Portada » Geografía » Importancia del Sector Servicios en la Economía Española
El sector servicios engloba todas las actividades que no producen bienes materiales de forma directa, sino que satisfacen las necesidades de la población. Dirige, organiza y facilita la actividad productiva de otros sectores, incluyendo comercio, turismo, sanidad, actividad civil, ocio, etc. También conocido como sector terciario, se compone de áreas «suaves» de la economía: seguros, turismo, comercio, educación, restaurantes, franquicias, transportes, etc. Se dedica, principalmente, a ofrecer servicios a la sociedad, a las personas y a las empresas.
Este sector abarca una amplia gama de actividades en constante aumento, desde la tienda de la esquina hasta las altas finanzas o el Estado. Aunque no produce bienes, es fundamental en una sociedad capitalista desarrollada. Su función es proporcionar a la población todos los productos fabricados por la industria, obtenidos por la agricultura e incluso por el propio sector servicios. Gracias a él, podemos realizar las múltiples tareas que exige la vida en la sociedad capitalista de consumo de masas: producir, consumir y ocupar el tiempo de ocio.
En España, la terciarización de la economía ha sido muy rápida. Tras el Plan de Estabilización de 1959, España inició su proceso de industrialización. La población migró del campo a la ciudad y, al no encontrar empleo en la industria, muchos se dedicaron a los servicios.
El comercio exterior se encarga de exportar e importar productos. España suele tener una balanza comercial deficitaria (importa más de lo que exporta). El turismo es un subsector clave en las exportaciones, contabilizando el ingreso de divisas de turistas extranjeros. La mayoría del comercio exterior español se realiza con países de la Unión Europea (Francia, Alemania, Italia, Reino Unido, Portugal…).
La actividad de ocio y turismo no se limita a la hostelería, sino que genera diversas actividades paralelas: teatro, cine, excursiones, visitas a monumentos, etc. Las principales zonas turísticas son la Costa del Sol, el Levante, Alicante, Baleares y Canarias. Otros centros importantes son la costa cántabra y las Rías Bajas. Ciudades como Madrid, Santiago de Compostela, Toledo, Granada y Sevilla atraen un turismo de carácter cultural.