Portada » Arte » Explorando la Escultura Barroca: Características, Obras Maestras y Contexto
En la escultura barroca, destaca el deseo de movimiento. Este movimiento se proyecta hacia el exterior, con las figuras y ropajes extendiéndose hacia afuera. Los ropajes se hinchan y arremolinan, y el escultor se enfoca más en el movimiento del paño que en las formas de la figura humana. A la concepción puramente escultórica del Renacimiento, le sucede una obra de carácter más pictórico, que busca representar la apariencia más que la realidad. Se busca la exaltación de los sentimientos y las expresiones teatrales. El escultor barroco es dado a representar los arrebatos místicos, en consonancia con las directrices de la Contrarreforma marcadas por el Concilio de Trento. La escultura barroca es efectista y busca impresionar al espectador, sobre todo en el género funerario.
Identificación
Título: David
Análisis
Bernini retoma un tema frecuente desde el Renacimiento (Donatello y Miguel Ángel). Donatello representó al héroe bíblico tras vencer al gigante, y Miguel Ángel en el momento previo al combate. Bernini, sin embargo, lo muestra en el acto de arrojar la piedra. Es una imagen de gran movimiento contenido, donde hasta los labios apretados transmiten concentración y esfuerzo. Frente a la idealización de Donatello y la mirada atenta de Miguel Ángel, el David de Bernini muestra tensión en cada detalle, como los pies contraídos para un mayor agarre. Bernini elige un hombre vulgar, quizá un pastor, arrebatado por la ira. Toda la fuerza se enfoca hacia Goliat, creando un espacio cargado de energía entre David y su enemigo invisible.
Identificación
Título: Apolo y Dafne
Autor: Gian Lorenzo Bernini
Cronología: 1625
Estilo: Barroco
Técnica y materiales: mármol
Dimensiones: 243 cm
Localización: Galería Borghese
Tema: Mitológico
Análisis
Bernini plasma la fábula de Ovidio, narrando el momento en que los brazos de la ninfa Dafne se transforman en hojas de laurel y su cuerpo en un árbol, al ser abrazada por Apolo. Bernini muestra un virtuosismo técnico, puliendo las superficies del mármol y concentrando la atención en la tensión del momento, contraponiendo el estupor de Apolo al horror de Dafne. El movimiento es una característica relevante del Barroco, representando un momento fugaz. La obra fue encargada por el cardenal Borghese. Las figuras están llenas de sensualidad y movimiento, insinuado mediante líneas curvas y pulimento. Se define la oposición entre la piel suave de Dafne y la textura áspera del tronco. La leyenda narra cómo Apolo se burló de Cupido, quien se vengó enamorando a Apolo de Dafne y haciendo que ella odiara el amor. Apolo persigue a Dafne y al tocarla se convierte en laurel. En adelante, Apolo toma el laurel como su árbol y se venga de Cupido, coronando con laurel a los vencedores de los juegos píticos.
Identificación
Título: Éxtasis de Santa Teresa
Autor: Gian Lorenzo Bernini
Cronología: 1656
Estilo: Barroco
Técnica y materiales: mármol y bronce
Localización: Capilla Cornaro (Iglesia de Santa María de la Victoria)
Tema: Religioso
Análisis
Es una fiel transcripción del éxtasis descrito por la santa en El Libro de su vida: un ángel la visitó con un dardo que hundió en su corazón, produciéndole dolor y amor a Dios. Bernini busca producir en el espectador la intensidad de la emoción religiosa. El conjunto es de gran teatralidad. La santa, en mármol blanco, cae sobre una nube oscura, mientras la luz divina cae desde arriba. Los ropajes se agitan, produciendo juegos de luces y sombras típicos del Barroco. Las figuras están iluminadas desde una ventana superior oculta. La santa está en actitud dramática, con los ojos cerrados y los labios abiertos, mientras el ángel rebosa vida y alegría.
Identificación
Título: Cristo Yacente
Autor: Gregorio Fernández
Cronología: Siglo XVII
Estilo: Barroco
Técnica y materiales: madera policromada
Localización: Convento de los Padres Capuchinos del Pardo (Madrid)
Tema: Religioso
Representa a Jesucristo sobre un sudario, en posición yacente tras la crucifixión. Es un tema frecuente en la escultura española de los siglos XVI y XVII. La imagen está concebida para ser vista lateralmente. La cabeza de Cristo se inclina hacia la derecha, mientras la pierna derecha aparece más elevada que la izquierda. La cabeza y el tórax se apoyan sobre una almohada. Los brazos se extienden sobre el lecho, buscando simetría. La idea de muerte se transmite enfatizando las heridas y llagas, siguiendo las pautas estilísticas de la escultura religiosa española del Barroco. Es un desnudo anatómico de gran perfección.