Portada » Ciencias sociales » Mecanismos de Penetración Estatal y Fundamentos de Políticas Públicas
Implica la aplicación de violencia física o amenaza de coerción, tendientes a lograr el acatamiento a la voluntad de quien la ejerce y a suprimir toda eventual resistencia a su autoridad. En la experiencia argentina, el instrumento clave empleado por el Estado para imponer esta forma de control coercitivo fue la institucionalización de un ejército nacional.
Este método fue el más relevante en los principios de la formación del Estado. Por la fuerza, reprimiendo distintas revueltas, fue logrando la autoridad que necesitaba el Estado Nacional. Pero costó mucho, también por el hecho de que tanto el país como el mismo ejército (reflejando la realidad del país) no compartían las motivaciones, sino que se sentían parte de un territorio en particular. Y el Estado nacional tenía poco poder para lograr consenso y unificación.
Se refiere a la captación de apoyos entre los sectores dominantes locales y gobiernos provinciales, a través de alianzas y coaliciones basadas en compromisos y prestaciones recíprocas tendientes a preservar y consolidar el sistema de dominación impuesto en el orden nacional. La esencia de este mecanismo remite a las reglas más elementales del juego político: debilitar al adversario y reforzar las propias bases sociales de apoyo.
Las tácticas utilizadas eran: subsidios, empleos públicos e intervención federal.
Aquellas formas de avance del Estado nacional sobre el interior; expresadas en obras, servicios, regulaciones y recompensas destinados fundamentalmente a incorporar las actividades productivas desarrolladas a lo largo del territorio nacional al circuito dinámica de la economía pampeana. Esta incorporación producía dos tipos de consecuencias:
La penetración del Estado se hacía efectiva en la medida en que los recursos movilizados permitían la articulación de actividades e intereses, conformando nuevas modalidades de relación social.
Una de las mayores complicaciones fue unir al territorio, grandes extensiones, territorios muy diferenciados entre sí, con culturas y formas muy distintas. Difícil sentirse parte de la unidad nacional.
Apeló a mecanismos mucho más sutiles, subliminales. Mecanismos que, operando sobre un campo de percepciones, valores, actitudes, representaciones y comportamientos sociales claramente asociados a los sentimientos de pertenencia a una comunidad nacional, tendieran a legitimar el nuevo patrón de relaciones sociales que se venía conformando.
La penetración ideológica, con la cooptación y la material, contribuyeron a crear la base consensual sobre la cual podía construirse un sistema de dominación.
Hay dos aspectos en este proceso; por una parte, la creación de una conciencia nacional, es decir, un sentido profundamente arraigado de pertenencia a una sociedad territorialmente delimitada, que se identifica por una comunidad de origen, lenguaje, símbolos, tradiciones, creencias y expectativas acerca de un destino compartido. Por otra, la internalización de sentimientos que entrañan una adhesión natural al orden social vigente, y que, al legitimarlo, permiten que la dominación se convierta en hegemonía.
En el primer caso, procura crear una mediación entre Estado y sociedad basada en el sentido de pertenencia a una nación; en el segundo, promueve el consenso social en torno a un orden capitalista, un modo de convivencia, de producción y organización social.
Gobierno: conjunto de organizaciones que combinan recursos y los transforman en políticas, en programas públicos, en servicios, en productos, para atender los problemas de los ciudadanos, controlar sus comportamientos, satisfacer sus demandas y lograr impactos sociales, políticos y económicos.
Políticas públicas: conjunto de objetivos, decisiones y acciones que lleva a cabo un gobierno para solucionar los problemas que en un momento determinado los ciudadanos y el propio gobierno consideran prioritarios. Se pueden entender como un proceso que se inicia cuando un gobierno o un directivo público detecta la existencia de un problema que merece su atención y termina con la evaluación de los resultados que han tenido las acciones emprendidas para eliminar, mitigar o variar ese problema. El proceso o ciclo de construcción de las políticas públicas comprende las siguientes fases:
El proceso de las políticas públicas tiene un carácter cíclico. El gobierno, una vez efectuada la intervención, mide los efectos de la misma sobre el problema y tras observar si este ha concluido o si permanece, se pregunta si es necesario seguir actuando. En caso afirmativo, surgiría un nuevo proceso de formulación de alternativas. Los resultados de la política retroalimentan el proceso.
El ciclo o proceso de las políticas públicas es una construcción conceptual que no tiene por qué ocurrir en la realidad. No todas las políticas públicas siguen este proceso en todas sus fases, e incluso algunas alteran el orden del proceso.