Portada » Filosofía » El empirismo y el marxismo: dos corrientes filosóficas y políticas
El empirismo frente al racionalismo continental surge como un movimiento opuesto al racionalismo continental. El empirismo encuentra en la razón unos mecanismos que organizan las sensaciones para formar ideas. Debemos entender la obra política de Locke en un contexto de lucha contra el absolutismo. Locke combatía dos teorías: el origen divino del poder y la teoría absolutista de Hobbes. Locke rebate la teoría del origen divino del poder afirmando que Dios no ha distinguido a nadie con el signo de una autoridad natural. En la situación de naturaleza, los hombres son iguales y libres. La ley natural otorga a todos los seres humanos el derecho a la vida, a la propiedad y a la libertad. Si estos derechos son violados, el ser humano tiene derecho de resarcirse. Esta situación se convierte en un estado de guerra cuando, por causa de la codicia humana, no se respetan los derechos individuales naturales. Para protegerse de los que violan estos derechos, se consiente en constituir una sociedad política mediante un contrato social cuya finalidad es la protección de los derechos individuales. En él, los individuos renuncian a tomarse la justicia por su propia mano, sometiéndose a un poder legislativo y a un poder ejecutivo. Sin embargo, este poder tiene como finalidad lograr la paz y la seguridad de todos. El pueblo conserva siempre el poder de revocar el poder otorgado. El contrato social da lugar al Estado liberal. Este poder debe ejercerse respetando los derechos individuales ya señalados. Si no lo hace, su poder es revocable. El origen del estado es convencional, surge como consecuencia del consentimiento interesado de los individuos. El contrato social establece obligaciones, pero también derechos, y configura un sistema político liberal (no absolutista) donde el poder está dividido y es revocable por el pueblo. Todos los poderes deben subordinarse al poder legislativo y éste debe supeditarse a la ley natural.
La crítica marxista y la teoría de las alineaciones
Según el marxismo, todas las miserias del hombre se reducen a cinco alineaciones fundamentales:
El materialismo histórico y dialéctico
El materialismo histórico es un método que consiste en buscar la causa final y la fuerza propulsora de todos los acontecimientos históricos. El marxismo considera que la realidad no es el ser, sino el movimiento, devenir, pasar. Las causas últimas de todas las modificaciones sociales deben buscarse en las transformaciones de los modos de producción y de intercambio. Las superestructuras son efectos, productos de una estructura económica o infraestructura. La historia es una evolución a saltos, originada en la contradicción interna de cada momento histórico. El marxismo reduce la familia a un momento del proceso colectivo de producción. La era capitalista se divide en dos grandes grupos enemigos, en la que el proletariado solo es tal cuando adquiere conciencia de clase. La dictadura del proletariado representa los intereses de la clase proletaria. El nuevo Estado se extinguiría solo cuando ya no quede a quien reprimir, es la misma idea de propiedad lo que hay que destruir. El materialismo dialéctico intenta abarcar todos los aspectos de la realidad. Considera que la materia se encuentra en movimiento. El hombre aparece en primer lugar como un ser de necesidad y la naturaleza aparece como elemento de su satisfacción. La praxis se reduce a producción y la teoría se reduce a praxis.
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