Portada » Historia » Ideologías y Gobiernos Clave de la Revolución Mexicana: Villismo, Zapatismo, Carrancismo y Maximato
El movimiento villista, liderado principalmente por Francisco Villa (Doroteo Arango), se caracterizó por su ideario agrarista y social. Buscaba la reducción de las grandes propiedades territoriales, la distribución equitativa de tierras excedentes y límites justos. Fue un movimiento heterogéneo que aglutinó a rancheros, ganaderos, mineros, agricultores, extranjeros y campesinos, además de contar con el apoyo de líderes obreros e intelectuales. Su lema, al igual que el zapatismo, fue «Tierra y Libertad».
El zapatismo, término empleado para referirse al movimiento armado identificado con las ideas de Emiliano Zapata, caudillo de la Revolución mexicana, se plasmó principalmente en el Plan de Ayala de 1911. Su lema más simbólico, «La tierra es de quien la trabaja», reflejaba su lucha por el agrarismo y la eliminación del caciquismo en México, buscando restituir la posesión de la tierra a las clases campesinas del sur del país. El zapatismo, agrarista y armado, tuvo concordancias con el magonismo, teórico y obrero. Se considera que el zapatismo fue el movimiento que mejor expresó la lucha por la tierra y que le dio un sentido social a la Revolución Mexicana.
El carrancismo fue el movimiento encabezado por Venustiano Carranza, gobernador de Coahuila que se levantó en armas con el Plan de Guadalupe contra el gobierno de Victoriano Huerta. Carranza unió las ideas de Benito Juárez con las de los revolucionarios contemporáneos, como se refleja en la educación laica y los derechos de los trabajadores en la Constitución de 1917. Carranza, junto a las principales fuerzas revolucionarias, logró derrotar a Huerta y buscó evitar que los militares ocuparan la presidencia.
El Maximato fue un período histórico y político de México (1928-1934) marcado por la influencia de Plutarco Elías Calles, conocido como el «Jefe Máximo de la Revolución«. Este periodo inició con el gobierno interino de Emilio Portes Gil tras el asesinato de Álvaro Obregón y finalizó con el inicio del gobierno de Lázaro Cárdenas.
El gobierno de Plutarco Elías Calles se caracterizó por los conflictos entre la Iglesia y el Estado debido a las restricciones al culto católico impuestas por la Ley Calles, lo que desencadenó la Guerra Cristera en 1927.