Portada » Lengua y literatura » La Condición Humana en la Literatura Española: Un Estudio de Obras Maestras
La trama de la novela se desarrolla en Barcelona durante el inicio de la Guerra Civil, momento en el que las condiciones de vida se transformaron drásticamente. Conseguir alimentos se volvió extremadamente complicado, la educación se interrumpió, muchos perdieron sus empleos y las fábricas se adaptaron a las necesidades bélicas. En Barcelona, ocurrieron los eventos de mayo de 1937, un gran conflicto armado que devastó las calles de la ciudad.
Parte 1: La inocente Sol observa con asombro la nueva Barcelona, mientras su percepción idealizada de la ciudad se desvanece ante la realidad previa al alzamiento nacional. Su hogar cambia enormemente tras el asesinato de su padre. Desde ese trauma, Sol irá cambiando psicológicamente, al igual que su entorno, provocando cambios internos en la sociedad. Para sobrevivir al hambre, la familia se ve obligada a vender objetos valiosos mientras los soldados ocupan su casa sin que puedan evitarlo. Entre los personajes, también está Cloti, una refugiada madrileña que se instala con su madre y otros allegados en casa de los Rodas al estallar la guerra. Cloti se identifica con las clases humildes, pero son más pobres que los Borreros. Cloti tuvo que prostituirse para sobrevivir desde niña. A pesar de esto, Cloti se acerca a Sol y le consigue un empleo gracias a Boloix. El hambre conduce a la decadencia de Barcelona y de su población. Eduardo, al ver la tragedia, se une a Chano y Daniel, y él y Sol exploran espacios urbanos como la buhardilla de Daniel y las barracas-refugio en las afueras, donde Sol ve las consecuencias de la guerra: la miseria, la enfermedad y la muerte.
Parte 2: Barcelona está en guerra. El único elemento reconfortante para Sol es el brasero, que recuerda el pasado antes del conflicto. Nunca se pierde de vista el entorno urbano exterior, presentado con tanta fuerza que Barcelona se convierte en protagonista. La destrucción de la buhardilla en los alrededores de la Vía Layetana por culpa de las bombas causa en Sol un trauma que le lleva a adoptar una actitud de rebeldía frente a la injusticia social y la pobreza. Los bombardeos y el desescombro revelan recuerdos de la antigua Barcelona, como el cuadro que colgaba de la pared. Esto hace que Sol rememore su infancia en una ciudad ideal que ya no existe.
Parte 3: Sol es liberada de la cárcel y sale en busca de su infancia en las calles. Se siente conectada con esos lugares, experimentando tanto miedo como esperanza debido a las expectativas de ambos bandos en conflicto. Mientras recorre una Barcelona devastada por las bombas y los franquistas, contempla una ciudad completamente diferente que nunca volverá a ser la misma.
Conclusión: El paisaje urbano adquiere un papel protagonista en varios momentos. Se observa cómo el caos de Barcelona simboliza la evolución y transformación de los personajes, que están ligados a la autora.
En «Luciérnagas» de Ana María Matute, la Guerra Civil española se refleja a través de las vivencias de los personajes, especialmente Sol y Eduardo, ambos en medio de la devastación de Barcelona. La guerra impacta tanto físicamente, con la ciudad en ruinas y milicianos en las calles, como en los ámbitos moral, ideológico y económico.
En primer lugar, se percibe cómo los personajes son arrastrados por las exigencias y las supuestas ideologías de los bandos en conflicto, sin detenerse a reflexionar sobre las razones del oponente. La imposición de estas ideologías por las distintas facciones intensifica el conflicto moral entre los personajes.
En segundo lugar, la guerra deja a los protagonistas sintiéndose huérfanos en múltiples sentidos. La pérdida de su padre, la falta de una figura divina en la que confiar y el colapso de los ideales y convenciones previos al conflicto los sumergen en una crisis existencial. La pérdida de su estabilidad económica empeora su situación, dejándolos desamparados en un mundo que se destruye.
El comportamiento de los personajes está influenciado por estos aspectos interrelacionados. La guerra actúa como un catalizador que moldea sus acciones y su carácter de manera progresiva a lo largo de la trama.
Es importante destacar el distanciamiento con el que la autora aborda el conflicto. Matute no toma partido por ninguno de los bandos y evita analizar el contexto histórico o las causas de la guerra. Esta neutralidad permite que la novela se enfoque en las experiencias individuales de los personajes y en las repercusiones personales y sociales del conflicto, en lugar de convertirse en un tratado político o histórico.
Soledad: Nacida en Barcelona, querida y sin carencias materiales, pero con padres, Luis y Elena, y un hermano mayor, Eduardo, que por trabajo y vida social, le dejaban al cuidado de criadas, cocinera y niñera. Los Roda tenían una situación económica próspera; Luis era propietario de una fundición, lo que los situaba en la clase alta industrial. Sol se desarrolló en un entorno tradicional y privilegiado.
Cristián: No tenía el mismo tipo de familia. Proveniente de la parte desfavorecida de Barcelona, enfrentaba dificultades económicas y precariedad. Su entorno familiar carecía de estabilidad. Su madre abandonó a su padre porque este no podía proporcionarles lo necesario. Su padre, profesor, mantiene una estrecha relación con Pablo, quien no tiene un vínculo sólido con sus hermanos. Cristián siente que le debe algo a Pablo, ya que parece estar viviendo su vida. Daniel y Cristián están muy unidos, compartiendo una postura opuesta a la de su hermano mayor.
Cloti: Refugiada madrileña que se instala con su madre en casa de los Rodas al estallar la guerra. Perteneciente a las clases humildes, se encuentra en una posición inferior a la de los Borreros. Su familia se compone de su madre y su hermana menor. La madre realiza labores domésticas y tareas mal remuneradas para mantenerlas. La relación entre Cloti y su madre es compleja, caracterizada por el amor y las tensiones de la difícil situación económica.
Diferencias entre las familias: Se observan en la estructura y dinámica familiar. Los Roda eran tradicionales, con una sólida base. Los Borrero estaban desestructurados tras la partida de su madre. La familia de Cloti se componía de su madre y su hermana. En el plano económico, los Roda tenían una posición privilegiada y Sol nunca careció de nada. Los Borrero y la familia de Cloti enfrentaban una situación económica precaria, con escasez de recursos.
Similitudes: La pérdida de seres queridos: los Roda perdieron a su padre, asesinado, lo que cambió la dinámica familiar por el trauma. Los Borrero sufrieron la pérdida de su madre. El sentimiento de orfandad fue compartido por ambas familias, junto con la necesidad de enfrentar una transformación personal impuesta por la guerra. Ambas familias experimentaron un cambio en su posición dentro de la nueva sociedad: los Roda ocuparon una posición subalterna en comparación con la familia de Cloti y los Borrero, quienes se adaptaron mejor a las nuevas circunstancias.
La presencia de tres familias tan distintas invita a reflexionar sobre la sociedad de la época, mostrando familias estructuradas de distinto modo en la misma ciudad.
«La Vida es Sueño» se analiza desde diferentes perspectivas:
Plano político: La obra plantea la cuestión del poder. Basilio, al recluir a su hijo, evidencia su autoridad y su intención de mantener el poder. Segismundo, una vez libre, lucha contra sus tendencias violentas para gobernar con justicia. Rosaura y Astolfo encarnan la búsqueda de influencia y la ambición política. La perspectiva ideológica de Calderón contrasta con las ideas marianas del siglo XVII al dar importancia a la libertad de elección y la capacidad de alterar el destino. Calderón cuestiona la autoridad humana, abogando por su ejercicio equitativo y compasivo, y propone una redención basada en la experiencia.
Plano filosófico: La obra reflexiona sobre la realidad y la condición humana. La temática principal gira en torno a la interrogante de si la vida es un sueño o una realidad. Segismundo encarna el conflicto entre la libertad y el destino. «La Vida es Sueño» se conecta con la filosofía estoica al resaltar el dominio propio, el libre albedrío y la excelencia moral. Segismundo aprende a gestionar sus impulsos, reflejando los principios éticos estoicos. La obra resalta la aceptación de la realidad y la transitoriedad de la vida.
Plano moral: La obra reflexiona sobre los principios y las virtudes que deben orientar la conducta. Segismundo da importancia a la virtud y la justicia para ejercer el poder. Rosaura, en su búsqueda de justicia, da importancia a actuar según nuestros valores. El libre albedrío y el juicio moral son centrales. Segismundo aprende a discernir el bien y el mal. Su progreso moral lo lleva a perdonar y actuar con justicia. Calderón cree que la instrucción y el deber son esenciales para el progreso moral.
La renovación del teatro durante el Siglo de Oro español se manifestó en el tratado «Arte nuevo de hacer comedias» de Lope de Vega. Publicado en 1609, este tratado fue esencial para el progreso del teatro español. El tratado presentaba principios como la coherencia en la acción, el tiempo y el lugar, la diversidad de personajes y la accesibilidad del teatro para todas las clases sociales.
La influencia de esta nueva perspectiva teatral es evidente en las obras de Calderón. Calderón adoptó numerosos principios de Lope de Vega, integrándolos en sus obras con su estilo particular. Calderón siguió los principios de unidad de acción, tiempo y lugar, lo que se refleja en la cohesión de sus tramas. También se distinguió por su profundidad psicológica y su exploración de temas filosóficos. Aunque respetaba las normativas de Lope de Vega, también las desafiaba, creando obras amenas e intelectualmente enriquecedoras.
En «La Vida es Sueño», se desarrollan dos líneas argumentales protagonizadas por Rosaura y Segismundo:
Rosaura: Joven de linaje noble que busca represalia contra Astolfo, quien la deshonró. Exhibe valentía, determinación y astucia en su búsqueda de justicia y redención. Su relato refleja temas de honor y equidad.
Segismundo: Hijo del rey Basilio, recluido desde su nacimiento debido a una profecía. Su trama se centra en su despertar a la conciencia y su lucha por aceptar su destino y dominar sus impulsos. Se enfrenta a dilemas morales y existenciales sobre la libertad y el propósito de la vida.
Coincidencias: Ambos combaten contra las circunstancias injustas y anhelan recobrar su honor y dignidad. Ambos atraviesan un cambio interno, asimilando lecciones sobre el perdón y la reconciliación.
Divergencias: Rosaura persigue activamente venganza, mientras que Segismundo lucha contra un conflicto interno. Sus situaciones iniciales difieren: Rosaura es víctima de la violencia, mientras que Segismundo es considerado una amenaza.
En «Tormento», Galdós combina un narrador omnisciente en tercera persona con un narrador implícito, cada uno con su propia visión. El narrador omnisciente es más objetivo y neutral. El narrador implícito es un observador-participante, inmerso en el mundo de la novela. Utiliza pronombres posesivos en primera persona e interactúa con los personajes. Su función principal es respaldar la ideología del escritor y añadir humor mediante la ironía. El narrador omnisciente revela los pensamientos íntimos de los personajes mediante el monólogo interior o el estilo indirecto libre, especialmente a partir del capítulo XXV, donde se presenta el conflicto principal.
«Tormento» es considerada una novela de serie por su vinculación con «La de Bringas» y «Doctor Centeno», formando la «Trilogía de los Tormentos». Comparten personajes, escenarios y temas. «Tormento», ambientada en el Madrid de finales del siglo XIX, explora temas como el amor, el desengaño, la religión y la hipocresía social a través de las vivencias de Amparo Sánchez Emperador. La conexión con las otras novelas se establece mediante personajes recurrentes y la exploración de la sociedad madrileña. En «La de Bringas», se menciona a Amparo, y en «Doctor Centeno» se retoman eventos y personajes de «Tormento».
En «Tormento» se observan rasgos realistas y naturalistas:
La metaficción en «El Quijote» se refiere a cómo la obra reflexiona sobre su naturaleza como texto literario. Cervantes utiliza diversas técnicas metaficcionales:
La metaficción desafía las convenciones literarias y enriquece la experiencia del lector.
«El Quijote» comienza como una sátira de los libros de caballerías, pero trasciende esta temática explorando temas universales:
Primera salida: Presentación de Don Quijote, un hidalgo de cincuenta años que, tras leer libros de caballería, pierde la razón y se convierte en caballero andante. Adopta el nombre de Don Quijote, busca a Dulcinea del Toboso y se embarca en aventuras. Su percepción de la realidad está alterada. Regresa a casa golpeado y herido.
Segunda salida: Aparece Sancho Panza. Se percibe un cambio en la locura de Don Quijote, que critica la sociedad. Aventuras como la de los molinos de viento y el yelmo de Mambrino. Vuelve a casa enjaulado.
Tercera salida: Don Quijote parece recuperar la razón, pero sufre engaños al ser reconocido por otros personajes. Pierde la esperanza y se muestra más reflexivo. Es manipulado por otros personajes, como los duques.
Final: Don Quijote tiene un momento de lucidez, renuncia a su vida de caballero y reconoce la realidad. Regresa a casa, enferma y fallece.
Cide Hamete Benengeli es el supuesto autor del manuscrito árabe que narra la historia de Don Quijote. Aparece en la primera parte, durante el enfrentamiento con el Vizcaíno. Cervantes simula encontrar el manuscrito y pedir a un morisco que lo traduzca. Esta técnica permite a Cervantes añadir credibilidad a la historia y realizar observaciones. En la segunda parte, los personajes descubren la existencia del libro, lo que cuestiona la veracidad de la historia y la autoridad del narrador. Cervantes parodia los libros de caballería y desafía las convenciones historiográficas.
«El Quijote» marca un punto de inflexión en la literatura:
El «Romancero gitano» de Lorca está compuesto por dieciocho romances:
Esta estructura permite a Lorca explorar la cultura gitana en su relación con el amor, la muerte y el destino.
En «Romancero gitano», el conflicto entre libertad individual y normas colectivas se manifiesta en personajes femeninos:
Estos personajes representan el deseo de libertad frente a normas represoras.
La muerte es una presencia inevitable en el «Romancero gitano», manifestada a través de la ley, el honor y el destino:
Lorca usa la muerte para ilustrar el conflicto entre libertad individual y normas sociales.
En «Romancero gitano», el gitano trasciende la representación folclórica:
El gitano se convierte en un emblema de la lucha por la libertad y la dignidad.