Portada » Magisterio » Evaluación de Proyectos Educativos: Metodologías, Tipos y Objetivos
1. Definición y Propósito de la Evaluación
Según Utac, la evaluación es “la recogida y análisis sistemático de toda aquella información para determinar el valor o mérito de las acciones realizadas en la fase de ejecución”, lo que equivale a “emitir juicios de valor”. La evaluación implica una valoración y una comparación entre la situación actual y la situación deseada.
2. Efectos de la Evaluación
Medina y Villar definen la evaluación como un “proceso sistemático diseñado intencional y técnicamente” para la recogida de información, con el fin de valorar la calidad y los logros del objetivo.
3. Evaluación y Toma de Decisiones
L. Weiss reconoce que la evaluación puede contribuir a la toma de decisiones sobre el proyecto y la programación futura.
4. Evaluación para la Mejora Continua
Cembranos define la evaluación como un proceso de recogida y análisis de información, con la intención de utilizar dicho análisis para mejorar el programa, actividad o intervención.
Considera el contexto y la realidad de los usuarios. Su objetivo es obtener conclusiones que faciliten el diagnóstico para plantear el proyecto, ayudando a programar los objetivos y tomar decisiones sobre la planificación. Esta fase puede implicar una reorientación de los objetivos.
El diseño del programa o proyecto debe ser evaluado, analizando cada elemento que lo compone. Se deben responder preguntas como:
Sirve para guiar el proceso y obtener la información necesaria para realizar ajustes durante la ejecución del programa. Permite conocer:
Para llevar a cabo esta evaluación, el equipo evaluador se plantea:
Tiene como misión describir y juzgar los resultados de un programa de intervención. Sirve para evaluar los efectos que ha producido el programa, tanto los pretendidos y positivos, como los no buscados y negativos. Facilita la toma de decisiones sobre la continuidad del proyecto.
Las cuestiones que se pueden plantear son:
La responsabilidad recae sobre el equipo de profesionales, quienes evalúan a partir de la información recogida, especialmente en la evaluación continua, donde la retroalimentación proporciona claves sobre aciertos, carencias, errores, etc.
Se realiza por evaluadores ajenos al equipo de intervención, requiriendo un esfuerzo y tiempo adicional.
Se realiza por un equipo de profesionales internos y externos.
Evaluación a sí mismo.
La finalidad de cualquier evaluación es la mejora del proceso de intervención.
En cuanto a sus posibles objetivos, dependerán de las funciones para las que se planteen:
Se considera indicador a una variable que refleja una realidad aparentemente inobservable, obteniendo datos de gran utilidad para el fin con los que fueron redactados. Estos son importantes.
Es necesario identificar qué procesos son sensibles a la formación de sucesos y detectar qué variables intervienen en la actividad principal de nuestro proyecto.
Una vez hechos estos, permiten estandarizar el control de la actividad y obtener datos de una forma sistemática y comparable. Ejemplos: