LA ÉPOCA DE LAS REGENCIAS: EL ESTABLECIMIENTO DEL SISTEMA LIBERAL Tras la muerte de Fernando VII fue proclamada reina su hija Isabel II. Al ser menor de edad, se estableció un período de regencias, que fueron desempeñados por su madre, María Cristina de Borbón (1833-1840), y por el general Espartero. Entre los años 1833 y 1843 se produjo en España un doble conflicto: el primero la Primera Guerra Carlista; y el segundo aludía al establecimiento de un régimen constitucional. Durante los años de las regencias el partido progresista ocupo mayor tiempo el gobierno e implanto mas reformas políticas.
LA REGENCIA DE MARIA CRISTINA Coincidió con la primera guerra carlista y se inicio el transito al liberalismo, adoptando medidas como la declaración de indulto general o la desarticulación de las fuerzas partidarias a don Carlos.
LOS GOBIERNOS MODERADOS Los primeros gobiernos estuvieron protagonizados por monárquicos reformistas como Cea Bermúdez. Durante su mandato se aprobó la liberación del comercio, de la industria y del transporte, así como la libertad de imprenta o la división de España de provincias por Javier De Burgos. En enero de 1834 la reina regente confío el poder a Martínez De La Rosa, que elaboro el ESTATUTO REAL de abril de 1834, cuyo propósito fue preparar el transito hacia un sistema liberal. En el estatuto las Cortes ni representaban la soberanía nacional ni tenían capacidad legislativa plena, pues era una asamblea para asesorar a la corona, además se dividían en dos cámaras. Con ellas se pretendía que hubiera representantes tanto del Antiguo Régimen como grupos de burgueses mas poderosos. La mayoría de los procuradores exigieron al gobierno medidas mas profundas.
LA DIVISION DEL LIBERALISMO: MODERADOS Y PROGRESISTAS Estos tenían serias diferencias ideológicas. Los moderados liderados por Martínez De La Rosa y sus principios ideológicos eran: – El mantenimiento del orden publico y la seguridad. – Limitación de los derechos individuales. – Construcción de un estado centralista. – Soberanía compartida entre rey y cortes, así como la oposición a la democracia. Los progresistas encabezados por Espartero constituían el ala izquierda del liberalismo. Y sus principio eras: – Defensa del sufragio censitario. – Principio de soberanía nacional y aceptación de las cortes como única institución representativa. – Libertad de expresión y elegibilidad de ayuntamientos. – Lucha contra los impuestos de consumo. – Separación de la Iglesia y el Estado.
LOS PROGRESISTAS Y LA CONSTITUCION DE 1837 Los liberales progresistas acabaron organizando revueltas en numerosas ciudades a través de la creación de juntas locales. Algunos de estos movimientos dio lugar a sublevaciones, a la quema de varios conventos y a la matanza indiscriminada de frailes. Como consecuencia de esto, Mª Cristina mando formar gobierno a Juan Álvarez Mendizábal que ceso rápidamente debido a los altercados en las calles y sobre todo por el pronunciamiento militar de un grupo de sargentos, que obligaron a la reina regente a aprobar la constitución de 1812. Con el nuevo gobierno progresista dirigido por Calatrava las cortes hicieron la constitución de 1837, en la cual se establecía una soberanía compartida entre Rey y Cortes; reconocimientos de derechos individuales y de imprenta; así como Cortes bicamerales formada por el Senado y el Congreso de los Diputados.
LA REGENCIA DE ESPARTERO Entre 1837 y 1840 se fueron radicalizando las posturas entre progresistas y moderados, sobre todo por el intento de los últimos de limitar la Milicia Nacional. El ultimo choque entre los progresistas tuvo lugar con ocasión de la ley de Ayuntamientos, a esto se sumaba la creciente impopularidad de la regente que contrajo matrimonio con Fernando Muñoz y que se trataba de un matrimonio que alentaba serias dudas sobre la legitimidad de la regente. Finalmente marcho al destierro en octubre de 1840. El general Espartero fue elegido para ocupar la regencia. Impuso una especie de liberalismo autoritario que propicio la aparición de rivales dentro del ejercito. Los gobiernos de este periodo retomaron las desamortizaciones de los bienes del clero y como consciencia una fuerte oposición de la Iglesia. A nivel económico se adopta una política que beneficio a la burguesía rural y un sistema comercial tendente al librecambismo. La decisión de bombardear Barcelona a causa de los disturbios y las insurrecciones generales puso fin a su regencia. Espartero se exilio en Lyon.
REINADO EFECTIVO DE ISABEL II En otoño de 1843 Isabel II fue nombrada mayor de edad a los 13 años con el propósito de evitar una nueva regencia. Se inicio un periodo de 25 años en el que el gobierno al contrario que en las regencias fue ocupado mas tiempo por moderados(1844-54). Los progresistas solo acudieron al poder de modo efímero(54-56) y alternando con los moderados de izq. en la fase final del reinado(56-68). En esta nueva etapa se procedió a la institución del Estado Liberal y que respondía a los intereses de la burguesía grande y mediana, mientras que la pequeña solo fue un aliado circunstancial.
DECADA MODERADA En 1844, Isabel II nombró como jefe de Gobierno al líder moderado Ramón María Narváez. Durante los diez años siguientes se sucedieron gobierno de carácter moderado, de ahí que este período sea conocido como la Década moderada. Esta época se caracterizó por el logro de una cierta estabilidad política y orden. Se trataba de un sistema oligárquico en el que las Cortes fueron suspendidas con cierta frecuencia, se practicó el falseamiento electoral se extendió la corrupción administrativa y se marginó totalmente a los progresistas de Gobierno. Sus presupuestos ideológicos fueron la soberanía conjunta entre el Rey y la Cortes, el fortalecimiento del poder real, la adecuación del sistema político a las clases sociales dominante y el intento de hacer compatible el orden con la libertad. El moderantismo se basaba en el liberalismo doctrinario. Oscilaba entre el eclecticismo francés y el liberalismo británico.
LA CONSTITUCIÓN DE 1845 Una de las primeras medidas de los moderados en el poder fue la elaboración de una nueva Constitución en 1845. Sus características principales son: – Soberanía compartida entre rey y cortes. – División de poderes, fortalecimiento de la monarquía, poder ejecutivos por ministros y el legislativo por las cortes y el rey. -Confesionalismo. Religión católica la oficial del Estado. -Bicamerales. Senado y congreso. En política interior los moderados aprobaron unas de reformas para mejorar la administración: · Fundación de la Guardia Civil en 1844. Cuerpo armado cuya finalidad era el orden público, defender las propiedades y a las personas. Disolución de la milicia nacional (1845) por ser considerada peligroso cuerpo arma bajo la influencia de los progresistas más radicales. · Aprobación de una nueva ley de Ayuntamientos (1845) por la que el Gobierno se reservaba el nombramiento de todos los alcaldes. También se creó la figura del gobernador civil, que frecuentemente era el líder de los moderados de la zona. De esta manera se favoreció la corrupción electoral por las habituales manipulaciones en las votaciones. La medida se complementó con una nueva modificación en la legislación electoral en la que se disminuía el número de votantes. · Se aprobó un nuevo Código penal mientras quedó en proyecto el nuevo Código Civil (1851); y en 1845 por obra del ministro Pedro Pidal se reguló la instrucción pública, asumiendo el Estado la obligación de la enseñanza como asunto público. · El ministro Alejandro Mon y su colaborador, Ramón Santillán, reformaron la Hacienda pública. Llevaron a cabo la Ley Mon-Santillán (1845) que constituyó la reforma tributaria más importante realizada en España en todo el siglo. se pretendía mejorar el sistema de impuestos para aumentar los ingresos para disminuir la deuda y costear las nuevas infraestructuras de este modo los impuestos de clasificaron en directo e indirectos. · Se firmo un concordato con la santa sede(1851) por lo que el estado se comprometía a sostener sus gastos y ellos no opusieron objeciones a la acción de la corona de elegir los obispos
BIENIO PROGRESISTA Desde 1850 el autoritarismo y la corrupción de los gobiernos moderados se fue incrementando. Debe añadirse la oposición ejercida por los carlistas y los progresistas a los que se incorporaron, desde este momento, el ala izquierda del moderantismo y el Partido Demócrata. Los demócratas reivindicaban el sufragio universal, Cortes unicamerales, libertad religiosa, instrucción primaria gratuita y la intervención del Estado en las relaciones laborales. Habían hecho su aparición, junto a los progresistas, en las insurrecciones que en 1848 estallaron en varias ciudades españolas (Madrid, B lona, Sevilla), como había sucedido en otras capitales europeas.
LA REVOLUCIÓN DE 1854 Sin embargo, la revolución más trascendental fue la de junio de 1854, se concretó con el pronunciamiento general, de origen irlandés, O’Donnell para derribar al Gobierno. Tuvo lugar en Vicálvarada y, tras un momento de dificultad inicial consiguió atraerse el apoyo de amplias capas populares, de los progresistas y de los demócratas publicación del Manifiesto de Manzanares redactado por Antonio Cánovas del Castillo, reivindicaba la reforma de las leyes electorales y de imprenta, la descentralización del poder y el restablecimiento de la milicia nacional, proclama se extendió por las grandes ciudades, donde se formaron juntas revolucionarias. Uno de los episodios más destacados por escenario Madrid, donde entre los días 17 y 19 de julio se sucedieron jornadas de insurrecciones y barricadas. Después de estos sucesos la reina encargó al general Espartero, la formación de un nuevo Gobierno al frente de los progresistas.
LAS REFORMAS PROGRESISTAS Los dos años que duró esta etapa fueron verdaderamente mas más significativas del período fueron las siguientes: · La acción más destacada del bienio fue-la desamortización del ministro de Hacienda, Pascual Madoz · Restauración de las leyes e instituciones de la década de 1830: Ley de imprenta, Ley Electoral, gobierno local y milicia nacional. · Aprobación de una Ley General de Ferrocarriles (1855), con el propósito de consolidar un mercado de ámbito nacional, y de una Ley de Sociedades Bancarias y Crediticias, que dio lugar al banco de España lugar al nacimiento del Banco de España
LOS GOBIERNOS MODERADOS Y LA UNION LIBERAL En los años siguientes a la finalización del Bienio progresista se sucedieron varios gobiernos moderados y se produjo la entrada en la escena política de la Unión Liberal, nuevo partido creado y liderado por O’Donnell con la vocación de ser una agrupación de centro que aglutinase a los moderados de izquierda y a los progresistas.
BIENIO MODERADO (1856-1858) Tras un breve gobierno de O’Donnell, la reina confió la presidencia del Consejo de Ministros a Narváez. La acción política de este gabinete se caracterizó por la vuelta al modelo político anterior a 1854. Se rehabilitó la Constitución de 1845. En esta época se aprobó la importante Ley Moyano’ (1857) por la que se ordenaba el sistema educativo. Los gobiernos moderados quedaron desacreditados por sus fuertes escisiones internas.
LA UNION LIBERAL Y EL GOBIERNO LARGO DE O´DONNELL Se ensayó una solución política protagonizada por la Unión Liberal. -Este periodo de siete años (1858-1863), conocido como el gobierno largo de O’Donnell, consiguió una importante estabilidad política el mantenimiento del orden público. La estabilidad política de estos años se vio favorecida por el progreso económico. Los unionistas potenciaron la expansión del ferrocarril, fomentaron la industria metalúrgica (construcción naval), impulsaron el desarrollo industrial y favorecieron la entrada de empresas e inversores de capital extranjeros. En el ámbito exterior, la Unión Liberal apostó por restaurar el papel de país como potencial internacional, aunque la mayoría de las veces obró de acuerdo a los intereses de Francia y RU y aunque obtuvo escasos beneficios. Nuestros militares intervinieron en America, Asia y África. se colaboro con Francia, después en la guerra de Marruecos, por ultimo el intento de recuperas santo domingo y la expedición a México junto con los otros dos para castigar el impago.
LA DISOLUCION DEL REGIMEN ISABELINO Desde 1863 se sucedieron gobiernos de moderados y unionistas muy inestables y autoritarios, alternativamente presididos por O’Donnell o por Narváez. La inseguridad se agravó por la fuerte depresión económica de 1864-1868 . La oposición se reforzaba, especialmente desde el ámbito universitario, y culminó con los sucesos de la noche de San Danie1 (1865), y las sucesivas intentonas fallida de los progresistas contra el Gobierno: sublevación de Prim en Madrid y del cuartel de San Gil (1866). Finalmente, progresistas, demócratas y republicanos -más tarde también los unionistas- firmaron el Pacto de Ostende (Bélgica, 1866) por el que se comprometían a derrocar a Isabel II.