltiples factores. La mente tiene la capacidad natural de ejecutar dos acciones: intuición y deducción.
Descartes llega a una verdad totalmente cierta, indudable y evidente. El método, pues, consistirá en dudar de todo aquello que presente la más mínima duda para encontrar algo indudable. Esto es la duda metódica; la duda es un instrumento para encontrar la verdad. La duda es teórica, ya que queda en la teoría. En definitiva, la duda es universal, metódica y teórica.