LA NOVELA es el subgénero narrativo más complejo y completo, muy versátil y con total libertad creativa. Aparecen todo tipo de personajes, acciones o técnicas narrativas. Las primeras novelas modernas empiezan con Lazarillo de Tormes y Don Quijote de la Mancha. Es el género narrativo más cultivado durante el Siglo XX, el más completo y el que mejor sirve de vehículo para la expresión de ideas de los autores de este siglo.
ELEMENTOS DE LA NOVELA
LA ACCIÓN
Por acción entendemos la historia que se va desarrollando ante nuestros ojos a medida que leemos la novela. Se suelen suceder varias acciones a la vez, las primarias y las secundarias, que forman el argumento de la novela. El orden de la acción, desde un punto de vista clásico, suele constar de:
Planteamiento: es la presentación de los personajes y el establecimiento de la acción que se va a desarrollar. Además, se expone el marco temporal y espacial en que se situará la historia.
Nudo o desarrollo: la situación expuesta en el planteamiento comienza a evolucionar, es decir, se desarrolla el conflicto en el que se verán inmersos los personajes. En la novela suele haber un conflicto principal y otros secundarios.
Desenlace: es la resolución del conflicto y el final de los sucesos que se han planteado.
ORDEN DE LA NARRACIÓN
La acción, aunque cronológicamente siga un orden desde el punto de vista lógico, puede tener una organización diferente. Por eso encontramos:
Orden lineal o cronológico: los acontecimientos se ordenan cronológicamente y como suceden en la realidad, siguiendo un orden lineal. Es típico en la novela del Siglo XIX.
Orden no lineal: el autor de la novela altera el orden de organización de los hechos y esto también supone que el lector deba hacer un esfuerzo por hilar los hechos. Esto se traduce en que el autor puede manejar a su antojo el tiempo de la novela:
In medias res: la narración comienza con los hechos en la mitad, justo en el nudo. Luego vuelve al principio de la historia y después al desenlace.
In extrema res: la narración comienza con el final de la historia, luego retoma la situación inicial y el cuerpo para llegar al desenlace.
Analepsis: el narrador da un salto hacia atrás en la historia e introduce hechos que han sucedido en el pasado. También se llama flash-back.
Prolepsis: el narrador da un salto hacia delante en el texto e introduce sucesos anticipándolos, que todavía no han ocurrido. También se llaman flash-forward.
EL NARRADOR
Hay que distinguir claramente entre el autor y el narrador. No siempre coinciden. El autor es la persona real que ha escrito la novela y el narrador es la voz que cuenta la historia y es tan imaginario como cualquiera de los personajes. Distinguimos varios tipos de narradores:
NARRADOR INTERNO: es el que participa en la historia que se narra, bien vivíéndola como protagonista o como personaje secundario. La historia se cuenta en primera persona. Vemos dos tipos:
Narrador protagonista: suele ser el personaje protagonista que comenta y valora lo que narra.
Narrador testigo: suele ser un personaje que participa en la historia pero no es el protagonista.
NARRADOR EXTERNO: no participa en la historia que cuenta, sino que el relato está contado desde alguien de fuera, en tercera persona. Vemos dos tipos:
Narrador omnisciente: conoce todo sobre los personajes (hasta sus pensamientos más íntimos) que comenta y valora todo lo que narra.
Narrador objetivo: el narrador es un simple espectador y narra todo lo que se ve desde fuera, describiendo el comportamiento de los personajes pero no sus mentes (es un narrador al estilo de una cámara de vídeo).
Son cada vez más frecuentes las novelas en las que intervienen distintas visiones de los personajes involucrados en la acción, en lo que puede denominarse narración colectiva. Un mismo hecho es narrado por varios personajes distintos, varios tipos de narradores que aportan puntos de vista distintos y así el lector obtiene una visión más completa y diversa de la historia.
También hay diferentes niveles narrativos como:
Narración enmarcada
Un personaje de una novela cuenta otra historia a su vez.
Narrador editor: el narrador finge que no ha creado la historia, sino que la ha encontrado y que se limita sólo a editarla o traducirla, (como en El Quijote).
LOS PERSONAJES
Se clasifican según su presencia (protagonistas y secundarios), según su caracterización (redondos o planos) y según sus acciones en la obra (aliados o adversarios).
-El personaje protagonista es sobre el que recae la acción principal, bien definido tanto física como psicológicamente. Puede haber más de uno o incluso un protagonista colectivo (un pueblo entero). Los personajes secundarios acompañan a los protagonistas, dialogan con ellos y son descritos con pocos rasgos.
– Los personajes redondos son aquellos descritos con gran cantidad de matices físicos o psicológicos que pueden variar a lo largo de la novela. Los planos son retratados con pocos rasgos y no cambian psicológicamente, como los de los cuentos.
– Los personajes que ayudan o intervienen en las acciones del protagonista para conseguir un objetivo son aliados. Los que dificultan a los protagonistas la consecución de estos objetivos son los adversarios.
EL ESPACIO
Es el espacio físico en el que se desarrolla la acción y se encuentran los personajes. Lo conocemos por las descripciones intercaladas del narrador o de los personajes. Es fundamental para crear ambientes, contextualizar a los personajes, dar credibilidad a la historia, etcétera. Puede haber espacios abiertos, cerrados, rurales, urbanos, reales o ficticios, fantásticos, misteriosos, etcétera.
EL TIEMPO NARRATIVO
Puede entenderse en un doble sentido:
La ÉPOCA en la que transcurre la historia (tiempo externo): la actualidad, el futuro, la Edad Media, la Segunda Guerra Mundial, etcétera.
La DURACIÓN de la acción (tiempo interno): un día, un mes, veinte años, etcétera.