Introducción A lo largo de los siglos XII y XIII se consolidaron los cuatro reinos de la Península Ibérica: Portugal, Castilla y León, Navarra y la Corona de Aragón. La expansión militar fortaleció a los dos grandes Estados de la Península: el reino de Castilla y la Corona de Aragón.
El Renacer Urbano Tras la caída de Roma en el 476 d.C., surgieron unidades políticas que dieron lugar a estados nación, permitiendo la reaparición del comercio entre regiones. Con ello, las ciudades se convirtieron en lugares de intercambio y, secundariamente, en centros de producción