Portada » Economía » Mercados de Divisas y Euromercados: Tipos de Cambio y Bolsa de Valores
La función del mercado de divisas es la transferencia de poder adquisitivo, la financiación del comercio internacional y la cobertura frente al riesgo de tipo de cambio. Dentro de este mercado podemos distinguir entre cuatro tipos:
Es el medio de pago extendido en una moneda diferente a la nacional y pagadera en un país distinto al de residencia de su tenedor. Swaps de divisas, consiste en la venta simultánea de una divisa al contado y la compra de dicha divisa en el mercado a plazo. En los mercados de divisas interactúan diferentes agentes:
Las divisas son objeto de entrega inmediata y se negocian en el mercado al contado. El tiempo que media desde la contratación hasta el momento de su liquidación no excede de 2 días hábiles. Estas operaciones al contado se denominan spot y suponen una parte muy importante de las operaciones de compraventa de divisas.
Las partes acuerdan la compraventa de una cantidad concreta de un valor en una fecha futura predeterminada, a un precio convenido de antemano. Son contratos estandarizados, se negocian sin necesidad de esperar al vencimiento, y las partes aportan garantías.
Una opción es un contrato que otorga a su comprador el derecho a comprar o vender una determinada cuantía de un activo, a un precio determinado llamado precio de ejercicio, en un periodo de tiempo estipulado. En las opciones, al ser contratos y no valores, no es necesario comprar primero para luego vender. El comprador de una opción tiene el derecho, pero no la obligación, de comprar o vender al vencimiento; por el contrario, el vendedor de la opción está obligado a comprar o vender si el comprador decide ejercer su derecho. Dentro del mercado de opciones destaca el mercado paralelo Over the Counter (OTC) operado por los grandes bancos, donde los contratos de opciones están hechos a medida de las necesidades del cliente, con mayor flexibilidad en sus condiciones.
Mercado donde se produce el mayor volumen de operaciones de divisas. Constituido por instrumentos financieros que no se comercializan en mercados organizados y entre los que destacan:
Tipo de cambio fijo: Se caracterizan porque las alteraciones de la oferta o demanda de divisas no producen modificaciones del tipo de cambio, debido a las intervenciones de los bancos centrales que sostienen el tipo de cambio a un determinado nivel, mantienen las fluctuaciones dentro de ciertos márgenes estrechos previamente establecidos.
Tipo de cambio flexible: Los tipos de cambio están formados por la libre interacción de la demanda y oferta de divisas, las cuales a su vez dependen de múltiples factores, entre los cuales destacan los diferenciales de inflación, de tipos de interés y del crecimiento de los países.
Régimen de fluctuación intervenida: Los Bancos Centrales actúan cuando creen conveniente comprando o vendiendo divisas para influir en los tipos de cambio. Es igual que en el tipo de cambio fijo pero sin comprometerse a mantener los tipos de cambio dentro de los márgenes preestablecidos.
Basada en la ley del precio único, establece que el nivel de precios ajustado por el tipo de cambio ha de ser idéntico en todos los países.
Las fluctuaciones en los tipos de interés nominales son el resultado de variaciones en las expectativas sobre la evolución de precios, siendo los tipos de interés reales iguales en todos los países y manteniéndose estables a lo largo del tiempo.
Las fluctuaciones en los tipos de interés nominales son el resultado de las variaciones en las expectativas sobre la inflación en los diferentes países.
Fuera de la jurisdicción nacional del país (mercados off-shore) que emite la moneda en curso legal. Sus principales características son:
Es el mercado donde se compran y venden diferentes activos financieros como acciones, bonos, obligaciones, etc. La función principal es proporcionar liquidez a los títulos ya emitidos para que los agentes puedan operar. Dentro de este mercado podemos distinguir entre tres tipos:
La supervisión de estos mercados depende de la CNMV que determina la admisión de los valores a negociar en un mercado secundario oficial. El organismo rector y de organización de cada bolsa particular es la Sociedad Rectora, sociedad anónima cuyos accionistas son los intermediarios bursátiles (sociedades y agencias de valores). Admite la negociación del valor en el mercado que se trate, previa solicitud del emisor, pago de los derechos y cumplimiento de los requisitos. El SIBE (Sistema de Interconexión Bursátil) es la red informática conectada a todas las Bolsas de Valores, y donde se negocian de forma efectiva los títulos admitidos a cotización. Iberclear (Sociedad de Gestión de los Sistemas de Registro, Compensación y Liquidación de Valores, S.A. Unipersonal) se encarga de gestionar la liquidación y compensación de valores, así como de llevar el registro contable.
En España están en Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia. Son mercados secundarios oficiales destinados a la negociación en exclusiva de acciones y valores convertibles o que otorguen derecho de adquisición o suscripción. En la práctica, los emisores de renta variable también acuden a la bolsa como mercado primario. La organización y funcionamiento de cada Bolsa depende de su correspondiente Sociedad Rectora.
Organizado por el Banco de España. Los valores negociados en este mercado son de renta fija como los Bonos, Obligaciones y Letras del Tesoro y la deuda emitida por otras Administraciones y Organismos Públicos. Estos valores también se negocian en la Bolsa de Valores.
Los productos negociados son opciones y futuros. MEFF es el holding que los regula, y opera tanto en renta fija como variable, considerándose como mercados secundarios organizados oficiales.
Los títulos de renta variable o acciones son valores mobiliarios que representan una parte alícuota del capital de una sociedad. La división del capital de una empresa en acciones supone que el accionista es copropietario de ésta. La cotización del precio de la acción representa el precio que el mercado está dispuesto a pagar por ellas. La contratación de acciones se hace por el mercado de corros o de viva voz (1% de la negociación) y el mercado electrónico SIBE (Sistema de Contratación Informatizada).
Aportan mayor seguridad, sus activos ofrecen la plena certidumbre de cobro del nominal a su vencimiento, más una rentabilidad fija o cupón. Los principales activos de renta fija son: bonos, letras, pagarés de empresas privadas y deuda pública como letras del tesoro, bonos y obligaciones del Estado o empresas públicas.
La OPV (Oferta Pública de Venta) o colocación de las acciones en el mercado es la fase más importante, ya que el precio de colocación es determinante en el éxito de la salida. Normalmente, se realiza una oferta pública de suscripción, se venden los derechos de suscripción y los inversores suscriben inmediatamente la ampliación aportando, por lo general, la prima correspondiente. Otros aspectos importantes son: la admisión a negociación, el suministro obligatorio de información y los costes asociados.
Apertura de una cuenta de valores para poder administrar su cartera de valores, asociados a esta cuenta se producirán los necesarios movimientos de efectivo. Tratamiento de las órdenes firmadas por el propietario, claridad, identificando el inversor, la clase de valor, el sentido de la orden (compra o venta), plazo de vigencia, precio y volumen de ejecución. Las Sociedades y Agencias de Valores hacen llegar los datos de la orden al operador del mercado continuo en cuestión de segundos, éste valida los datos e introduce la orden en el SIBE (Sistema de Interconexión Bursátil Español) donde se cruzará con otra orden de signo contrario en décimas de segundo, desencadenando un flujo a través del cual el inversor verá confirmada su operación. La liquidación, después de la ejecución de las operaciones el intermediario preparará los datos necesarios para la liquidación de la operación. Proceso de intercambio de valores y efectivo que sigue a toda operación de mercado. Crédito al mercado y préstamos de valores, además de comprar y vender con el dinero o valores que el cliente disponga existe la posibilidad de tomar prestado uno u otros. Aumenta el riesgo y las posibilidades de beneficios o pérdidas.