Portada » Geología » Explorando el Universo: Componentes, Movimientos y Origen Cósmico
El universo es un inmenso vacío que alberga miles de millones de galaxias, cada una con sus propias estrellas, planetas y nebulosas (nubes de polvo y gas).
La composición química del universo es principalmente:
Estos elementos se identifican mediante el análisis del espectro de la luz. Cada elemento tiene un espectro característico, que se manifiesta en la absorción de ciertas radiaciones, creando franjas negras en el espectro.
Todos los componentes del universo están en constante movimiento: las estrellas giran alrededor del núcleo de sus galaxias, los planetas alrededor de las estrellas y los satélites alrededor de los planetas.
Las masas se atraen con una fuerza directamente proporcional a sus masas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que las separa. La fórmula es: F = G · M · m / d2, donde G es la constante de gravitación universal (6.667 · 10-11 N · m2 / kg2).
Para poner un objeto en órbita, es necesario comunicarle una velocidad muy grande (velocidad de escape). Al girar, la fuerza de atracción se iguala a la fuerza centrífuga.
Los agujeros negros son zonas de altísima densidad, donde la fuerza de atracción es tan enorme que ni la luz puede escapar. Al ser atrapados, los objetos aceleran y emiten radiación (rayos X). Existe una distancia de seguridad para evitar ser atrapado. Cuanto más atrapa un agujero negro, más fuerza tiene.
Toda la materia estaba concentrada en un espacio muy pequeño. Las galaxias se separan y, retrocediendo en el tiempo, se deduce que toda la materia estuvo unida en un punto (huevo cósmico).
Cuando un objeto emite ondas mientras se mueve, estas se distorsionan. Si el emisor se acerca, la onda se comprime (longitud de onda más corta), y si se aleja, la onda se estira (longitud de onda más larga).
El helio se forma a partir de la fusión nuclear de dos átomos de hidrógeno. En estrellas mayores que el sol, se forman elementos más pesados hasta llegar al hierro. A partir de este elemento, no hay suficiente energía para seguir añadiendo protones.
Las fuerzas de atracción concentran la masa en el centro de la estrella, generando tensiones que culminan en una explosión conocida como supernova, donde se forman el resto de los elementos químicos.