Portada » Lengua y literatura » Evolución de la Novela Española del Siglo XX: Un Recorrido por sus Corrientes y Autores
Las innovaciones novelescas de principios del siglo XX son consecuencia de la visión pesimista de la cultura occidental en este momento. Ante la imposibilidad de encontrar significado a la existencia, el mensaje es de frustración y desesperanza. El siglo comienza con la Generación del 98, cuyas características principales son:
Autores destacados: Miguel de Unamuno, Azorín, Pío Baroja, entre otros.
Otro movimiento característico es el Novecentismo o Generación del 14, que supone un cambio de rumbo respecto al 98 y al Modernismo, prefiriendo un enfoque del problema español más sereno e intelectual. Escriben novelas diferentes tanto estructural como estilísticamente. Destacan Pérez de Ayala y Gabriel Miró.
En los años 20 surgió una producción novelística vinculada a las vanguardias. Su iniciador fue Ramón Gómez de la Serna, cuya creación más original es la greguería, una asociación ingeniosa de ideas. La diversidad novelística de la época es notable y, junto a las tendencias ya vistas, abundan relatos que continúan orientaciones estéticas anteriores como el Realismo Tradicional, el Naturalismo, la Novela Erótica y el Regeneracionismo.
El ambiente de desorientación cultural de la posguerra es muy acusado en la novela. La década de los 40 es una etapa de búsqueda de fórmulas narrativas. Dos fechas marcan la resurrección del género:
Muchos autores seguirán la senda de reflejar lo amargo de la vida, junto a otros caminos que van de la creación imaginativa al conformismo. Algunos autores importantes son Zunzunegui, Torrente Ballester y, sobre todo, Miguel Delibes, cuya trayectoria narrativa constituye una síntesis de las tendencias desde la posguerra hasta la actualidad. Su primera obra, La sombra del ciprés es alargada, muestra la influencia del realismo tradicional y el tremendismo.
Además de la situación en España, hay que tener en cuenta la de los autores exiliados, que desarrollan su obra con temáticas sociales y de recuperación de la realidad española, desde el realismo tradicional hasta el vanguardismo. Autores importantes: Ramón J. Sender, Rosa Chacel, Max Aub.
En los años 50 se consolida la literatura de los 40 y surge la Generación de Medio Siglo, con el realismo social como perspectiva dominante. Destacan Cela con La Colmena y Delibes con El camino, que reflejan ambientes sociales concretos. Entre 1954 y 1962 surgen autores como Aldecoa, Sánchez Ferlosio y Caballero Bonald, para quienes el novelista debe ejercer un papel de testimonio o denuncia social. Los temas más frecuentes son la vida del campo, el mundo del trabajo, la burguesía y la guerra. Se prefiere un estilo sencillo y directo.
A partir de 1960, surge el cansancio del realismo y se pide un enriquecimiento artístico. En 1962, Tiempo de silencio de Luis Martín-Santos abre un nuevo camino, combinando la denuncia social con la renovación de las técnicas narrativas. Influye el boom de la novela hispanoamericana y se rehabilita a novelistas imaginativos y creadores. La novela adquiere complejidad en temas, estructura, narración, descripción y estilo.
A finales de los 60 surge el experimentalismo, que rechaza la anécdota. Destaca Juan Benet con Volverás a Región.
A partir de los 70, la novela española se caracteriza por la coexistencia de distintas tendencias y estilos. Se observa la vuelta al interés por la historia, variedad estilística, variedad de temas y el interés por la literatura dentro de la literatura.