Portada » Medicina y Salud » Fiebres Hemorrágicas Virales: Dengue, VIH, Hepatitis y Otros Virus – Características, Diagnóstico y Tratamiento
Los arbovirus son virus transmitidos por artrópodos. Tienen un tamaño de 30-50 nm, simetría icosaédrica, pueden o no tener envoltura, y su genoma es de ARN. Se replican en huevos embrionados.
Las familias de virus clasificadas dentro de los arbovirus son: Togaviridae, Flaviviridae y Bunyaviridae.
El virus del dengue se transmite por el mosquito Aedes aegypti, que se desarrolla en pequeñas colecciones de agua limpia. Produce reacciones de hemaglutinación con glóbulos rojos de aves in vitro y adquiere su envoltura por brotación en vacuolas intracitoplasmáticas.
El virus de la fiebre amarilla es transmitido por Aedes aegypti. Causa ictericia debido al daño hepático, lo que demuestra el tropismo de este flavivirus por el hígado. También produce hemorragias por sangrado a nivel intestinal.
Un paciente con dengue clásico presenta fiebre, artralgias, exantemas y un cuadro conocido como «fiebre rompehuesos». Se acompaña de malestar general y dolor en todo el cuerpo.
El dengue hemorrágico se caracteriza por fiebre de 41°C, leucopenia, plaquetopenia, hemoconcentración, hipoproteinemia, diversas hemorragias y hepatoesplenomegalia. La mortalidad oscila entre el 5 y el 10%.
El choque hemorrágico se manifiesta con hipoproteinemia, diversas hemorragias y hepatoesplenomegalia.
El virus Machupo, cuyo reservorio es el roedor Calomys callosus, causa la fiebre hemorrágica boliviana. Se caracteriza por un síndrome febril, diátesis hemorrágica, leucoplaquetopenia y compromiso variable del sistema nervioso central. El período de incubación es de 1-2 semanas. Los síntomas incluyen fiebre, cefaleas, decaimiento, dolor retrocular, petequias en la piel, enantema bucofaríngeo y conjuntival, hemorragias gingivales, inestabilidad de la marcha y facies de ebrio. Presenta una alta tasa de mortalidad.
El virus Junín causa la fiebre hemorrágica argentina. Presenta un síndrome febril, diátesis hemorrágica, leucoplaquetopenia y afecta al sistema nervioso central. El período de incubación es de 1-2 semanas. Los síntomas incluyen fiebre, cefaleas, decaimiento, dolor retrocular, petequias en la piel, enantema bucofaríngeo y conjuntival, y hemorragias gingivales.
La fiebre hemorrágica argentina se puede tratar con la administración de plasma humano inmune proveniente de individuos convalecientes. Si se administra antes del octavo día de la enfermedad, la mortalidad se reduce al 3%.
El VIH pertenece a la familia Retroviridae, subfamilia Lentivirinae. Posee tres genes principales: gag (codifica p24 y p17), pol (gen de la polimerasa que codifica la transcriptasa inversa) y env (codifica las glicoproteínas gp120 y gp41). Tiene una enzima transcriptasa inversa que permite la integración de su genoma como provirus al ADN de la célula huésped susceptible. Es una partícula esférica de 100-110 nm con una envoltura de doble capa de lípidos y una cápside icosaédrica. Es un retrovirus que convierte su ARN en ADN.
El período de ventana del VIH es de 2 a 9 años o más.
Los primeros anticuerpos contra el VIH están dirigidos contra los productos codificados por el gen gag. Más tarde aparecen anticuerpos contra los genes env y pol. Existe una depleción de los linfocitos CD4, causando la inmunodepresión característica del síndrome. También se observan alteraciones en las células NK, disminución funcional de los linfocitos B y en algunas funciones de los macrófagos, como la quimiotaxis, lisis y secreción de interleucina 1.
Existen varios tipos de hepatitis: hepatitis A, hepatitis B, hepatitis no A no B (hepatitis C, D, E, G).
Se omiten detalles específicos en el texto original, pero generalmente se diferencian por el modo de transmisión, la cronicidad y la severidad de la enfermedad.
Las hepatitis no A no B incluyen: hepatitis C, D, E y G.
La hepatitis D es la que puede presentar un mayor porcentaje de cronicidad.
El virus de la hepatitis D, o agente delta, solo se encuentra en pacientes que tienen una infección aguda o crónica por el virus de la hepatitis B.
Patogenia de la Infección por VHD: La patogenia de la infección por VHD está relacionada con si el paciente está o no previamente infectado con VHB.
Diagnóstico del VHD: Se puede detectar el antígeno en hígado o suero mediante ELISA. Se detecta a los 10-12 días de la aparición de la hepatitis delta aguda, pudiendo persistir durante varios años en pacientes crónicos.
Profilaxis del VHD: No existe una vacuna específica para el VHD.
Los adenovirus son virus de simetría icosaédrica, sin envoltura, con un diámetro promedio de 80 nm. Poseen una proyección llamada fibra que interactúa con la superficie celular para su absorción. Su ADN es de doble cadena lineal. Son estables a pH bajo y resistentes a secreciones gástricas y biliares, lo que les permite replicarse en el tracto intestinal. Penetran por endocitosis y la replicación, transcripción, ensamblaje y maduración del virión ocurren en el núcleo celular, con posterior ruptura de la célula.
Los adenovirus pueden causar infecciones respiratorias, oculares e intestinales (3-15% de las gastroenteritis virales infantiles). Afectan principalmente a la población pediátrica y militar.
Los rotavirus tienen forma de rueda, con una doble cápside proteica: una interna rugosa y una externa lisa. Su diámetro es de 70-75 nm. El genoma de ARN consiste en 11 segmentos de doble cadena.
El diagnóstico de rotavirus se puede realizar mediante cultivo, microscopía electrónica, ELISA (para antígenos virales) y electroforesis.
El período de incubación de los rotavirus es de aproximadamente 24 horas. Los síntomas incluyen diarrea severa, vómitos y fiebre. La duración promedio de la enfermedad es de 5-8 días en cuadros graves.
La profilaxis de los rotavirus incluye el mantenimiento de condiciones higiénicas y el desarrollo de vacunas.
Un paciente con infección por rotavirus presenta deshidratación, diarrea severa, vómitos y fiebre, con una duración de 5-8 días en cuadros graves.
Los rotavirus afectan principalmente a niños menores de 5 años.
Los Rhabdoviridae son viriones con forma de bala, de 130-300 nm de longitud y 60-80 nm de diámetro. Incluyen tres géneros: Lyssavirus (virus de la rabia), Vesiculovirus (estomatitis vesicular) y Sigmavirus (virus de insectos).
La rabia es una enfermedad infectocontagiosa que se transmite de animal a animal o al hombre. Se caracteriza por lesiones en el sistema nervioso central (meningoencefalitis).
Profilaxis de la Rabia: Vacunación con virus fijos inoculados en conejos y luego en ratones lactantes, que producen menos reacciones posvacunales. El número de dosis es de 7-10 por tratamiento postexposición.
Los Picornaviridae tienen un diámetro de 20-30 nm, ARN de cadena simple no segmentado y una cápside de simetría icosaédrica sin envoltura. Penetran por pinocitosis en una vacuola y su replicación ocurre en el citoplasma de la célula. Después de 6-7 horas de infección, se produce la lisis celular con liberación de los viriones. Las proteínas VP1, VP2 y VP3 son responsables de la inducción de anticuerpos neutralizantes. Existen dos tipos: virus nativos (completos) y desnaturalizados (por cultivos).
Solo cuatro arenavirus son de importancia, produciendo infecciones persistentes en roedores:
El cuadro clínico producido por estos virus es similar a la gripe, a veces con manifestaciones neurológicas como meningitis y fiebres hemorrágicas.