Portada » Historia » La Edad Media: Transformación, Reforma y Expansión
Una parte de Europa se transforma: se desarrollan las artes y las ciencias, se consolidan los estados nacionales, el panorama económico es dominado por los burgueses. Con las ganancias del comercio, invierten en la industria, crece y se produce el surgimiento del capitalismo. Finalmente, se expande hacia los continentes, estableciendo un dominio colonial, extrayendo sus riquezas, repartiendo sus tierras y hombres como si fueran mercancías, imponiendo su religión como la única válida, despreciando como inferiores sus culturas distintas y, siempre que fue posible, destruyéndolas.
La mayor libertad espiritual favorece la difusión de pensamientos diferentes dentro de la Iglesia. Esta los llama herejías y las persigue. En el siglo XVI, estas herejías tienen muchos seguidores y consiguen apoyo de príncipes, nobles o reyes. En este apoyo, a veces, hay intereses económicos: la Iglesia, por donaciones a través del siglo, ha conseguido numerosas tierras que, con la Reforma, pasan a manos de los príncipes que se convierten. La Iglesia Católica aclara a sus fieles en qué debe creer, estableciendo sus principios en la Reforma Católica o Contrareforma. La postura intolerante de los reyes en cuanto a la religión originó guerras durante el siglo XVI.
En el siglo XIV surgió un movimiento religioso impulsado por los humanistas, que proponía la necesidad de una profunda renovación. Este movimiento, un retorno a las fuentes del cristianismo a través de los textos religiosos originales. Con la aparición de la imprenta, la Biblia fue adquiriendo gran difusión y se comenzó a restar importancia a los ritos, las ceremonias y el sometimiento a la jerarquía. Diversos factores políticos, sociales y económicos, sumados a esta renovación religiosa, prepararon el terreno a la ruptura de la unidad.
Como ya te lo mencionaron primeramente, sí, la búsqueda de nuevas rutas de comercio por los europeos para el oriente. A causa del cierre de los estrechos del Bósforo y los Dardanelos por la toma de Constantinopla por los turcos en 1453, fue una de las causas de la expansión europea. Pero hay que mencionar que, primeramente, los europeos no buscaron la conquista de nuevos territorios en esta 1° etapa de expansión. Fue la búsqueda de nuevas rutas la que trajo como consecuencia el descubrimiento de nuevos territorios y su posterior ocupación y colonización.
Esta primera fase la podemos englobar durante los siglos XV-XVI.
Principales potencias colonizadoras: Portugal, España.
La segunda fase ya no se busca el descubrimiento de nuevas rutas, es acá donde los europeos buscan la obtención de nuevos territorios para aumentar su poder y obtener recursos naturales.
Hay que mencionar que a partir del siglo XVIII, con el surgimiento de la Revolución Industrial, las potencias europeas buscan principalmente nuevos territorios para poder tener reservas grandes de materias primas para alimentar su creciente industria y la búsqueda de nuevos mercados para depositar su producción.
Durante el periodo del siglo XVII al siglo XX, que dura esta fase hasta que empieza la descolonización, los europeos se enfrentaron en grandes guerras para tener la supremacía sobre los demás (claro ejemplo, las dos guerras mundiales). Una de las causas principales de estos conflictos es precisamente la pelea por los territorios de Ultramar.
Un acuerdo entre Portugal y España que se establecían un reparto de las zonas de conquista y anexión del Nuevo Mundo mediante una línea divisoria del Océano Atlántico y de los territorios adyacentes.