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. Manejo de caballo sin stress.
En su medio natural, los caballos pastan en el campo y hacen estampidas buscando nuevos pastos y agua. Esto parece muy lejos del caballo actual viviendo en un box, cuyo día a día, consiste en comer, trabajar y ocasionalmente pastar en el paddock. A pesar de su actitud doméstica actual, es un animal cuyo comportamiento y acciones se basan en sus instintos heredados de sus antecesores.
Viven en manadas por seguridad y son protegidos por el entero dominante, que avisa a la manada cuando se aproxima un peligro.
En la naturaleza, el caballo necesita poseer unos instintos rápidos y efectivos para sobrevivir. Un potro debe poseer la habilidad de moverse rápido, desde su nacimiento, para mantenerse con la manada, en caso de tener que huir de un peligro.
Sólo si es arrinconado un caballo lucha, y se defiende a sí mismo, mordiendo, dando patadas o escapando.
Muchos de los instintos y carácterísticas que se derivan de la vida salvaje, prevalecen aún en el caballo domesticado de hoy, y necesitamos conocerlos para entender por qué el caballo reacciona como lo hace.
CarácterÍSTICAS :
Animal de manada: El caballo necesita la compañía de otros caballos, y si no es posible, en algunos casos puede ser útil, la compañía de otro animal. La vida en manada es un mecanismo de defensa que se deriva de los tiempos de la prehistoria, cuando eran cazados y asesinados por otros animales. Es más seguro ser un grupo numeroso, ya que da, una mayor posibilidad de escapar de los depredadores. Las diferencias entre ellos, les dan más posibilidades para sobrevivir en una manada. A veces los caballos parecen estar constantemente luchando, mordiendo o dándose patadas entre ellos, o gritos agudos típicos. Pero son respetuosos y les gusta vivir con otros caballos. Si los dejas solos, se vuelven inquietos. Esto se ve a menudo, cuando un caballo se muestra nervioso corriendo a lo largo de la verja e incluso saltándola para estar con otros caballos. Algunos están tranquilos si están acompañados de otros animales como ovejas y vacas, pero lo mejor es que estén con otros caballos. Ésta carácterística puede causar problemas a los jinetes novatos o con caballos jóvenes y mal entrenados. Si el jinete no es suficientemente competente., se le puede hacer difícil, separa un caballo de la manada. Por otro lado, ésta carácterística, puede ser usada como una ventaja, el caballo más experto puede guiar a otros más inexpertos hacia un salto.
Nómada: En su medio natural buscan constantemente comida, hierba y vegetación movíéndose de pasto en pasto. L a mayoría de los caballos, en la actualidad están recogidos en parcelas, pero su instinto nómada todavía permanece. El movimiento de los caballos es
lento cuando están pastando y van continuamente cambiando de zona. Todos los caballos tienen una querencia instintiva hacia su box o parcela, éste instinto es muy fuerte en los caballos domesticados. A menudo los caballos, si extraviados, con o sin jinete siempre encontrarán el camino hacia el establo. Todos ellos tienden a incrementar la velocidad, en dirección a casa.
Herbívoro: El caballo se alimenta de Heno, hierba, hojas… Comen poca cantidad constantemente. Pastan una media de entre 16/20 horas al día, descansando cortos periodos de tiempo. El caballo domesticado tiene una forma de alimentarse, totalmente antinatural, siendo cebado a unas horas específicas.
Mecanismos de defensa: La mayoría de sus reacciones, reflejan el hecho, de que los caballos eran víctimas de depredadores. Sus defensas se basan en escapar o luchar. La primera reacción es correr, sin embargo, si se ve acorralado, el caballo luchará mordiendo, dando patadas, manotazos… Una mano puede golpear tan bien como los cuartos traseros.
Curiosidad: El caballo tiene una tremenda cantidad de curiosidad, a menudo se entretiene investigando cosas inusuales. Esto puede ser usado para coger un caballo suelto en la parcela. Si un caballo es difícil de coger, puedes mantenerte a cierta distancia de él, darle la espalda y fingir mirar algo que él no puede ver. Es muy probable que el caballo camine hacia mí y coloque su cabeza sobre mi hombro.
Animal dominante: El caballo no es un demócrata. Cuando en libertad, tiene que escapar de una manada de lobos, no hay lugar a discusión, es mucho más práctico tener una yegua dominante, o un entero, y seguir a su líder. Éste, protege a su manada del peligro, y les busca comida y agua. En muchas ocasiones, con los caballos domesticados, el humano toma el rol del caballo dominante. En las manadas dominantes, hay un líder macho o hembra, y los demás siguen un orden descendiente (pecking order), éste orden depende de su fortaleza y destreza.
Imitadores: Tienden a imitar a los otros, esto incluye también los malos hábitos. (tragar aire, bailar en el box…)
Buena memoria: Tienen muy buena memoria, en particular para el dolor. Si un caballo ha sido mal tratado en su vida, en similares circunstancias tenderá a defenderse. Por eso es tan importante, que el caballo sea guiado correctamente desde edades tempranas.
INSTINTOS
Los caballos tienen un comportamiento fuertemente instintivo. Los instinmtos están presentes en ellos desde su nacimiento. Tienen respuestas emocionales a diferentes situaciones. Éstas emociones se reflejan en su lenguaje emocional y sonidos.
Miedo: Un caballo asustado abrirá mucho los ojos. Girará rápidamente sobre el peligro y escapará. Algunas veces en el campo, el caballo escapará del objeto que le da miedo, pero girará su cara hacia el potencial enemigo. En el caso de no desaparecer el objeto que le produce miedo, se acercará hacia él, con la cabeza baja, oliendo fuertemente o soplando, siempre tenso y preparado para correr. Con jinete, un repentino movimiento o ruido, puede hacer al caballo saltar rápidamente hacia un lado alejándose del peligro. En el box, se mantendrá en el punto más alejado del objeto que le da miedo. Su cabeza se mantendrá alta mirando fijamente el peligro, los ollares se dilatarán y resoplarán, las orejas se tensan y se direccionan hacia el peligro. El cuerpo se notará amenazado, crecerá en altura y los músculos se presentarán rígidos y tensos.
Nerviosismo: La cabeza se mantendrá alta con los ojos abiertos y alerta, los ollares se ensancharán resoplando, las orejas se nueven alerta y escuchando. El cuerpo se alza y tensa preparado para escapar. El caballo puede temblar o empezar a sudar. Sus respiraciones por minuto se incrementan. Estercóla frecuentemente. Enfadado: Un caballo enfadado, mantiene su cabeza ligeramente baja, orejas pegadas, casi en línea con el cuello, ojos mirando fijamente, labias ondulados, dientes apretados. Se mostrará en una postura agresiva con los posteriores un poco girados. Puede intentar morder o dar patadas.
Dolor: El caballo escapará de un dolor externo, corriendo. Si es acorralado su cabeza puede levantarse y entrecerrar los ojos, se defenderá mordiendo, pegando o dando patadas. Pero lo más importante, es que el caballo recordará durante mucho tiempo, aquello que le causó dolor. Si es el jinete el que le causa dolor, el caballo no solo intentará correr, sino que intentará deshacerse del jinete girando y botándose. Girar los cuartos traseros, es un
mecanismo de defensa que viene de cuando escapaban de los depredadores, ya que los lobos siempre atacaban en el dorso del caballo. Éste giro de los posteriores puede ser también un síntoma de excitación y diversión.
Contento: El caballo aparentará relajado y calmado, su pelo suave, su pelo brillante. Sus oídos atentos dirigen las orejas , suavemente hacia el sonido.
Triste: Aparece introspectivo, sin brillo, sin vida, aletargado o enfadado. Su cabeza aparecerá baja, ojos sin brillo, orejas blandas, cuerpo caído y apariencia cansada. El pelo áspero. Algunas veces el caballo, desarrolla malos hábitos como un comportamiento agresivo o vicios de establo.
Interesado: El cuello aparecerá arqueado, nariz ofateando, orejas móviles, cuerpo alerta pero relajado. Sus ojos están brillantes, la boca apuntando hacia adelante, buscando.
Emocionado: La cabeza se mantiene alta, fosas nasales olfateando, respirando posiblemente más rápido. Orejas puntiagudas u ojos brillantes. El caballo hará cabriolas posiblemente botándose; cuerpo alerta, cola levantada. Puede sudar.
Travieso: Las orejas se mantienen hacia atrás pero no caídas. Mirada sospechosa y entrecerrada, observando y analizando. Las fosas nasales se contraen y tensan. El caballo puede intentar cocear o levantar un posterior.
Juguetón: El caballo puede golpear el suelo con una mano. Se moverá rápidamente, corriendo pequeñas distancias y volviendo botándose. Jugar es más común en caballos jóvenes, pero todos los caballos lo hacen de vez en cuando.
Atento: Las orejas aparecerán picudas y móviles, ojos brillantes y alerta. El cuerpo está relajado pero alerta.
Luchando por ser el líder: La cabeza puede estar hacia abajo con el cuello extendido, o bien arqueado. Enseña los dientes, labios curvados: orejas planas hacia atrás; ojos pequeños y analíticos. Cuerpo estirado y amenazador. Algunas veces el caballo amenazará golpeando el suelo con una mano, o girando el cuerpo sobre los posteriores para dar patadas.