Portada » Historia » El reinado de Fernando VII y sus etapas
Acabada la guerra, las Cortes se trasladan a Madrid. Fernando recupera su trono entre muestras de calor popular y de prestigio. Era el símbolo de los 6 años de resistencia y encarnaba grandes expectativas de cambio.
El retorno al absolutismo se inscribe en un contexto favorable a la vuelta al Antiguo Régimen en Europa a la caída de Napoleón. Las potencias vencedoras se reunieron en el Congreso de Viena y crearon la Santa Alianza, una unión entre las monarquías absolutistas para acabar con cualquier brote liberal.
A lo largo de los 3 años, las Cortes aprobaron una legislación reformista para acabar con el Antiguo Régimen. Se suprimió la vinculación de la tierra, se abolieron los señoríos jurisdiccionales y territoriales, se desamortizaron sus bienes y se restableció la milicia nacional.
Los moderados buscaban pactar con el rey, mientras que los radicales querían una aplicación estricta de la Constitución. Un golpe militar absolutista puso fin al gobierno liberal.
En 1823, el rey declaró la nulidad de todo lo aprobado por las Cortes y desencadenó una represión contra los liberales. La cuestión sucesoria dominó la parte final del reinado, dando inicio a una guerra civil entre carlistas e isabelinos.
La burguesía criolla asumió el poder cuando las tropas españolas abandonaron el continente. El proceso emancipador se dividió en dos fases, culminando en la independencia de la mayoría de las colonias en 1824.