Portada » Historia » Manifiesto de Manzanares: Origen, Ideas Clave y Contexto Histórico del Bienio Progresista
Descripción y exposición razonada del interés del documento como fuente histórica o historiográfica para la comprensión del fenómeno al que hace referencia.
Fuente primaria. Es una proclama, por tanto, es un texto histórico-circunstancial de contenido político, pues es una proclama política.
Este documento tiene gran relevancia como fuente histórica porque fue utilizado para justificar el pronunciamiento militar, exponer sus propuestas de reforma, buscar el apoyo de la nación (llamamiento a constituir juntas), y para iniciar una regeneración liberal progresista en España.
Fue escrito en 1854 en el cuartel general de Manzanares, dio inicio al periodo del Bienio Progresista, donde se plantean importantes reformas que pretenden cambiar el modelo liberal conservador y centralista de la época anterior.
Fue firmado por el general Leopoldo O’Donnell (líder del pronunciamiento militar en Vicálvaro y años más tarde será líder del partido de la Unión Liberal), está redactado por Antonio Cánovas del Castillo (político de tendencia progresista en esta época pero de ideología liberal conservadora durante la Restauración (ideó el modelo bipartidista iniciado con Alfonso XII).
El contexto histórico de este Manifiesto de Manzanares hay que situarlo en el período en el que el reinado de Isabel II pasaba de la Década Moderada (1844 – 1854) al Bienio Progresista (1854 – 1856).
Los antecedentes estarían en la «Década Moderada» que comienza con Isabel II proclamada reina. En la Década moderada se gobernó mediante las llamadas “camarillas” es decir, grupos de intereses comunes cuyo objetivo era gobernar para conseguir sus intereses. Durante este periodo destacó la alianza de la corona con los moderados.
Con Narváez se redacta la constitución de 1845 de principios conservadores, cuyos principios eran el orden frente a la libertad, la importancia de la propiedad y se busca un estado centralizado y uniforme (ley de ayuntamientos). Se realiza una reforma de la hacienda pública (ley Mon-Santillán creando los impopulares impuestos sobre el consumo), se crea la Guardia Civil (se crean para mantener el orden en el medio rural pero en realidad se crean para contrarrestar a las milicias nacionales) y se firma el concordato con la Santa Sede (el Estado se compromete a sostener económicamente a la iglesia).
Las crisis, corrupciones y el autoritarismo del gobierno produjeron un alzamiento liberal de carácter progresista.
Es en este contexto cuando se lleva a cabo el alzamiento de Vicálvaro o Vicalvarada, dirigida por O’Donnell.
Ante el fracaso parcial de este pronunciamiento se redacta el manifiesto de Manzanares, siguiendo las proclamas del Manifiesto del Manzanares se inicia la Revolución de 1854. Estos apoyos vendrán del partido progresista y de las masas populares que inician levantamientos callejeros.
Finalmente la Reina Isabel II, llama al General Espartero, del Partido Progresista, para formar gobierno (Bienio Progresista) que con Espartero comenzará una etapa reformista como:
Todo esto provocó un clima de conflictividad al final del periodo, alza de precios y revueltas obreras y campesinas que fueron reprimidas por el ejército y la Guardia Civil, hasta que finalmente O´Donnell sustituya a Espartero y ponga fin al Bienio Progresista.