Portada » Lengua y literatura » Exploración de la Literatura Española: Desde el Mester de Clerecía hasta el Barroco
1. Mester de clerecía / Libro del buen amor: El mester de clerecía surge en el siglo XIII y sus principales características son los textos narrativos de carácter religioso o heroico, con una intención moral o didáctica y escritos en versos con el empleo de la cuaderna vía. Sus obras se leían individualmente o colectivamente y se difundían oralmente a través de los juglares o sermones clérigos. El Libro del Buen Amor fue escrito por Juan Ruiz, el arcipreste de Hita, y esta obra representa una autobiografía dividida en una serie de aventuras amorosas donde hay un tercer personaje. De todas esas aventuras destaca la de Don Melón y Doña Endrina, donde interviene una mediadora, Trotaconventos. En la estructura de la obra encontramos un yo protagonista, hay la introducción de digresiones didácticas o moralizantes y exempla para convencer a sus interlocutores. También se intercalan piezas líricas de métrica variada y dos composiciones alegóricas que son el debate del protagonista con Don Amor y la batalla de Don Carnal y Doña Cuaresma. El sentido de esta obra es enseñar y recoger composiciones poéticas, justificando así el didactismo y la introducción de un cancionero; además de eso, quiere inducir al buen amor. Esta obra se caracteriza por una constante ambigüedad y hay críticos que hacen hincapié en el carácter didáctico, mientras que otros críticos consideran que es un manifiesto de alegría vital.
2. Los Romances: Son poemas narrativos y anónimos destinados al canto. Encontramos los romances viejos, que son poemas de tradición oral entre el fin de la Edad Media y mediados del siglo XVI, y los romances nuevos, que son poemas donde tratan de imitar la forma y el estilo de los antiguos y son compuestos por poetas a finales del siglo XVI. Se clasifican en: Romances épicos medievales, procedentes de un cantar de gesta o de otra fuente literaria en las que se destacan las virtudes de héroes y reyes; Romances de tema francés carolingio, basados en la épica francesa; Romances noveleros, sobre los personajes romancistas; Romances de tema histórico, que narran sucesos o acontecimientos de la historia medieval castellana; Romances fronterizos, que son narraciones sobre luchas fronterizas entre musulmanes y cristianos; Romances de ficción, que tienen subdivisiones como romances amorosos, amor desgraciado, etc.; y Romances bíblicos, grecorromanos y religiosos, que narran episodios de la Biblia y todo lo relacionado con ella. Los romances se pueden estructurar en cuentos, que son historias completas; escenas, que se centran en un episodio; y diálogos, que solo utilizan el discurso dramático. El estilo de estos romances se basa en el empleo de verbos singulares como el presente histórico y el pretérito imperfecto de indicativo, el arcaísmo, que son elementos lingüísticos de forma anticuada, y el uso de fórmulas como la conativa, epítetos épicos y paralelismos. Por último, emplean repeticiones, antítesis y enumeraciones.
3. Tema Jorge Manrique: Toma como tema a la muerte, que es un personaje vengador, despiadado y poseedor de un poder igualatorio. En las Coplas, la presenta como ministra de Dios y también utiliza en las Coplas como tema la fama de los actos realizados en esta vida, que repercute en el goce que los bienaventurados tendrán en la otra vida y la vida eterna por las buenas obras realizadas en la vida.
4. Celestina: Sus personajes son criaturas singulares que se configuran por sus parlamentos y por los juicios y descripciones de los demás personajes. Son Calisto, que es un caballero cómico que representa un amor cortés parodiado y la locura amorosa; Melibea, que es el personaje trágico de la obra; Celestina, también llamada la alcahueta, que representa un ataque contra todo lo establecido y dedicó su vida al comercio con la sexualidad; Sempronio y Pármeno, que son los criados de Calisto; Eliria y Areúsa, los amores de las prostitutas amigas de Celestina; y Pleberio y Alisia, que son los padres de Melibea. El fin de esta obra se basa, por una parte, en la intención moralizadora, es decir, mostrar la destrucción que puede provocar un loco amor y advertir sobre la maldad de los alcahuetas y falsos criados; pero, por otra parte, hay críticos que dicen que esta obra muestra una visión desengañada y pesimista del mundo. El tema central de esta obra son las malas artes sutiles y engañosas de la Celestina para concretar la relación de los enamorados, y se puede tomar como otro tema el castigo que puede caer sobre los amantes que violan las leyes civiles y religiosas.
5. Lírica o poesía renacentista: La nueva poesía desarrolla temas e ideales que vienen del neoplatonismo de la literatura clásica y poesía italiana, influida por Petrarca. El tema principal es el amor heredado de la Edad Media, que manifiesta su sufrimiento por la ausencia o muerte de la amada o por falta de correspondencia. La descripción de la mujer corresponde al modelo de la belleza renacentista y aparece en conjunto a imágenes de la naturaleza. Otro tema es la naturaleza, derivada del locus amoenus, y el tópico carpe diem, que se asocia con el amor y se representa con imágenes relacionadas con ciclos de muerte y renovación de la naturaleza. También se toman como temas menores la amistad y el elogio cortesano. En la segunda mitad del siglo XVI, se denomina la poesía religiosa y moral, y destacan los tópicos y motivos de Beatus ille y el conocimiento de sí mismo.
6. Garcilaso de la Vega: La obra breve de Garcilaso produjo la revolución de la lírica española. El tema de su obra es el amor, expresado desde la melancolía y la tristeza por la ausencia de la amada. El amor se relaciona con la naturaleza, que con el tópico del locus amoenus refleja el mundo interior del yo poético. En otras obras hay temas como la amistad, el destino, la fortuna o la necesidad de denominar las pasiones. Su estilo se caracteriza por aspirar a una naturaleza expresiva, donde destaca el uso de epítetos y el empleo de metáforas, personificaciones e hipérbatos.
7. Poesía Barroca: Esta siguió cultivando los antiguos temas, aunque haya textos que expresen la idea de desengaño y la conciencia de crisis de la época. Sin embargo, el rasgo más general es la diversidad de temas, motivos y enfoques. Se clasifican en: Poesía amorosa, en la que permanece la idea del amor renacentista; Poesía filosófica y moral, que se caracteriza por el pesimismo, donde predomina el desengaño, el contraste entre realidad y apariencia, la fugacidad de la vida y la muerte; Poesía religiosa, que encontramos celebrativa, aunque destaca la reflexión espiritual y el arrepentimiento; y Poesía burlesca, donde se encuentra el carácter paródico y humorístico, además de la burla y el ataque personal.
8. Francisco de Quevedo: Este escribió tanto poemas de arte menor como de arte mayor, y se clasifican en: Poesía amorosa, donde desarrolla la belleza de la amada, hay sufrimiento y llanto del amante, una locura amorosa y un amor constante más allá de la muerte; Poesía metafísica y moral, influida por la moral cristiana e ideas estoicas, que muestran un gran desengaño; Poesía satírica y burlesca, en la que critica costumbres y tipos humanos y sociales de la época; y Poesía religiosa, en la que combinan temas religiosos con morales. Quevedo tenía un estilo peculiar, ya que utilizaba recursos retóricos y la práctica de la agudeza; sus versos sobresalían por las metáforas, comparaciones, antítesis y contrastes, y en el estilo grave sobresale el empleo de un léxico culto e hipérbatos. Quevedo, además, es maestro de la creación léxica y de la modificación de frases hechas y refranes.
9. Teatro Barroco / Comedia nacional: Fue creado por Lope de Vega, en el que mezcla lo trágico y lo cómico debido a que se da en la vida propia. En el siglo XVII ya existen auténticas tragedias y destaca: las unidades dramáticas, donde sus obras barrocas no respetan esta unidad y sus dramaturgos utilizan cambios de escenarios y de tiempo; en cambio, la unidad de acción se mantuvo como principio general; la división del drama, donde dividen sus obras en tres actos: planteamiento, nudo y desenlace; el decoro, lenguaje y polimetría, donde el decoro se relacionaba con la verosimilitud, que dependía del tipo de obra. Lope quería un lenguaje puro y una métrica que se ajustara al personaje y a la situación. Hay dos tipos de dramas que se encuentran dentro de las obras largas: uno de carácter serio, donde se clasifican en tragedias, comedias serias (tragicomedia), autos sacramentales; y otro de índole cómica, en las que hay comedias de capa y espada, de figurón, palatinas y burlescas. Las obras cortas aparecen intercaladas entre las obras extensas y destacan los subgéneros: entremeses, en los que hay un solo acto; loas, que se usan como introducción en la obra con el fin de lograr el silencio del público; bailes, que se daban en el intermediario de la representación; jácaras, que son romances cantados; mojigangas, que eran danzas que surgían con movimientos ridículos; y follas, que eran mezclas de trozos de algún género cómico que se utilizaban como pretexto para cantar y bailar.