Portada » Economía » Liquidez a corto plazo
Mide la capacidad de la empresa para generar liquidez o tesorería con la que hacer frente a sus compromisos de pago inmediatos, a muy corto plazo. Este índice se calcula mediante la relación por cociente entre el efectivo y otros activos líquidos equivalentes y el pasivo corriente, o exigible a corto plazo.
Es muy difícil definir un índice aplicable a todas las empresas, depende del tipo de empresa y la velocidad con la que se cobra y se paga. No obstante, se establece como norma general, que los parámetros adecuados para este ratio están entre 0´1 y 0´5.
Indica la capacidad de la empresa de generar recursos financieros líquidos, que le permitan hacer frente a las obligaciones a corto plazo. También se la denomina distancia a la suspensión de pagos, algunos autores la llaman coeficiente de liquidez.
Se establece por relación entre el activo corriente y el exigible a corto plazo o pasivo corriente:
Para que no haya problemas de liquidez, el valor de esta ratio ha de estar aproximadamente entre 1 y 2
. Es decir, el activo corriente ha de ser mayor que el exigible a corto plazo.
Aunque lo cierto es que dependerá de la empresa a la que estemos analizando, porque cada empresa tiene sus resultados óptimos.
RATIOS FINANCIEROS A LARGO PLAZO
Esta ratio mide la solvencia global de la empresa. Se refiere a la capacidad de los activos de la empresa para hacer frente a la totalidad de las obligaciones contraídas:
Estudian la relación que existe entre la financiación ajena y los fondos propios. Mediante el coeficiente de endeudamiento se establece la estructura financiera ideal de la empresa y también avisa a la empresa de los riesgos económicos y financieros que le pueden sobrevenir.
En términos generales, se pueden recurrir al endeudamiento cuando la rentabilidad económica que esperamos es superior al coste de la financiación.
Por lo tanto, analiza el peso de las deudas respecto al pasivo total:
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