Portada » Diseño e Ingeniería » Importancia de las Inspecciones en el Control de Pérdidas Empresariales
Técnica preventiva dirigida a detectar y controlar los peligros del ambiente que pueden potencialmente dañar a las personas y/o a la propiedad.
La obligación de mantener informados a los niveles gerenciales de la empresa sobre los problemas que pueden afectar adversamente las operaciones hace de las inspecciones planeadas un elemento fundamental dentro del Programa de Control de Pérdidas.
La supervisión mediante esta actividad verifica el estado en que se encuentran los equipos, instalaciones, materiales y ambiente, actuando sobre las causas, síntomas o condiciones subestándar que comprometen el normal desarrollo de las operaciones.
En la práctica se desarrollan dos tipos de inspecciones:
Es aquella que realiza la supervisión en forma espontánea a un lugar o equipo como parte normal de sus actividades durante los desplazamientos en su área de trabajo.
Forma de realizar estas Inspecciones: El supervisor toma nota de las condiciones de riesgo detectadas, al igual que las informaciones que le son planteadas por los trabajadores. Estas anotaciones permitirán posteriormente establecer prioridades y determinar la aplicación de medidas de control.
Limitaciones de este tipo de Inspecciones: No proporcionan antecedentes sobre lugares poco visibles o que signifiquen dedicación extra, solo recogen los problemas más obvios.
Son aquellas que se ejecutan en forma programada, regular y sistemática y que cubren íntegramente el medio ambiente para detectar, analizar y corregir deficiencias.
Cubren íntegramente un área de trabajo y en ella se detectan todas aquellas situaciones que pueden ser el origen de un deterioro en las operaciones. Se realizan de forma mensual o bimensual o con la frecuencia que la empresa estime necesario. Las anotaciones deben ser precisas y deben incluir la clasificación del grado de pérdida potencial que presentan.
Los aspectos típicos que merecen atención en una inspección planeada general son:
Las Inspecciones Planeadas Parciales tienen el mismo propósito que las inspecciones anteriores, solo se diferencian en que estas abarcan uno o dos ítems a inspeccionar como máximo. Por ejemplo: orden y limpieza; instalaciones eléctricas; iluminación.
Resulta de gran importancia confeccionar una tarjeta de registro de las partes críticas a cargo del supervisor, lo que indudablemente contribuye al control del programa y a la confiabilidad de las inspecciones.
Dado que se requiere de conocimientos técnicos específicos, lo más conveniente es que este tipo de inspecciones las realicen los especialistas de mantención.
Para tal propósito debe recurrirse a catálogos, proveedores, experiencia de expertos en la materia y fundamentalmente al conocimiento de la supervisión.
El supervisor lo controla, estableciendo un sistema de tarjetas de partes críticas, determinando qué inspecciones deben hacerse sobre una base planeada.
Todas aquellas que presentan una condición que pueda interferir o deteriorar las operaciones. De esta manera, las inspecciones, además de asegurar la protección del personal, al control de calidad y a las demoras de la producción, proporcionarán información oportuna sobre partes que pueden ocasionar problemas debido al uso, esfuerzo, vibración, corrosión, calor, etc.
Como se puede comprender, existe una gran variedad de condiciones subestándar que pueden afectar una parte crítica, que va a depender de su propia naturaleza y del esfuerzo al que esté sometido.
Para describir las condiciones que se deben buscar, es conveniente emplear expresiones como: gastado, corroído, inflamable, suelto, excesivo, gaseoso, etc. Las condiciones específicas para cualquier parte crítica es recomendable enumerarlas en las tarjetas de registro antes indicadas.