Portada » Biología » Estructura y Función del Sistema Nervioso
Transmiten información recogida de estímulos externos (sonido, luz) o internos (nivel de oxígeno en sangre). Estas neuronas unidas pasan información en forma de impulsos nerviosos.
Transmiten los impulsos nerviosos hasta los órganos efectores como músculos o glándulas.
Conectan a unas neuronas con otras formando una red. Se transfiere la información en lugares llamados sinapsis. Las neuronas aferentes y las eferentes junto con las interneuronas forman un circuito neuronal.
Las células de la glía o células gliales están estrechamente relacionadas con las neuronas de muchas maneras, facilitando su nutrición y también retiran productos de desecho o restos de tejidos. Hay distintos tipos de células, algunas forman la vaina de mielina, otros son esenciales en los procesos de regeneración tras una herida cerebral.
Las neuronas están rodeadas de un medio líquido, donde se encuentran disueltos diferentes iones. Los iones principales son los de sodio (Na+) y en menor cantidad se encuentran iones de potasio (K+). Por el contrario, dentro de la célula se encuentra mayor cantidad de iones K+ que de Na+.
Esta distribución desigual genera una diferencia de voltaje o diferencia de potencial, la membrana está polarizada. Este potencial de membrana o potencial de reposo es el estado de una neurona que no está transmitiendo un impulso nervioso.
El impulso nervioso se genera cuando se modifica la permeabilidad de la neurona a los iones de sodio.
La apertura de canales de sodio dura muy poco. Estos canales se cierran y la membrana vuelve a ser impermeable. Los cambios de voltaje provocan que los canales de potasio se abran más lentamente. Más tarde salen los iones K+ de la célula. Este intercambio genera la despolarización y luego se repolariza.
Con esta renovación constante, el impulso nervioso recorre distancias sin que cambie la intensidad. Cuando los canales de sodio se cierran el impulso nervioso entra en un periodo refractario que dura milisegundos.
Esta vaina aísla eléctricamente a la neurona del medio extracelular. Esta capa no es continua, está interrumpida en zonas llamadas nodulos de Ranvier. Estas interrupciones permiten que los iones Na+ y K+ puedan moverse de un lado a otro de la membrana y producir la despolarización. El impulso «salta» de un nódulo a otro haciendo la conducción más rápida.
Según sean las estructuras que se pongan en contacto podemos hablar de sinapsis entre:
La neurona que transmite información es la presináptica y la que recibe la información, es la postsináptica. Puede ser que las membranas celulares de ambas neuronas estén unidas, pasando la información de una a otra a través de poros específicos, son las sinapsis eléctricas.
La sinapsis química, se da cuando las membranas están separadas por una hendidura y se comunican a través de sustancias químicas que son los neurotransmisores.
Los neurotransmisores son sustancias que fabrican las neuronas. Están «empaquetadas» en orgánulos esféricos que se acumulan en la parte terminal de los axones.
Cuando un neurotransmisor se une a su receptor postsináptico se produce la entrada de iones que genera un cambio eléctrico.
Pueden ser excitatorios o inhibitorios, según el tipo de canal que se abra y los iones que entren.
El lugar donde una neurona motora hace sinapsis con un músculo esquelético se denomina unión neuromuscular o placa motora. La llegada del impulso nervioso produce la liberación del neurotransmisor acetilcolina, que despolariza la célula muscular (postsináptica) y provoca la contracción.
La médula espinal presenta distintas regiones, según su ubicación se llaman cervical, torácica, lumbar y sacra. La materia gris ubicada en el centro contiene varios tipos de neuronas que controlan los músculos voluntarios y el SNA, otras que se comunican con el cerebro y otras con la médula espinal.
La neurona es la unidad funcional y estructural del sistema nervioso. Produce y transmite el impulso nervioso.
En la cabeza y en la columna vertebral. Es un conjunto de órganos blandos protegidos por 3 membranas, meninges, y por estructuras óseas: el cráneo y la columna vertebral. Presenta cavidades llenas de líquido cefalorraquídeo que actúa como amortiguador de golpes, y a través de él se intercambian sustancias y eliminan productos de desecho.
Está formado por el encéfalo y la médula. El encéfalo a su vez está formado por el cerebro, el tronco cerebral y el cerebelo.
Integra y controla todas las actividades fisiológicas (digestión y el latido cardíaco). Recibe y procesa información sensorial y ordena las respuestas. Controla y regula la conciencia, la memoria, las emociones y la capacidad de generar pensamientos.
Se extiende por todos los tejidos y órganos del cuerpo. Las fibras del sistema nervioso periférico forman nervios que pueden conectarse directamente con el cerebro. Estos entran y salen a través de espacios entre las vértebras.
Lo forman todos los nervios que se extienden hasta los tejidos y órganos del cuerpo.
Sistema Nervioso Somático (SNS): controla la contracción de los músculos voluntarios y movimientos involuntarios o reflejos. Sistema Nervioso Autónomo (SNA): regula la actividad de los músculos lisos, del corazón y glándulas.
La frecuencia cardíaca se regula a través de dos subsistemas: el Sistema Nervioso Simpático y el Parasimpático. Surgen de distintos centros del SNC.