Portada » Filosofía » El Pensamiento de Platón: Filosofía, Moral y Sociedad Ideal
Platón nace en Atenas en el año 427 a.C., durante el siglo V a.C., en plena época de las Guerras del Peloponeso (431-404 a.C.) que enfrentaban a Atenas y Esparta. A pesar de ser ateniense, Platón admiraba el modelo espartano. En aquel entonces, Atenas se había convertido en la polis hegemónica al liderar una liga de polis que le proporcionaban recursos a cambio de defensa. Sin embargo, esta situación generó descontento entre las polis aliadas, que vieron en Esparta una alternativa a la ambición ateniense. La democracia ateniense contrastaba con la oligarquía espartana. Tras la derrota ateniense en el 404 a.C., se instauró en Atenas el gobierno de los Treinta Tiranos, de carácter aristocrático, que tuvo una corta duración. Esparta impuso un nuevo régimen aristocrático en Atenas, pero al año siguiente se restauró la democracia, aunque debilitada y corrupta. En este contexto, la condena a muerte de Sócrates en el año 339 a.C. marcó profundamente a Platón, quien decidió dedicar su vida a la filosofía.
La sociedad en la que vivió Platón era esclavista y estaba fuertemente jerarquizada, excluyendo a esclavos, mujeres y extranjeros. Su economía se basaba en la agricultura y el comercio. Las constantes guerras generaban crisis económicas y conflictos sociales. Las polis griegas compartían una tradición literaria y religiosa politeísta, donde los dioses eran arbitrarios. La educación se centraba en la música, la gimnasia y la retórica.
Platón conoció la filosofía presocrática. Fue alumno de Cratilo, quien a su vez lo fue de Heráclito. Le influyó la idea del dualismo de los pitagóricos y la importancia de las ideas. De Parménides tomó la idea de que la verdad se alcanza mediante la razón y las características del ser humano (eterno, inmutable, imperecedero, perfecto). Sin embargo, su maestro más influyente fue Sócrates, de quien adoptó la importancia de la filosofía para encontrar la verdad a través de la búsqueda de conceptos. Platón compartía esta visión, pero otorgaba a los conceptos una realidad propia, llamándolos ideas. Otra influencia socrática fue el intelectualismo moral.
El pensamiento de Platón, conocido como la teoría de las ideas, buscaba dar respuesta a cuestiones como la existencia de valores morales universales, la construcción de una ciudad-estado ideal y la existencia de una verdad eterna e inmutable alcanzable mediante la razón humana (alma inmortal).
Para Platón, existen dos dimensiones de la realidad: el mundo real (de las ideas) y el mundo sensible (aparente). El mundo real está compuesto por las ideas, que son la esencia de las cosas particulares, lo que realmente somos. Las ideas son eternas, inmutables y existen fuera del tiempo y el espacio. La idea suprema es el Bien, que permite que las demás ideas sean conocidas. El mundo sensible es un reflejo imperfecto del mundo de las ideas, un mundo de sombras. Está sujeto al cambio, al nacimiento y a la muerte.
Platón concebía al ser humano compuesto por cuerpo (perteneciente al mundo sensible) y alma (perteneciente al mundo de las ideas). El alma es inmortal y está atrapada en el cuerpo. Platón defiende la inmortalidad del alma con tres argumentos:
Para Platón, ser virtuoso es conocer. La virtud se alcanza a través del conocimiento. Debemos regular las tres partes de nuestra alma: apetitiva, irascible y racional. La virtud en la parte apetitiva es la moderación; en la irascible, la fortaleza; y en la racional, la prudencia. La ética busca el equilibrio entre estas tres virtudes para alcanzar la justicia. Solo los filósofos, aquellos que conocen el Bien, pueden guiar la ciudad hacia la justicia.
Platón concebía la sociedad como un grupo de personas con necesidades que deben satisfacerse de forma conjunta. Para ello, propone la división del trabajo en función de las capacidades de cada individuo. Distingue tres grupos sociales:
La pertenencia a un grupo social se determina desde la infancia a través de la educación proporcionada por el Estado. Los guardianes reciben entrenamiento militar, los productores aprenden un oficio y los gobernantes reciben una educación superior.