1. LO APOLÍNEO, LO DIONISIACO Y EL PROBLEMA DE SÓCRATES:

 Punto de partida de la filosofía de Nietzsche, reflejado en El nacimiento de la tragedia (su 1ª obra). En ella, analiza la tragedia griega, en que la vida aparece como impulso vital y raíz de todo, y ante la cual solo cabe una actitud de renuncia o de superación. Esta tragedia es el resultado de la fusión de dos fuerzas

 LO APOLÍNEO;Representada por Apolo, dios del sol, de la luz, representado por los personajes y que simboliza la razón.

 LO DIONISIACO;-Representado por Dioniso, dios del vino, que representado por el coro, simboliza la pasión, el instinto.

 Por ello, la vida no es más que la tensión inagotable entre esas dos fuerzas contrapuestas.  Nietzsche afirma que en la tragedia predominaba lo Dionisiaco, pero dicho elemento desapareció desde el momento en que Eurípides quitó importancia al coro. Es sin embargo Sócrates el gran corruptor, ya que realiza una inversión de valores, dando primacía a lo racional sobre lo pasional, rompiendo así el equilibrio entre ambas fuerzas vitales. Por ello lo llamará “El asesino de Occidente”, cuya labor será luego continuada por Platón, Aristóteles y el cristianismo.  Nietzsche, por el contrario plantea que es la pasión y no la razón lo que define al hombre, su esencia.

LA ALTERNATIVA POSITIVA O CONSTRUCTIVA:

 Nietzsche propone en esta segunda etapa una alternativa positiva a lo anteriormente destruido, basada en;

LA TRANSMUTACIÓN DE LOS VALORES:

Nietzsche no propone vivir sin valores, sino invertir los actuales, es decir, invertir la moral occidental que es una negación de la vida, y establecer unos valores nuevos, que sean un sí a la vida. Cambiar los valores fundados en Dios por otros que permitan que el hombre se desarrolle.

HOMBRE Y SUPERHOMBRE:

 Para Nietzsche el hombre no es un fin sino un puente tendido entre el animal y el superhombre. El hombre actual se resiste a evolucionar, y esto tiene el riesgo de volver a la animalidad primitiva o evolucionar hacia el superhombre.

 El superhombre es el hombre del futuro, fruto de tres transformaciones metamorfosis; el camello (hombre actual, sumiso, mediocre, se limita a cargar con el peso que les da el cristianismo) el león (hombre rebelde, valiente, dueño de si mismo, que se rebela contra todo, pero que solo es capaz de destruir (valores) y no de crear) y el niño (simboliza al superhombre, inocente y sin prejuicios ama esta vida y hace de ella un juego, está más allá del bien y del mal, puede crear valores y vive fiel a la tierra).

 El superhombre es aquel hombre que;
ama la vida (tal y como es), tiene voluntad de poder, es fiel a la tierra, es dueño de su vida, es un espíritu libre, está más allá del bien y del mal (él decide lo que es bueno y malo), contrario al igualitarismo (no teme las diferencias), creador de sus propios valores (no sigue los ya creados), no sigue modas, le gusta el riesgo, y es duro consigo mismo y con los demás.
Aunque el superhombre no ha llegado todavía puede saberse como será analizando las grandes figuras de la historia. 

– EL ETERNO RETORNO:

 Dijo Nietzsche del eterno retorno que era su pensamiento más profundo. Es una metáfora, en la que afirma que debemos amar tanto esta vida como para estar dispuestos a repetirla eternamente, con sus alegrías y tristezas. Según esta doctrina la vida personal de cada uno ya se ha vivido y se repetirá infinitamente, porque si el tiempo es eterno (no tiene principio ni fin) todo se ha vivido y a la vez todo está por vivir. Es por ello la vida una noria, gira sobre si misma pero no avanza, solo se repite eternamente (Heráclito).

1.Salida minoría de edad.
El primer requisito de la Ilustración, afirma Kant, es la salida del hombre de su
autoculpable minoría de edad, es decir, de su incapacidad para servirse de su propio entendimiento sin la guía
de otro.
2. Causas de la minoría de edad:
 Uno mismo . Según Kant, la primera causa explicativa de la minoría de edad es realmente uno
mismo (autoculpable). Y es que la causa de tal minoría no es la carencia de entendimiento sino la
falta de valor y decisión para servirse uno mismo de su propio entendimiento, dejando que sean otros
(tutores) los que rijan los destinos del propio pensar. De ahí que el lema de la Ilustración, afirma Kant,
sea Sapere aude, es decir, atrévete a pensar por ti mismo
3. P ereza y Cobardía La segunda de las causas de la minoría de edad son la pereza y la cobardía. Y es que
resulta más cómodo, señala Kant, que, en vez de asumir cada uno la responsabilidad de poner en marcha la
propia capacidad racional del saber y del actuar, dejemos que los demás piensen por uno mismo. Es muy
cómodo ser toda la vida un menor de edad. Y somos menores de edad cuando, por ejemplo, dejamos que un
libro piense por nosotros mismos, o que un tutor reemplace nuestra conciencia moral, o que nos sirvamos de
un grupo para ocultar nuestras frustraciones y lograr así refugio y amparo a nuestras irresponsabilidades.
3. Peligros de permanecer en minoría de edad. Según Kant, son muchos los peligros que nos acechan si
decidimos permanecer en la minoría de edad y bajo la tutela y la guía de otros.

4.Libertad: uso público de la razón. El segundo requisito de la Ilustración es, según Kant, la libertad de hacer
siempre y en todo lugar, un uso público de la razón.
Lo que sucede, sigue afirmando Kant, es que por todas partes surgen limitaciones a tal uso ilimitado de la
libertad. Así algunas voces afirman: razonad todo lo que queráis, pero obedeced. Pues bien, se pregunta Kant,
¿cómo compaginar la necesidad de la libertad con la existencia de la obligación?

1. EL MATERIALISMO HISTÓRICO: El materialismo histórico es la explicación marxista de la historia, que considera a la economía la base de la sociedad, y por lo tanto uno de los factores decisivos en la explicación de los hechos históricos. Entiende pues Marx la historia como “la sucesión de los diferentes métodos de producción”. Por ello, son las condiciones económicas y de trabajo las que generan las ideas, los valores, las religiones… y no al contrario. Por ello Marx afirma que la sociedad está compuesto de una infraestructura y una superestructura.

 INFRAESTRUCTURA (ESTRUCTURA ECONÓMICA):

Lo económico de una sociedad, base sobre la que se levanta todo lo demás. Está integrada a su vez por; las fuerzas productivas (lo que interviene en la producción; fuerza del trabajador, maquinaria y materias), las relaciones de producción (relaciones entre dueños de los medios de producción y trabajadores, no son elegidas y pueden ser de explotador-explotado (sociedad capitalista) o de colaboración recíproca (sociedad comunista)) y el modo de producción (relación entre las dos anteriores, a lo largo de la historia se han dado los modos de la sociedad asiática, antigua, feudal y burguesa).

SUPERESTRUCTURA (ESTRUCTURA IDEOLÓGICA):Elementos dependientes de la infraestructura. Integrada por tres grandes ámbitos, jurídico (leyes y tribunales), político (personas e instituciones que dirigen el gobierno) e ideológico (ideas y creencias). La ideología es impuesta por el poder dominante, y para cambiarla es necesario cambiar la base sobre la que se sustenta, es decir, la infraestructura.

 Afirma Marx que entre infraestructura y superestructura se da una relación dialéctica. La infraestructura determina la superestructura, pero esta última no es neutra, sino que retroactúa sobre la anterior intentando perpetuarla.

Para Marx, la historia es una lucha de clases, un antagonismo entre fuerzas productivas y relaciones de producción, que llegado el momento se radicaliza, sobreviniendo así una revolución social que altera la infraestructura y consecuentemente la superestructura.

El concepto formación social, hace referencia a una totalidad social (sociedad), integrada por una superestructura y una infraestructura.

La idea del materialismo histórico es que la historia de la humanidad se puede explicar mediante el análisis de los distintos modos de producción, que han sido; comunismo primitivo (no existe propiedad privada, los medios de producción y los productos pertenecen a la sociedad), esclavista (antagonismo entre hombres libres y esclavos, propio de Roma y Grecia), feudal (antagonismo entre siervo y señor, propio de la edad media), capitalista (basado en la propiedad privada de los medios de producción, el trabajo es una mercancía más) y comunista (basado en la propiedad colectiva de los medios de producción).

Marx afirma que la sociedad capitalista ha engendrado a sus propios sepultureros, proletarios que no tienen que perder más que las cadenas, por lo que el sistema capitalista será destruido con la revolución del proletariado.

¿Cómo será el paso de la sociedad capitalista a la comunista? Según Marx, la sociedad comunista es el fin al que se dirige la historia, y dicho fin se conseguirá mediante la acción revolucionaria. Dicha acción consta de tres etapas; la revolución del proletariado (una revolución radical, que tendrá lugar cuando el proletariado tome conciencia de clase), la dictadura del proletariado (una transición que eliminará los último coletazos del capitalismo, reeducará al pueblo y buscará conseguir una justa distribución de la riqueza) y la sociedad comunista (un paraíso en la tierra, una sociedad sin clases, justa e igualitaria en la que participe “cada uno según sus necesidades” y aporte “cada uno según sus posiblidades”).