Portada » Geografía » Evolución y Sectores Clave de la Industria en España: Un Recorrido Completo
España reunía condiciones favorables para la industrialización, como las Reales Fábricas y suficientes recursos minerales. Sin embargo, existían factores negativos como la insuficiencia energética, una mentalidad excesivamente rural y la ausencia de un mercado interior consolidado.
En la segunda mitad del siglo XIX, la Revolución Industrial se consolidó en Europa. En España, se evidenció un notable retraso. Las facilidades para la exportación intensiva de minerales beneficiaron a la industria europea, convirtiendo a España, un paraíso de minerales metálicos, en un país exportador de materias primas. España era el principal productor de hierro, exportado en su mayoría a Gran Bretaña desde el puerto de Bilbao. La escasa industrialización española avanzó bajo el signo del proteccionismo. Zonas clave: Vizcaya, Barcelona, Madrid.
Los factores favorables fueron la protección arancelaria, la repatriación de capitales tras la pérdida de las colonias y el incremento de las exportaciones agrarias e industriales durante la Primera Guerra Mundial.
La Guerra Civil truncó la fase expansiva de la industria española. Tras su fin, se afrontó la reconstrucción y recuperación económica. En 1941 se creó el Instituto Nacional de Industria (INI), caracterizado por la dualidad: una gran empresa de capital público y un sector de pequeñas y medianas empresas de capital privado. Se consolidaron algunas regiones industriales como Cataluña, País Vasco y Madrid.
El periodo entre 1959 y 1975 supuso un notable crecimiento económico, impulsado por los Planes de Desarrollo y una política regional basada en polos de desarrollo.
Las causas de la crisis en España fueron: externas, como la dependencia energética y la mundialización de la economía; e internas, como el ocaso del franquismo. La reconversión industrial se centró en sectores maduros como la siderurgia, la construcción naval y la industria textil, especialmente tras el ingreso de España en la Unión Europea.
Los factores principales son:
La industria transforma las materias primas en productos aptos para el consumo o para nuevos procesos industriales. Las materias primas se clasifican en:
1. De origen mineral: Se encuentran en la superficie terrestre y se concentran en yacimientos. Se dividen en:
2. De origen orgánico:
La energía es la fuerza que se transforma en trabajo mecánico. Se clasifican en:
Según su potencialidad, pueden ser:
Carbón: En desuso. En España se localiza en el norte y sur de la Cordillera Cantábrica y el Sistema Ibérico.
Petróleo: Primera fuente de energía, muy utilizado en automóviles, calefacción y producción de electricidad. Hay escasos yacimientos en Burgos y Tarragona.
Uranio: Se encuentra en las penillanuras occidentales de la Meseta (Badajoz, Salamanca). Desde 1984, el gobierno decidió no construir más centrales nucleares por motivos de seguridad y gestión de residuos.
Gas natural: Energía limpia y barata. España lo importa de Argelia, Libia y Europa del Este a través de una red de gasoductos.
Energía hidráulica: Energía renovable que depende de las precipitaciones anuales. Se obtiene del agua embalsada en pantanos. El máximo potencial está en el norte y el mínimo en el sur y este.
Energía eólica: Aprovecha la fuerza del viento a través de aerogeneradores. Se usa para electricidad o energía mecánica.
Energía solar: Se aplica a la producción de calor o electricidad.
Se distinguen industrias de base, de bienes de equipo y de bienes de uso y consumo.
Sus áreas metropolitanas han consolidado una potente y diversificada industria. Han experimentado la crisis y reconversión de sectores, y la revitalización con establecimientos dinámicos y de alta tecnología.
Especialmente en la cornisa cantábrica, debido a la crisis de los sectores maduros. Afectó a Asturias, Cantabria y País Vasco.
Áreas periurbanas: Instaladas por la proximidad a centros urbanos, accesibilidad a mercados y centros de distribución, facilidades de instalación y dotaciones de suelo industrial. Forman franjas o coronas con industrias diversas. Los ejes de desarrollo más dinámicos son el Eje del Ebro y el Eje del Mediterráneo.
Corresponden a zonas interiores de la península y algunas periféricas. La escasez industrial se debe a la baja densidad de población y la ausencia de tradición industrial.