Portada » Griego » Literatura Clásica: Un Recorrido por las Grandes Civilizaciones
Es la más antigua de las que conocemos y la más rica. Su primer soporte fueron las tablas de bambú y, con posterioridad, los manuscritos.
Fue un reformador de las costumbres individuales y colectivas, un moralista práctico. Sus pensamientos y enseñanzas fueron recogidos por sus discípulos. El libro se llama Los Diálogos.
Sabio que predicó el amor, la soledad, el desinterés: no obrar, no desear, no saber y conformarse. Sus principales ideas están en el libro Tao-te-king.
La que más influencia ha tenido en la literatura occidental.
Relatan mitos y leyendas de la India. La epopeya más famosa es Ramayana (50.000 versos) atribuida a Valmiki. Trata de las luchas del príncipe Rama para salvar a su esposa Sita de los demonios.
Narraciones protagonizadas por animales que tienen una finalidad didáctica. La más famosa es Panchatantra. La literatura oriental incide en la española como, por ejemplo, en El Conde Lucanor.
Fue la cuna del pensamiento religioso.
Colección de escritos donde se fundamentan las religiones judía y cristiana. Es el libro más difundido del mundo y el de mayor influjo en la civilización occidental.
Recoge la historia, creencias y tradiciones antes de la venida de Jesucristo en 4 libros: históricos, poéticos, proféticos y sapienciales.
Los más importantes son los 5 atribuidos a Moisés. El libro del Génesis narra el origen del mundo y del hombre, el diluvio universal, la historia de Noé, de Abraham hasta la muerte de José en Egipto.
Destaca el Job, poema sobre el dolor y la adversidad, los Salmos, himnos de alabanza o de arrepentimiento destinados al culto. El Cantar de los Cantares atribuido a Salomón.
Destaca el de Isaías que contaba cómo Dios hablaba a su pueblo a través de los profetas, que escribían lo que predicaban.
Son un conjunto de enseñanzas morales en forma de máximas.
Es la cuna de la civilización occidental. Su arte y su literatura están hechos a la medida de la naturaleza humana. Contaron con una lengua rica y desarrollada, de abundante vocabulario, flexible en su sintaxis y entonación musical; adaptable a la prosa y al verso. La fuente principal de inspiración es su mitología, que es el conjunto de leyendas y tradiciones.
Los más antiguos monumentos literarios son dos extensos poemas épicos: La Odisea y La Ilíada, escritas por Homero en el 750 a.C.
Su tema es la leyenda de Troya. Se basa en el asedio a esta ciudad por las tropas griegas. La leyenda se fijaba en 10 años, pero Homero nos la presentaba en una serie de episodios que transcurren en 51 días.
Narra las navegaciones de Ulises, uno de los capitanes griegos de la guerra de Troya. Cuando acaba la guerra vuelve a casa, pero por el camino sufre muchas desventuras y contratiempos que retardan su retorno. Su esposa Penélope es símbolo de fidelidad. Una de las características más propias de la épica tradicional es el empleo de un formulario fijo y estable que se repite constantemente a lo largo de un poema.
Tuvo su origen en la lírica coral que los campesinos, disfrazados, cantaban en honor a Dionisos, dios del vino y de la fertilidad de la tierra.
Es una obra dramática que gira alrededor de las grandes pasiones humanas en personajes elevados (dioses, héroes, reyes…) tomados de la mitología. Su desenlace es siempre malo, con el objetivo de infundir lástima, inquietud o terror en los espectadores. Los principales autores de estas obras son: Esquilo (524-455 a.C), Sófocles y Eurípides.
Dio forma definitiva a la tragedia, tanto en sus aspectos externos (decoración, vestuario, máscaras…) como internos (la pasión, el terror y la piedad). Entre las obras de Esquilo sobresalen Prometeo Encadenado y la trilogía Orestíada.
Llevó a la perfección la tragedia griega. A los 27 años derrotó en un certamen a Esquilo, se sucedieron sus éxitos y atesoró enorme fama y riqueza. Sus argumentos son más variados y están mejor desarrollados. Obras suyas destacan Antígona, Electra, Edipo Rey y Edipo en Colono, considerada la tragedia perfecta (Edipo Rey).
Revolucionó la tragedia, sus obras gustaron poco por su excesivo realismo y pesimismo. Con él sube al escenario el hombre de carne y hueso, que obedece a su propia consciencia. Entre sus obras destacan: Medea e Hipólito.
La comedia es un subgénero dramático que pretende divertir mediante el humor y la sátira; busca sus temas no en las grandes pasiones humanas, sino en los vicios y defectos comunes. Sus personajes, en vez de dioses o héroes del pasado, son individuos corrientes de la calle que utilizan un lenguaje vivo, ágil y procaz. Su creador fue Aristófanes (s. V a.C). Atacó a los políticos en Lisístrata y La Paz, a los filósofos en Las Nubes y a los escritores en Las Ranas.