Portada » Historia » Importancia de la alianza obrero-campesina en la teoría revolucionaria
Los campesinos eran una parte importante en la clase trabajadora, aunque distinta en muchos aspectos.
En consecuencia, se hacía imprescindible la alianza obrero-campesina en la lucha de transformación de la sociedad, en la práctica, esta posición de Lenin fue de importancia decisiva para el triunfo de la revolución de Octubre. Mientras organizaba a la clase trabajadora creando consejos de fábrica, los soviets para asegurar el control de la industria, se movía con igual interés en mentalizar a los campesinos sobre su derecho a la tierra que trabajaban.
Diferencias:
Semejanza: ambas teorías aceptan el divorcio del capital y el trabajo.
a. Inautenticidad de la conciencia sindical del movimiento obrero: el movimiento obrero sindicalista, orientado a la conquista de meras reivindicaciones económicas, representaba la forma menos auténtica de la conciencia obrero histórico.
b. Prioridad y genuinidad de la conciencia política: consideraba que la conciencia obrera natural de los trabajadores debía ser esencialmente cuestionadora del sistema de opresión en el que se hallaba inmerso.
c. Subordinación del sindicalismo al partido político obrero: si la forma economicista del movimiento obrero no es la primaria y auténtica, aun cuando no se le niegue su validez, debe en consecuencia subordinarse estratégicamente a la organización política de los trabajadores.
d. Valores del sindicalismo: para Marx, el sindicalismo es un centro de organización y formación, pues ofrece el medio y el lugar apto (legalmente reconocido por el sistema burgués) para aglutinar y coordinar los esfuerzos de la clase trabajadora.
e. La necesidad de una filosofía de la clase trabajadora: todo lo expuesto lleva a Marx a plantear la necesidad de una filosofía liberadora de clase trabajadora, que no será una filosofía de índole meramente especulativa sino transformadora, una filosofía de la praxis.
a. Sindicalismo Gremial o de oficio (Craft Unionism): son aquellas organizaciones obreras que surgen por la asociación de los trabajadores que desempeñan dentro de una industria, en un mismo oficio.
b. Sindicalismo Ocupacional (profesional): son organizaciones obreras que se caracterizan por integrar a los trabajadores de diversos oficios, dentro de una misma rama o línea ocupacional.
c. Sindicalismo Industrial (de grandes #): se caracteriza por estar conformado por trabajadores que se agrupan en función de su pertenencia a una industria especializada en algún tipo de actividad.
d. Sindicalismo Laboral: se caracteriza por establecer que el criterio de pertenencia o adscripción a un sindicato de esta índole es el mero hecho de ser un trabajador asalariado, no importando el oficio, ocupación o la industria en que éste se ocupe.
a. La voluntad del poder del capitalismo: expresa su deseo de mantener la hegemonía y control alcanzado en el desarrollo y los logros de la revolución industrial por la burguesía. Mientras la voluntad de poder que se le contrapone, la representa el surgimiento del movimiento obrero socio-político. Para Perlman la voluntad de poder del capitalismo, en la Rusia Zarista, fue muy débil y por ello quedó arrollada por la fuerza revolucionaria de los trabajadores organizados bajo la visión Marxista del mesianismo del proletariado.
b. El grado de dominio ejercido por los intelectuales: Perlman reconoce la importancia que ha tenido el rol de los intelectuales en la orientación y conformación del movimiento obrero, pero los considera como algo ajeno al mismo. Muchos de ellos con frecuencia no pasan de ser unos pseudo-intelectuales que actúan en un mundo que les es extraño, el mundo obrero, viéndolo más como una abstracción que como una realidad concreta.
c. El grado de madurez de la mentalidad sindical: este es el factor más importante para explicar el comportamiento y la estructura del movimiento obrero. La conciencia obrera se conforma a partir de las instituciones laborales del pasado y continúa desarrollándose en los sindicatos contemporáneos. Es un proceso que tiene su explicación en términos de la psicología individual y colectiva.
Los primeros 3 marcaron el voluntarismo y la fe economicista y la pragmática de Commons:
1. La gran extensión de tierras libres: (la frontera hacia el oeste) con su reto a la iniciativa del hombre y las posibilidades que ofrecía de desahogo demográfico, mediante los asentamientos (Homestead Law), actuó como una válvula de seguridad social y como motor del individualismo, restándole agresividad al movimiento obrero norteamericano, e inculcándole al mismo tiempo un fuerte voluntarismo.
2. La expansión de mercados: amparada por la legislación (Interstate Commerce Law), e impulsada por medio del desarrollado de vías de comunicación contribuyó a generar en el trabajo americano un fuerte sentido de los negocios y a imprimir en su movimiento obrero una conciencia economista.
3. El ciclo de los negocios: es decir las alzas y bajas del movimiento económico del sistema liberal, con su tendencia ascendente a largo y mediano plazo, reforzó la fe en el sistema económico vigente en el país, induciendo al movimiento obrero norteamericano a su aceptación sin que se dieran cuestionamientos ideológicos consistentes.
Lo que Commons dice sobre este ciclo de negocios: que en los períodos de prosperidad, cuando los negocios se expanden y crece la demanda del trabajo, el sindicalismo, de carácter negociador y pragmático se desarrolla la boyante y agresivo, buscando una mayor participación en la prosperidad; mientras que en los períodos de depresión cuando los negocios decaen y decrece la demanda de la mano de obra, aumentando el desempleo, los sindicatos disminuyen su presión sobre la economía.
Las 3 variables contextuales de índole socio-política, marcaron la impronta de su sentido democrático, de su asepsia ideológica obrerista y de su americanismo:
4. El temprano reconocimiento del sufragio universal: el temprano ejercicios de los derechos democráticos (el voto, la alternabilidad electoral, el bipartidismo, etc.), canalizaron la actividad política de los trabajadores, en su condición de ciudadanos, reafirmándoles en su fe en la democracia, y contribuyendo a la despolitización del movimiento obrero y a su conservadurismo.
5. La estructura federal de la división de poderes: jugaron un papel muy importante en la configuración del sindicalismo americano, al ofrecerle una gran pluralidad de alternativas para la resolución de sus problemas. La división de poderes como distintivo esencial de la democracia instaurada en el país, el sistema de gobierno federal, ofreció a los trabajadores la posibilidad de recurso a gran variedad de instancias y marcó el carácter institucionalista del movimiento obrero norte
6. La inmigración y el americanismo: en los Estados Unidos se registraban un aflujo impresionante de inmigrantes que volcaban sobre América en busca de oportunidades. Se incorporaban al país, ante todo, como asalariados, y ese era el factor que los unificaba. Y el americanismo, cuya fuerza se puso de relieve a lo largo de la historia del país, actuando en forma aparentemente invisible pero con notable poder amalgamador. Este americanismo hizo también “americanista” al propio movimiento obrero, como al resto de las fuerzas sociales del país americano.
1. La implantación del sistema fabril: la llamada revolución industrial, se caracteriza por haber eliminado gradualmente el antiguo sistema artesanal, substituyéndolo por el sistema fabril, que origino un nuevo tipo de trabajador, el obrero asalariado, contratado mediante el pago de un jornal, sin tener ya ninguna participación en la administración el trabajo y la empresa.
2. La alineación del trabajador: el obrero asalariado también representaba un fenómeno nuevo, porque era un trabajador alienado. Había surgido una clase de trabajadores, en el mundo industrial, privados de todo lo que constituía hasta entonces la personalidad del trabajador.
3. El deterioro de las condiciones de trabajo: el deterioro de las condicione de trabajo, en el sistema fabril, era un hecho también manifiesto. No existía preocupación por la ventilación, la limpieza, el orden, la higiene de los locales, etc.; únicamente por el aprovechamiento de los espacios en la ubicación de las maquinas.
Doctrina de la oferta y demanda (reinterpretada): los sindicatos demostraron que siguiendo el principio de la ley de la oferta y la demanda, se podía llegar a una poderosa estructuración de posiciones, por cada una de las partes interesadas y discutir de tú a tú en la mesa de negociaciones, llegando eventualmente a acuerdos colusivos. Para ellos esta política significaba alcanzar una posición estratégica en su trato con los patronos, una posición de poder a poder, que contribuía a superar la indefensión en que se encontraban en el mercado.
Margen de negociación bilateral: numerosos tratados sobre la negociación colectiva subrayan, hoy día, la importancia de este fenómeno, que lleva a los protagonistas de las relaciones laborales a la determinación de un acuerdo dentro de lo que se ha dado en llamar el margen, o ámbito racional de entendimiento, en función de una confrontación dialéctica de sus máximos-mínimos y mínimos-máximos respectivos.
– El método de la seguridad mutua: los sindicatos ingleses, empujados por las contradicciones que ellos mismos sufrían y por os conflictos inter-organizacionales, centraron también su atención en la búsqueda de armonía y apoyo mutuo. Uno de los medios para lograr este propósito fue el desarrollo de actividades, programas y mecanismos de ayuda mutua, tales como cajas de ahorro, fondos de jubilación, y desempleo, sociedades mutuales, etc.; que garantizasen una protección a los miembros de diferentes oficios que hubieran sufrido accidentes de trabajo, se encontrasen desempleados, etc.
– El método de restricción de números y de la negociación colectiva: los sindicatos ingleses, especialmente en los inicios de sus procesos de asociación ocupacional, restringían el número de aprendices y el número de sus afiliados, con fines proteccionistas, y para fortalecer su posición negociadora. La negociación colectiva venía a ser, dentro de esta metodología de la restricción del número, un proceso de control efectivo de la oferta de trabajo, en términos de “tantos empleados a tanto o no hay trato”, y de defensa del “craft” u oficio.
– El método del proceso legal: los autores piensan que desde los inicios de la actividad sindical los trabajadores ingleses centraron su estrategia en asegurar la situación del obrero a través de formas legales de protección y desarrollo, que les permitieran fortalecer el movimiento sindical y mejorar las condiciones generales de vida y el “status” social de los trabajadores. Se trata de lograr la promulgación de reglas favorables al obrero.