Portada » Lengua y literatura » Evolución de la Poesía y el Teatro en España: Desde la Posguerra hasta la Actualidad
Se concibe la poesía como una herramienta para transformar la sociedad y se reivindica una poesía destinada a la mayoría. Los temas son la desigualdad social, la falta de libertad y la preocupación por España. El estilo es sencillo y cercano al lenguaje coloquial, directo y expresivo. En la métrica, se prefieren los versos libres.
Rechazo del realismo social y preocupación por el hombre y lo subjetivo. Los escritores muestran un inconformismo y una actitud crítica con ironía y humor. Los temas más utilizados son sobre el amor, el erotismo, la amistad, la soledad, el fracaso… Utilizan un estilo muy elaborado y predomina el verso libre.
Suelen agruparse por su lugar de nacimiento:
Antología: Nueve novísimos poetas españoles, de José María Castellet. Adaptan actitudes provocadoras, tienen un carácter culturalista. En la temática combinan lo personal (amor, erotismo…) con lo social y político (sociedad de consumo). Estos poetas tienen gran interés por el lenguaje.
El novísimo más destacado es Pere Gimferrer, autor de Arde el mar y La muerte en Beverly Hills.
Desde 1975 la poesía española es libre de las ataduras de la Guerra Civil y la posguerra. A partir de este momento, la vanguardia y la tradición decidirán el curso de la poesía. La poesía presenta una gran variedad de tendencias: surrealista, culturalista, experimental, comprometida, erótica y poesía de la experiencia.
Poeta chileno que ejerció gran influencia en la poesía española. Fue el impulsor de la tendencia de rehumanización de la poesía, a partir del Surrealismo y más tarde de la poesía social. Recibió el Premio Nobel en 1971. Finalmente, murió en 1973. Neruda fue un poeta capaz de todos los registros y dominador de todos los estilos, formas y recursos. Ha quedado como uno de los mayores exponentes de poesía en castellano de todos los tiempos.
Al terminar la guerra se produce una gran pobreza teatral. En los primeros años se utilizó como medio de propaganda política e ideológica al servicio del régimen. Pero es el teatro comercial el que domina los escenarios españoles. Dentro de esta línea se suele distinguir la comedia burguesa y el teatro humorístico.
A finales de los años 40 aparece un teatro que evoluciona hacia el realismo social en los años 50. Sus protagonistas son víctimas de la monotonía, la injusticia y la opresión de la sociedad; y fracasan en su búsqueda de la libertad y la felicidad.
Se inicia sobre los años 50. Los temas principales de este periodo serán dos: la denuncia de la injusticia y desigualdad social, y la alienación de los seres humanos. La aparición de estas obras de contenido crítico y denunciador es posible gracias a tres razones: la necesidad de que el teatro exprese los problemas del momento, la aparición de un nuevo tipo de público que es joven y universitario, y la relajación de la censura.
La renovación teatral de los años 60 va ligada al teatro independiente. Se constituyen compañías con directores y actores, lo que permite un teatro al margen del comercial. Se inclinan por el teatro como un espectáculo, de tono vanguardista experimental. En este teatro pierde protagonismo el texto literario en beneficio de la escenografía y se incorporan efectos especiales.
Hacen un teatro innovador vanguardista y muy comprometido social e ideológicamente. Los más conocidos son el TEI, EL TEU, La Fura dels Baus…
Tras la muerte de Franco, la llegada de la democracia favorece la recuperación del teatro. Se elimina la censura y vuelven escritores exiliados. Desde los años 80, el teatro se caracteriza por la libertad y la dispersión de tendencias, aunque destacan tres rasgos: renovación de los teatros nacionales, retorno a la línea tradicional, y las compañías independientes que buscan un teatro como medio de transmisión de ideas.
Su teatro, de acento trágico, se caracteriza por el sentido ético y predominan unas constantes: la tragedia del individuo, dualidades de los personajes, y el tema de España.