Portada » Español » La novela después de la Guerra Civil
Muchos de ellos publican novelas que exaltan los ideales del régimen, pero otros reflejan los problemas e incertidumbres del ser humano, a través de la vida de un personaje. Personaje antiheroico enfrentado a una sociedad indiferente u hostil. Temas amargura de la vida cotidiana, soledad, frustración, inadaptación y muerte.
2 grandes tendencias:
a) la novela existencial: El protagonista es individual con destino incierto Dentro de este grupo están las novelas Nada (Carmen Laforet) y La sombra del ciprés es alargada (Miguel Delibes).
Testimonio crítico de la sociedad española de la época. Rasgos carácterísticos: la temática social, el Realismo, la historia se redujo el argumento y se limitaron el tiempo y espacio. El diálogo ocupa un lugar preeminente directo, vivo y «desnudo». Verosímil.
Corrientes:
Realismo objetivo: narrar los hechos con afán testimonial. Destaca Sánchez Ferlosio con El Jarama.
Realismo crítico: visión crítica y comprometida de la realidad, concienciar al lector.
Tendencias estéticas renovadoras.Influencias de la literatura europea y hispanoamericanos. Son tres las novelas que marcan este cambio de rumbo:
Novelas llamadas abiertas, obras el lector asume un papel activo, haciendo su propia interpretación. Rasgos: el multiperspectivismo, las alteraciones cronológicas, monólogo interior y del estilo indirecto libre.
La familia de Pascual Duarte inicia la tendencia tremendista en literatura, que consiste en ahondar en los aspectos más duros y desagradables de la realidad. Técnica del manuscrito encontrado con las carácterísticas de la novela picaresca.
Retrata el Madrid amedrentado y corrupto de posguerra. Mediante el objetivismo y el contrapunto, Cela realiza una denuncia que supondrá el inicio de la novela social. (protagonista colectivo) (técnica del contrapunto). La acción transcurre en poco más de dos días y los espacios son los centros típicos de las reuniones sociales. Otras destacables:
Primera novela es La sombra del ciprés es alargada, Realismo existencial de los 40. En los años 50 escribe El camino y Las ratas, representante del Realismo crítico.
Cinco horas con Mario de estilo vanguardista. Crítica con la clase burguesa, introduce el monólogo interior, ruptura de la linealidad narrativa, constante reiteración de sucesos que revelan las obsesiones de la protagonista, ironía…
Nada (1945) es su primera novela. Relata la historia de una joven que va a estudiar a Barcelona y, para ello, debe alojarse en casa de su abuela. Allí descubre un mundo mezquino y sórdido. Ese medio familiar asfixiante, revela una realidad social exterior también degradada y miserable, tanto en lo material como en lo moral. Novela de aprendizaje.
Tiempo de silencio representante de la novela experimental de los años 60. Pedro representa el fracaso de todo un país y la resignación a vivir en un tiempo de silencio» de pobreza, subdesarrollo, hipocresía. Ruptura radical y definitiva con el Realismo convencional: monólogo interior, constante cambio de narrador digresiones y léxico inusual.
Durante el Siglo XX la narrativa hispanoamericana, que hasta entonces había ocupado un tugar, adquiere un perfil propio y comienza a destacar etapas:
Las primeras novelas Realismo. Rasgos principales:
la importancia de la naturaleza, que se resiste a ser dominada por la civilización – la voluntad de reflejar los conflictos políticos y sociales. Los factores que explican este despegue de la literatura hispanoamericana; la llegada de escritores españoles que huyen del franquismo, la creación de escuelas de escritores y la llegada de las tendencias de vanguardia que predominaban en Europa.
Jorge Luis BORGES. No escribíó ninguna novela, pero destacó en el relato breve. Sus relatos suelen ser juegos imaginativos.
Renovación de la novelística hispanoamericana con un fenómeno que la critica ha denominado como el boom. Un corto espacio de tiempo de una sucesión de novelas y de novelistas destaca Cien años de soledad de Gabriel García Márquez.
Temas: la crisis existencial del individuo, el dictador, los mitos. Aumenta la ambientación urbana. Técnico del Realismo mágico. Técnicas narrativas de la novela experimental, alteraciones cronológicas, juegos en la perspectiva narrativa, monólogo interior, narrativa intelectual que reflexióna.
escritor de cuentos, Rayuela, collage. Rompe la secuencia lógica, capítulos intercambiables y entrecruzamiento, Las armas secretas.
Tendencias: la novela intimista, la novela policíaca o la novela de contenido político y social, por ejemplo. Entre los narradores de esta etapa destacaremos a Mario Benedetti, Leonardo Padura, Vargas Llosa, García Márquez, Ricardo Piglia, Isabel Allende, Laura Esquivel, Ángeles Mastretta, Roberto Bolaño… Y un largo etcétera.
Desde la década de los setenta se produce una sensación de fracaso de los ideales del Siglo XX y un fuerte cuestionamiento de la tradición estética y cultural. Comienza a hablarse de la posmodernidad, nueva forma de pensar y de vivir cuyos rasgos son: rechazo de los grandes relatos, renuncia a ser original prefiriendo la utilización de técnicas como el pastiche y la intertextualidad. La muerte de Franco y la posterior transición a la democracia trajeron consigo importantes cambios que afectaron a la literatura. Con la desaparición de la censura, se empiezan a publicar en nuestro país las obras de autores europeos y las de los españoles exiliados. Como el nivel de instrucción de los españoles fue creciendo, aumentó a la vez su interés por los productos culturales. Los políticos de los primeros tiempos de la democracia comprendieron la importancia de fomentar la creación literaria a través de diferentes premios y subvenciones. En la novela, se produce una reacción contra la experimentación de la década de los años sesenta. De manera que se pueda disfrutar de la lectura sin realizar un esfuerzo intelectual desmesurado. La novela de Eduardo Mendoza, Antonio Muñoz Molina, Manuel Vázquez Montalbán y muchos otros son buenos ejemplos de este deseo de equilibrar la calidad con la capacidad de entretener. También hay que tener en cuenta el interés de las editoriales por vender novelas a gran escala.
Se produce un acusado descenso de los experimentos técnicos. Los autores pretendían que el público volviese a disfrutar de una lectura entretenida sin renunciar por ello a la calidad literaria de las obras, en las que seguía habiendo técnicas narrativas innovadoras. La novela de Eduardo Mendoza La verdad sobre el caso Savolta (1975) es un claro ejemplo de esta evolución, pues combina una primera parte llena de innovaciones narrativas con una segunda parte mucho más sencilla. En este periodo se produce cierto acercamiento a la subliteratura. Por otra parte, los novelistas que publican sus obras a partir de 1975 tienen edades muy diferentes y sus trayectorias son variadísimas: algunos llevan escribiendo desde los años cuarenta, como Delibes o Cela. Otros comenzaron a escribir en la época de la novela social como Carmen Martín Gaite o Ana María Matute. Otros regresaron del exilio. Y a estos se añaden los más jóvenes, nacidos a partir de los cuarenta como Mendoza, Pérez-Reverté y muchos otros. La importancia del mercado, la novela se ha convertido en un objeto de consumo, cuyo valor se juzga a partir del número de ejemplares vendidos.
Relato policíaco en los bajos fondos urbanos. Sus argumentos están llenos de violencia y es frecuente que los críMenes se sitúen en un trasfondo de corrupción política y de sordidez moral. Los investigadores son personajes fracasados, desengañados y cínicos que, a pesar de todo, detestan que se haga daño a los débiles y luchan por encontrar la verdad.
Eduardo Mendoza en La verdad sobre el caso Savolta utiliza los moldes de la novela negra.
El misterio de la cripta embrujada, El laberinto de las aceitunas, La aventura del tocador de señoras y El enredo de la bolsa y la vida.
Antonio Muñoz Molina; sus novelas son de estructura compleja, reinventan el género negro y denotan un profundo conocimiento de los modelos narrativos tradicionales. Dota de gran importancia a la trama y a los personajes. En sus historias, Muñoz Molina demuestra un gran interés y conocimiento de la historia, que le sirve para indagar en el pasado colectivo a partir de las vivencias de sus personajes. Obras:
O metaliteratura, es decir, la literatura que elige como tema la propia literatura. El narrador nos hace partícipes de su construcción. En ocasiones, la novela está protagonizada por escritores reales o ficticios, como ocurre en La noche que llegué al café Gijón (1977), de Francisco Umbral.
Importancia de la subjetividad del autor y el cuidado del estilo, que se acerca al lenguaje de la poesía:
Probablemente, el auge de la novela histórica se relaciona con el éxito de El nombre de la rosa de Umberto Eco, y con la libertad de expresión que conllevó el fin de la censura. Las épocas que se recrean son muy variadas: la Edad Media, los Siglos de Oro por ejemplo en El capitán Alatriste de Reverté y el final del XIX y comienzo del XX quedan reflejados en La ciudad de los prodigios de Eduardo Mendoza.
También son frecuentes las novelas históricas ambientadas en la Guerra Civil como Soldados de Salamina, de Javier Cercas.
Novelas de tema amoroso con un importante contenido erótico como Las edades de Lulú de Almudena Grandes.
El cuento literario está viviendo en las últimas décadas una llamativa recuperación. Es frecuente que los narradores de este periodo, antes de publicar una novela, se den a conocer primero con un libro de cuentos, pero también es habitual que los autores que ya tienen prestigio como novelistas publiquen colecciones de relatos breves como Antonio Muñoz Molina con Nada del otro mundo.
El microrrelato es un género literario independiente de la novela y del cuento que se desarrolla en España durante los siglos XX y XXI por influencia de los escritores hispanoamericanos. Son narraciones muy breves en los que la extrema condensación hace que sea tan importante el contenido que está presente como el que se sugiere.
4. AUTORAS: Almudena Grandes en sus novelas aborda fundamentalmente tres temas: el amor, la soledad y la búsqueda de la propia personalidad. En Te llamaré Viernes o Malena es un nombre de tango, aporta la mirada emocional y reivindicativa de la realidad femenina. Trabaja un análisis crítico y comprometido de la realidad mediante diversos temas: la adolescencia en Estaciones de paso;
Las relaciones personales en Los aires difíciles o la memoria histórica a través de su serie de novelas Episodios de una guerra interminable.
Rosa Montero, novelista y periodista, combina lo testimonial con la novela de tesis. Su obra aúna la denuncia social y el análisis emocional de los personajes. Trabaja subgéneros muy diversos: la novela de corte existencial, en La hija del caníbal;
La novela sentimental, en La ridícula idea de no volver a verte;
O la novela de ciencia ficción, en Lágrimas en la lluvia.
ESTRUCTURA: INFINITIVO, GERUNDIO, PARTICIPIO
SIGNIFICADO: MODAL
OBLIGACIÓN: tener que / hay que / deber / haber de / (Infinitivo)
PROBABILIDAD/SUPOSICIÓN: deber de / venir a / (Infinitivo)
CAPACIDAD: poder (Infinitivo)
SIGNIFICADO: ASPECTUAL
INGRESIVAS: (acción a punto de comenzar o con idea de futuro) ir a / estar a punto de / estar por (Infinitivo)
INCOATIVA: (acción en el momento de comenzar) echar(se) a / ponerse a / empezar a / romper a (Infinitivo)
REITERATIVA: (acción que se repite) volver a (Infinitivo) / tener a (participio)
TERMINATIVA: dejar de / acabar de / terminar de / llegar a (Infinitivo)
PERFECTIVAS: (resultado final de la acción) traer / dejar / quedar / llevar / tener / llevar (participio)
FRECUENTATIVAS: (acción habitual) soler (Infinitivo)
DURATIVA: estar / seguir / andar / llevar / ir / venir (gerundio)
PRONOMBRE RELATIVO:
sustitución por la cual, el cual…
Conjunción SUBORDINANTE
finalidad, concesiva, temporal, causal, comparativa, adversativa, distributiva
SE REFLEXIVO (CD o CI): El pronombre se en este caso significa que el sujeto realiza una acción que recae en sí mismo o en parte de sí mismo.
NO REFLEIVO: le/ les,
SE RECIPROCO (CD, CI, C Rég): El pronombre personal se funciona con un sujeto que está en plural (dos o más personas) que hacen una acción y a la vez la reciben.
SE DATIVO ÉTICO (DE): Este se es expletivo, es decir, puede eliminarse sin que la oración pierda sentido.
PRONOMINALES: El verbo se conjuga con un pronombre personal átono, forma parte del verbo. Siempre lleva se.
PASIVA REFLEJA: solo en tercera persona del singular y del plural. El sujeto suele situarse al final de la oración.
IMPERSONAL: carecen de suj, tercera persona del singular, siempre lleva se, no tiene suj o.M.
sustituyen al nombre o sn, nunca lo acompaña.
Tónicos- yo, nosotros/as, tu, vosotros/as, usted, el, ella/o/os, si
Átonos- me, nos, te, os, lo/s, la/s, le/s, se