Portada » Español » La Literatura del Siglo XVI: Prosa, Teatro y la Obra de Cervantes
El desarrollo de la prosa en castellano continúa con vigor durante el siglo XVI. En este periodo se suelen distinguir de manera general entre una prosa de carácter didáctico y una prosa de tipo narrativo.
El modelo formal más utilizado en los textos en prosa del siglo XVI es el del diálogo. En los diálogos, dos o más interlocutores abordan cualquier asunto presentando sobre él diversos puntos de vista. Ello permite un tono coloquial y una lectura agradable como vehículo para transmitir determinadas enseñanzas.
Entre los numerosos diálogos del siglo XVI cabe destacar los de los erasmistas Juan y Alfonso de Valdés. Juan de Valdés escribió el famoso Diálogo de la lengua, donde expone el ideal renacentista de la lengua sencilla, pero cuidada. Su hermano, Alfonso de Valdés, escribió Diálogo de las cosas ocurridas en Roma, una apasionada defensa de la política imperial de Carlos I y un violento ataque contra las costumbres del papado, y Diálogo de Mercurio y Carón, donde expone el ideal erasmista de un Estado universal fuerte y pacífico y sus deseos de reformas religiosas.
Muy numerosos también los libros en prosa de escritores ascéticos y místicos como, los ya mencionados de fray Luis de León, Juan de la Cruz, Teresa de Jesús o fray Luis de Granada autor de la Introducción del símbolo de la fe (1582).
La prosa del XVI se caracteriza por su enorme variedad tanto en géneros como en temas. Los relatos más extensos se denominan de modo muy variado: libro, historia, tratado, vida, etcétera.
Merecen finalmente destacarse Francisco Delicado, autor de La lozana andaluza (1528), obra dialogada emparentada con La Celestina, en la que se manifiesta una gozosa actitud vital y en la que es patente un mordaz anticlericalismo. Juan de Timoneda es autor de la primera colección española de novelas cortas imitadoras de las italianas, El Patrañuelo (1567).