Portada » Ciencias sociales » Funciones de la empresa en la economía de mercado
11.- Public choice
Destaca Buchanan, autores que tratan la idea de Estado déspota, benevolente, Estado de Leviatán, Estado depredador. Cuestionamiento desde dentro de cómo son las decisiones en lo público, destacamos autores como Dows, Rawls, Brennan y Arrow. Descomponen al Estado en burócratas, políticos, legisladores, afirmando que todos se comportan como maximizadores que buscan su propio interés, no el bienestar social.
Critican el instrumento por excelencia que es el presupuesto. Desde el punto de vista de la teoría, la economía en el análisis económico de la política es una crítica a la teoría vigente: la línea que justifica la intervención del Estado es la economía del Bienestar, justificada por los fallos del mercado.
El objetivo es maximizar una función de bienestar social, el problema es que se hace difícil aprobada la teoría utilitarista, esta dificultad remite de lo económico a lo político.
¿Cómo se puede construir entonces la función? Habrá quien diga que no como Arrow, teoría de la imposibilidad. Pero sugiere que de manera indirecta los individuos puedan revelar sus preferencias en una democracia representativa, eligiendo la agenda de bienes púbicos que les parezca más adecuado a lo que quieran: votando a la agenda. A. Dows, teoría de la democracia, indica como incide en el análisis de lo económico lo político. Existe un gobierno, unos partidos que compiten con el poder comportándose como empresas, y unos ciudadanos que expresan sus preferencias mediante el voto. Todo el conjunto de teorías que estudian estas cosas forman el análisis económico de la política, teoría de la elección pública. · Fallos del mercado. ·
Necesidad de reformar las funciones del Estado: reformar los términos de la agenda. Recapitulando: tres líneas de trabajo de esta corriente. · Crítica a la concepción del Estado mediante el concepto de Estado depredador. · Crítica a la intervención keynesiana vía presupuesto. · Crítica a la corriente de los fallos del mercado para llegar a los fallos del Estado. Es también la vuelta al sujeto que toma decisiones, define la agenda del gobierno mediante sus votos. La democracia es un sistema de empresas competitivas como partidos. Buchanan: >. Cuando Buchanan (teórico fundamental), Dows, Arrow, Tullock, buscan los referentes teóricos en los politólogos del s.XVIII y del s.XIX. Se llaman Nuevos Economistas Políticos, olvidándose de que parten de la economía neoclásica. Pasa a todos los campos, no solo a lo político, en los años 60 político era sinónimo de hombre que buscaba el bienestar social, actualmente, solo buscan el dinero. Han desvirtuado a la política introduciendo en ella el análisis económico. Desde el punto de vista de la aplicación práctica, esta corriente ha penetrado, se referían a la realidad americana, donde lo político se comporta totalmente como empresas, en el ojo del huracán está el Estado del Bienestar, tanto en lo que representa como modelo de intervención (intervención en lo menos productivo), como interacción keynesiana en la economía, como por lo que representa en términos coste-beneficios (es un instrumento que genera pocos ingresos y muchos gastos).
Preguntas Historia del Pensamiento Económico
Curso 2014-2015 3º Grado en Economía
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En la etapa keynesiana la justicia del impuesto, siendo el principio impositivo el de la capacidad de pago. Ese era el problema que tenía para hacer un tributo justo, desde el año 75, el principio es el impuesto óptimo no distorsionador, eficiente, que no interfiera en las decisiones de las personas (ahorrar, gastar, invertir). Resumen de las cuatro corrientes: Los monetaristas apuestan por el libre mercado y cuestionan la eficacia de la PF, con la escuela de las expectativas racionales se intenta recuperar la racionalidad perdida de los agentes económicos de la oferta, proponen reducir los impuestos y desregular la economía, a partir de su concesión de la estabilidad del sector privado, desde la elección pública y apoyándose en las tesis de los fallos del Estado, se propone el desmantelamiento progresivo del sector público. Se estudia el entramado interno de las elecciones públicas, lo político como un mercado, es el colmo del imperialismo económico.
15.- Del crecimiento económico al desarrollo sostenible
Colapso del consenso de Washington y “Nueva Agenda” de desarrollo
Chang nos hace ver que tras las recomendaciones de los “Árbitros” de las “buenas políticas” y el “buen gobierno” a los países en desarrollo, se esconde un intento de retirarle la escalera que les permitiría acceder al progreso.
Las “buenas políticas” recomendadas en muchos casos han llegado a colapsar el crecimiento. A su juicio, la experiencia histórica contradice de pleno las posiciones del discurso dominante relativo tanto a las “buenas políticas” cuanto al “buen gobierno”, lo que confirma la hipótesis de que las recomendaciones al mundo en desarrollo responden a la idea de “retirar la escalera”.
Neoinstitucionalismo, acción colectiva y economía política del desarrollo
Olson con la nueva economía del desarrollo utiliza los supuestos de la microeconomía neoclásica para explicar el hecho de que los gobiernos no apliquen políticas “concretas”.
Rodrih recomienda mejorar la credibilidad del aparato estatal, los mecanismos de expresión y las redes de seguridad social y el seguro. Dicha tarea exige construir una serie de instituciones que corrijan los excesos del mercado: Reguladoras, que se ocupan de las externalidades, las economías de escala y la información imperfecta: Estabilizadoras que aseguren baja inflación y eviten crisis financieras y legitimadoras que proporcionen seguro y protección social, se ocupen de la redistribución y controlen el conflicto.
Desarrollo, Subdesarrollo y “Sistema-Mundo”
El primer sistema en incluir el globo entero dentro de su geografía es la economíamundo capitalista. La manifestación del sistema-mundo desde el Siglo XVI se creó, consolidó y desarrolló sobre la base de la acumulación incesante de capital. Ante este estímulo, la economía-mundo se expande de manera desigual.
Daly cuestiona el supuesto de la bondad del comercio, argumentando que el coste ambiental del crecimiento aumenta a un ritmo más acelerado que el beneficio derivado de la producción. El aumento de la escala de actividad y de la demanda de energía y de servicios de trasporte incide negativamente sobre el medio ambiente. La ignorancia de los costes ambientales y sociales ocultos del libre comercio, concluía, convertía a los economistas en un peligro para la tierra y sus habitantes